VN41 - Eneo

La formación siempre ha formado parte de su evolución. ¿Qué papel juega el aprendizaje constante en una profesión como la de la sumillería? El aprendizaje es constante. Todos los días aprendo algo nuevo de vino de los clientes, de mis compañeros en el hotel, de los viajes, de las catas… Y, sobre todo, de sentir el vino como disfrute en conjunto. No solo catándolo, si no bebiendo y sabiendo que el vino es parte de nuestra cultura y un estilo de vida. Lleva recibiendo premios ya décadas, pero justo este 2024 fue escogido entre los ‘Top 100 Sommeliers de España’. Concretamente, fue seleccionado en la quinta posición. ¿Cómo gestiona este éxito? Pues la verdad es que me hizo mucha ilusión. Creo que es vital que se reconozca la sala como parte fundamental de la experiencia en un restaurante y premios y reconocimientos te ayudan a seguir mejorando día a día. En concreto, este reconocimiento es muy completo y se valora la trayectoria de una profesión, del día a día. No se trata de un examen o cata a ciegas puntual, en nuestro trabajo te evalúan todos los días, desde una recomendación, una incorporación de un vino nuevo, una forma de tratar al cliente… Y, sobre todo, estar en continua evolución. No es lo mismo conseguir una estrella Michelin que mantenerla 10 años… En cualquier momento te puede cambiar tu destino. Ya para terminar, ¿podría recomendarnos un vino tinto, uno blanco, uno rosado y un espumoso? Claro. En tinto, recomiendo Ikewen 2022, Gran Canaria. En blanco, Hubacker keller 2018, de Alemania; en vino rosado, Ariyanas Romé Rosado 2022, de Málaga; y en espumoso, el champagne Salon 2002. n Vinos recomendados Ángel González Garrido: Ikewen 2022, Hubacker keller 2018, Ariyanas Romé Rosado 2022 y el champagne Salon 2002. 53 3–5.02.25 Palacios 1 y 8

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx