TÉCNICA Y TECNOLOGÍA 87

SOSTENIBILIDAD 43 INDUSTRIA Y ALUMINIO Según el informe de la Comisión de la UE para la nueva estrategia industrial para Europa (European Commission, 2020), la industria ocupa una posición significativa en el crecimiento y la prosperidad futura de la UE, ya que representa más del 20% de la economía y emplea, aproximadamente, a 35 millones de personas, con muchos más puestos de trabajo vinculados a ella, tanto en el propio país como en el extranjero; impulsa el 80% de las exportaciones de mercancías y es un factor importante en el estatus de la UE como principal proveedor y destino de la inversión extranjera directa. Las pequeñas y medianas empresas (pymes), que comprenden más del 99% de todas las empresas europeas y, predominantemente, de gestión familiar, desempeñan un papel fundamental tanto en la economía como en la sociedad. El sector industrial tiene un papel crucial que desempeñar para abordar el mayor desafío y oportunidad de nuestro tiempo. Todas las cadenas de valor industriales, incluidas las industrias intensivas en energía, deben reducir su huella de carbono mientras aceleran la transición hacia soluciones de tecnología limpia y nuevos modelos de negocios. La industria requiere un suministro seguro de energía y materias primas limpias y asequibles para ser más competitiva a medida que se vuelve más sostenible y circular. Invertir en investigación, innovación, implementación e infraestructura creará nuevos procesos de producción y oportunidades laborales. La industria de la UE cuenta con una ventaja competitiva en productos y servicios de alto valor añadido, dando ejemplo con su adhesión a altos estándares sociales, laborales y medioambientales. Su sólida capacidad de innovación, particularmente en patentes de tecnología verde y otros sectores de alta tecnología, la ubica como líder mundial. El mercado único facilita la capacidad de las empresas europeas para innovar, expandirse y emplear a más personas. La UE debe capitalizar sus fortalezas para ganar liderazgo en áreas mediante la aplicación de mejores prácticas innovadoras en los campos de la cadena de suministro y la planificación comercial. Los primeros en adoptar estas mejores prácticas (European Commission, 2020) tendrán una mayor ventaja competitiva. La industria del aluminio se dedica a apoyar el Acuerdo Verde Europeo, basándose en su compromiso establecido con la sostenibilidad. El sector ya ha reducido sus emisiones directas de CO2 en un 55% desde 1990 y tiene como objetivo lograr una cadena de valor del aluminio totalmente descarbonizada, circular y energéticamente eficiente para 2050. Este plan propone reducciones potenciales de emisiones de CO2 de hasta un 70% en la producción primaria. El aluminio es un material circular, capaz de ser reciclado múltiples veces sin perder sus propiedades. Sus tasas de reciclaje en Europa superan el 90% en los sectores de la automoción y la construcción, y el 75% en las latas de aluminio. El proceso de reciclaje requiere solo el 5% de la energía utilizada en la producción primaria, lo que resulta en emisiones de gases de efecto invernadero de 0,5 toneladas de CO2 eq/tonelada de aluminio reciclado. La industria tiene como objetivo recolectar y reciclar de manera eficiente los productos de aluminio al final de su vida útil para maximizar las tasas de reciclaje y mantener el material (European Aluminium, 2020). En base al consumo previsto, la cantidad de aluminio posconsumo disponible para reciclar se duplicará con creces para 2050. Pasará de 3,6 millones de toneladas por año en 2019 a 6,6 millones de toneladas en 2030, llegando a 8,6 millones de toneladas en 2050. Como consecuencia de este escenario de alto reciclaje, el volumen de aluminio importado vendido en Europa también disminuiría, reduciendo la dependencia de las importaciones de Europa y generando € 6 mil millones (bn) por año para la economía europea. CIRCULARIDAD Para lograr sus ambiciosos objetivos, la UE debe acelerar la transición a un modelo de crecimiento regenerativo que beneficie al planeta, mantener el consumo de recursos dentro de los límites planetarios y reducir su huella de consumo mientras duplica su tasa de uso circular de materiales en la próxima década. La colaboración con las empresas para crear un marco para productos sostenibles ofrecerá nuevas oportunidades dentro y fuera de la UE. La circularidad es una parte esencial de una transformación más amplia de la industria hacia la neutralidad climática y la competitividad a largo plazo (European Commission, 2020). Puede ofrecer ahorros materiales sustanciales a lo largo de las cadenas de valor y los procesos de producción, generar valor adicional y desbloquear oportunidades económicas, en sinergia con los objetivos marcados en la Estrategia Industrial. (European Commission, 2020) La transición a un sistema económico sostenible es un aspecto crucial de la nueva estrategia industrial de la UE. Según una investigación reciente realizada por (Cambridge Econometrics, Trinomics, and ICF, 2018), la adopción generalizada de los principios de la economía circular en toda la UE tiene el potencial de aumentar el PIB de la UE en un 0,5% para 2030 y crear 700.000 nuevos puestos de trabajo. Este cambio también presenta un caso convincente para las empresas individuales. Con un promedio del 40% de sus gastos destinados a materiales, las empresas manufactureras pueden mejorar su rentabilidad a través de

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