VN24 - Técnicas, equipos y productos para la enología y la viticultura

6 ACTUALIDAD MÁS NOTICIAS DEL SECTOR EN: WWW.INTEREMPRESAS.NET • SUSCRÍBETE A NUESTRA NEWSLETTER El viñedo de regadío en España supone ya el 40,6% de la superficie total Según los últimos datos de la Encuesta sobre Superficies y Rendimientos de cultivos en España (ESYRCE) sobre regadíos en España, elaborada por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y analizados por el Observatorio Espñaol del Mercado del Vino (OeMv), en 2020 la superficie de viñedo de uva para transformación en España cayó un ligero -0,3% hasta situarse en las 949.565 hectáreas (ha). De esta superficie total, 564.193 ha corresponden a viñedo de secano y las 385.372 ha restantes, a regadío, es decir, el 59% y el 41% respectivamente del total. Si vemos la evolución de la superficie total de viñedo, así como la que corresponde a regadío desde el año 2004 al 2020, vemos una pérdida progresiva de la superficie total, especialmente en el periodo compren- dido entre el año 2009 a 2012, coincidiendo con la entrada en vigor de la nueva OCM y las ayudas al arranque de viñedo, vigentes hasta 2012. Por su parte, la superficie de viñedo en regadío ha ido ganando peso dentro del total en los últimos años, hasta alcanzar el 40,6% de la superficie total en los años 2019 y 2020. En cuanto a dónde está más desarrollado el viñedo en regadío en España, sólo tres comunidades superan el 50% de regadío en su viñedo: Castilla-La Mancha (50,9% de la superficie total), Navarra (58,9%) e Islas Baleares (79,6% del total). En 2019, la super- ficie de regadío en Castilla-La Mancha superó a la de secano, manteniéndose esta proporción en 2020. El pasado año, 236.532 ha fueron de regadío en Castilla-La Mancha. Galicia (+32%) y Baleares (+13%) fueron las comunidades que más aumentaron su superficie de regadío, siendo la Comunidad de Madrid la que más la redujo (-22%). El sistema de riego localizado es el de mayor implantación, suponiendo el 96,6% de la superficie total de viñedo de regadío. Acuerdo entre OIVE y PTV para impulsar la competitividad del sector vitivinícola Ángel Villafranca y Mireia Torres, presidentes de la Organización Interprofesional del Vino (OIVE) y la Plataforma Tecnológica del Vino (PTV) respectivamente, fir- maron un nuevo acuerdomarco de colaboración entre ambas entidades que estará vigente hasta el año 2024. Un acuerdo que sienta las bases de un plan de trabajo coordinado cuyo fin es dinamizar y acercar la Innovación tecnológica a todos los agentes vitivinícolas españoles como vía fundamental de competitividad, rentabilidad e internacio- nalización de la industria del sector. Con este acuerdo, el sector vitivinícola demuestra, una vez más, su convencimiento de que su futuro pasa por la investigación y la innovación, sobre todo en esta nueva etapa en la que las políticas europeas así lo atesti- guan. Por ello OIVE, gracias a las aportaciones que recibe de los operadores a través de la Extensión de Norma, se compromete a seguir promoviendo la I+D+i de la mano de la PTV, asociación que desde hace una década lleva abanderando la innovación del sector del vino Ambas entidades consolidan así la estrecha relación que les une, desde el año 2018, en su camino común hacia el impulso de la I+D+i del sector nacional del vino. Nace la Plataforma Tecnológica Española del Corcho La Agenda de I+D+i de PTEcor incluirá proyectos que aportarán soluciones a los retos a los que se enfrentan las empresas del sector corchero, que en muchos casos están relacionados con la doble transición ecológica y digital. Entidades vinculadas al sector corchero han cons- tituido la Plataforma Tecnológica Española del Corcho (PTEcor), como instrumento para mejo- rar la capacidad tecnológica y competitividad de los sectores que integran la cadena de valor del corcho. Es una asociación promovida por la Agrupación Sanvicenteña de Empresarios del Corcho (ASECOR), en colaboración con el Centro de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (CICYTEX) y la Universidad de Extremadura. Una de sus prioridades es detectar las necesidades en innovación de este sector, fundamentalmente en torno a cuatro ámbitos de actuación: bioeconomía, cambio climático, digitalización y energía. Busca además favore- cer la colaboración público-privada, poner en marcha actividades y proyectos estratégicos para la dinamización de la I+D+i; y ser canal de comunicación entre los actores implicados, claves para identificar tecnologías emergen- tes, tecnologías convergentes y detectar nuevas demandas a escala global.