VN24 - Técnicas, equipos y productos para la enología y la viticultura

LA VOZ DEL SUMILLER ¿Cómo empezó su historia con el mundo del vino y la sumillería? Fue mientras trabajaba como camarera para pagar mis estudios en el hotel Urban*****GL. Tuve la oportunidad de empezar a conocer más de cerca el mundo del vino y me conquistó. Fue un amor a primera vista y se ha con- vertido en el amor de mi vida. Ha trabajado en grandes restaurantes de España, entre ellos Mugaritz. ¿Es la experiencia la mejor formación? Absolutamente. La experiencia laboral desarrollada en dife- rentes restaurantes te aporta una paleta con una amplia gama de colores con la que trabajar, conocimiento para poder elegir lo que quieres hacer y dónde quieres desarro- llar tu carrera como profesional. Por supuesto todo debe ir a su vez sustentado sobre una base de teoría y estudio. ¿Qué se lleva de cada lugar? Me llevo personas, momentos compartidos, el esfuerzo, el aprendizaje, el color y el olor de cada lugar y, sobre todo, vinos vividos. Para muchos profesionales, el vino no es solo un tra- bajo, es una forma de vivir. ¿Qué opina Silvia García al respecto? Para mí, ser sumiller es un modo de vida. Creo que uno es sumiller a vida completa y eso lo saben muy bien los que están a tu lado. No es posible colgar el mandil y ocu- parte de otra cosa, nunca hay otra cosa... o sí hay otras cosas, pero con vino. Entre sus especialidades está el sake y el champán. ¿Por qué se decidió por estos dos mundos, qué tie- nen de especial? En realidad, no fue una decisión propiamente dicha. Más bien ellos se cruzaron en mi camino y consiguieron gene- rarme unas emociones que no todos los productos me provocan. A nivel personal los disfruto muchísimo. Han abierto las puertas del Ritz de nuevo hace muy poco. ¿Cómo ha vivido estos meses de parón continuado? Imagino que como todo el mundo, con una mezcla de incertidumbre y esperanza. ¿Qué le cautivó del proyecto deMandarinOriental Ritz? Me cautivó formar parte de un hotel como Mandarin Oriental Ritz, Madrid. Aportar tu granito de arena a la historia de uno de los hoteles más emblemáticos del mundo es un placer, te hace sentir muy afortu- nada y, también, una gran responsabilidad. Esto en sí ya habría sido suficiente, pero además si sumamos a la propuesta el prestigio de la compañía Mandarín Oriental y la magia de Quique Dacosta, la pregunta sería ¿qué no me cautivó? Además, Mandarin Oriental Ritz, Madrid me ha dado la oportunidad de desarrollar una carta de vinos diferente para cada uno de los universos gastronómicos y de crear una bodega amplia y compleja, en la que he buscado también la profundidad que le prestan las añadas viejas. Quique Dacosta despliega su singular talento culinario en Deessa, el restaurante estrella del hotel y el primer espacio de Dacosta en la capital española. 59

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