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10 ENFERMEDADES NEURODEGENERATIVAS continuo de degeneración: muerte celular, interrupción de la sinapsis o comunicación celular, y en conjunto, una gran toxicidad en el cerebro”. La acumulación de estos agregados proteicos en el interior de la neurona empieza en el hipocampo, lugar donde se ‘fabrica’ lamemoria, por eso el primer síntoma de la enfermedaddeAlzheimer son los problemas dememoria. A partir de ahí el proceso se va extendiendo a las partes adyacentes, sobreviniendo diver- sos síntomas como alteración ejecutiva, problemas del lenguaje, orientación, apraxia... Nos encontramos, en defini- tiva, con una atrofia cerebral progresiva, imparable e incurable. Mención especial merece el papel de la microglia sobre los factores desen- cadenantes de la muerte neuronal. Tiene, principalmente, funciones inmu- nitarias y de ‘limpieza’ –fagocitan los desechos celulares y las células apop- tóticas–. En caso de daño o infección estas células gliales facilitan la infla- mación del tejido permitiendo que los linfocitos T puedan atravesar la barrera hematoencefálica y reparar las células lesionadas. Disfunciones en la microglía parecen estar implicadas en las enfermedades neurodegenerati- vas, en las que estas células se activan en exceso y acaban atacando neuro- nas sanas. ¿QUÉ SABEMOS Y HACIA DÓNDE INVESTIGAMOS? Unode loscondicionantes fundamentales en las enfermedades neurodegenera- tivas es su complejo diagnóstico. Se calcula que el 90% de las demencias leves está sin diagnosticar. Teniendo en cuenta que enfermedades como el Alzheimer se manifiestan 20 ó 30 años después de haberse iniciado las alteraciones neuronales, el diagnóstico precoz se convierte en la clave para comprender estos procesos y poder intervenir en ellos, con la creación de fármacosmás eficaces. En la actualidad se están desarrollando algunas herra- mientas de diagnóstico que pueden ayudar a modular la enfermedad. El mayor hándicap de los investigadores es que cuando los pacientes llegan a la consulta es porque los síntomas ya se han manifestado, de modo que las pruebas diagnósticas muestran las consecuencias de la enfermedad; se han desencadenado demasiados pro- cesos para saber cómo y en qué orden se han producido. Poder ‘monitorizar’ los primeros estadios de estas enfer- medades explicaría los mecanismos desencadenantes. Además permitiría la administración temprana de fármacos conocidos que muy probablemente sí funcionarían en esas fases iniciales. Según la SociedadNacional deNeurolo- gía, el 35% de los casos de Alzheimer se puede atribuir a nueve factores de riesgo modificables: la diabetes, la hipertensión arterial, la obesidad, el tabaquismo, el sedentarismo, la depresión, la inactividad cognitiva, la hipoacusia y el aislamiento social, y controlarlos podría potencialmente prevenir entre 1 y 3 millones de casos de Alzheimer en el mundo. En este sentido, la entidad hamanifestado que “debido a que los fármacos disponibles actualmente para la enfermedad de Alzheimer solo consiguen enlentecer la progresión de los síntomas, y no se dispone en el momento actual de fár- macosmodificadores de la enfermedad eficaces para reducir su gravedad y restaurar la función cognitiva, la inter- vención sobre los factores de riesgo modificables de la enfermedad cons- tituye en el momento actual una de las alternativas más eficaces para la prevención activa de la misma y la reducción de su incidencia.” Ante la sospecha de una patología neurodegenerativa, el procedimiento diagnóstico actualmente es “la realiza- ción de un test cognitivo, la búsqueda de biomarcadores mediante punción lumbar, que permite obtener líquido encefaloraquídeo, así como pruebas de neuroimagen, a través de resonancia magnético-nuclear o PET, para detec- tar estos depósitos de aminoide, y en función de la proteína que se depo- site tenemos una u otra enfermedad”, expone el doctor Suárez-Calvet. “En el Beta Brain –prosigue– nos centra- mos, sobre todo, en la fase preclínica de la enfermedad de Alzheimer, que es la fase en la cual todavía no hay síntomas pero en la que todos los cam- bios que caracterizan la enfermedad empiezan a ocurrir en el cerebro. En nuestro Estudio Alfa contamos con 3.000 voluntarios a los que estudia- mos con análisis de sangre, punciones lumbares, test cognitivos, resonancias magnéticas, etc.”. Pocas certezas pero mucha investigación, y uno de los avan- ces más importantes en el campo de la enfermedad de Alzheimer es el desa- rrollo de biomarcadores. Al respecto, nuestro interlocutor explica que “hoy tenemos herramientas para diagnos- ticar la enfermedad de Alzheimer con un análisis de sangre, antes no era posible. Además, con el Estudio Alfa hemos demostrado que estos análisis de sangre también sirven para detec- tar a aquellas personas que tienen un riesgo elevado de acabar desarrollando la enfermedad en el futuro. Creo que poder diagnosticar la enfermedad de Alzheimer con un análisis de sangre cambiará de manera importante el proceso diagnóstico”. Estas pruebas podrían llevarse a la atención primaria, aunque por el momento permanecen en el ámbito clínico ya que un diagnós- tico masivo no parece tener sentido mientras no exista tratamiento efectivo. En la línea de crear herramientas sencillas que faciliten el diagnóstico encontramos otro ejemplo, el desarro- llado por la empresa Geroa Diagnostics: un nuevo biomarcador de diagnóstico salival para la enfermedadde Alzheimer. Los investigadores hallaronuna sustancia en la saliva, la lactoferrina, cuyamedida parece indicar el riesgo de padecer esta enfermedad: amenores niveles de lac- toferrina, mayor es el riesgo. Por otra parte, unas semanas antes del cierre de esta edición se anunciaba una nueva prueba creada por neurólogos del hos- pital Clínic de Barcelona, que predice

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