NUEVOS MATERIALES 17 (figura 1a) y un gran aumento (figura 1b) que la mayoría de las partículas muestran una morfología esférica regular y algunas manifiestan una ligera irregularidad, probablemente debido al proceso de atomización con el que se obtuvo el polvo. También se muestran algunas partículas como satélites, pero considerando el valor de fluidez, no resultan altamente representativos. Las partículas están exentas de contaminación superficial y de cualquier material extraño. Con relación a las imágenes ópticas (figura 1-c, d), se percibe la microestructura de las partículas de polvo desde pequeño (figura 1c) y un gran aumento (figura 1d). La microestructura se revela en términos de fases α2+γ, pero la fase α2 es dominante. Además, la presencia de fase β corresponde a alguna fase residual relativa al no equilibrio de la solidificación del Ti48Al2Cr2Nb. Los granos de dendrita se formaron en la dirección de solidificación y no se observaron evidencias de la segregación de elementos ni de contaminación superficial (carburos, nitruros, etc.). Esta evidencia juega un papel importante ya que la calidad de las partículas de polvo está directamente relacionada con el fenómeno smoke. Esto es un problema adverso conocido que el proveedor de la tecnología PBF-EB define como un ‘desplazamiento peligroso de polvo’ debido a la carga eléctrica de los electrones. Esto implica que separe la máquina, se deba limpiar la cámara de trabajo de la misma, se distribuya el polvo de nuevo y se vuelva a empezar el proceso. Por lo tanto, una baja contaminación superficial reduce el riesgo de smoke y mejora el sinterizado y la fusión del polvo, así como la calidad del material procesado. La tecnología PBF-EB se caracteriza por tener unos sistemas de almacenamiento y distribución del polvo alternativos a los habituales en otras tecnologías de lecho de polvo por laser tanto para metal como para polímero (SLM y SLS). Por lo tanto, la cantidad de polvo metálico inmovilizado que se necesita para la producción de PBF-EB es mayor que el de las otras tecnologías de fabricación aditiva por capas. Por ejemplo, en el caso de materiales estándar como el Ti6Al4V con un valor de densidad de 4.4 g/cm3, parecido a aquel de gamma-TiAl (4,0 g/cm3), la cantidad de polvo necesario para la producción con una altura relativamente baja es de 30 kg en condiciones de trabajo normales. Además, la adecuación de aleaciones de polvo metálico para un buen proceso de fabricación aditiva implica características específicas (distribución del tamaño de las partículas, composición química, morfología de las partículas, fluidez, densidad…) que aumenta el precio del polvo de partida y, con ello, Figura 1. Imágenes SEM (a, b) y de Microscopio Óptico (c, d) de la aleación del polvo gammaTi48Al2Cr2Nb.
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