el paradigma es a escala industrial: “Entre muchas otras acciones, estamos trabajando en un consumo de energía individualizada en cada una de las fuentes y estamos implantando el máximo de energías renovables posibles”. Asimismo, también están desarrollando un proyecto de reducción de consumo de gas en la producción de carne de ternera y en la reducción del uso del agua: “El sector se enfrenta a acusaciones que debemos afrontar conjuntamente porque son falsas, tenemos datos que demuestran que tanto las granjas como la industria consumen mucho menos de lo que se nos acusa, pero igualmente debemos hacer esfuerzos en seguir reduciendo consumos y recursos”. Albert Morera, director general de la División de Porcino del Grupo Vall Companys, destacó la necesidad de aportar cientificidad al sector para construir y blindar el relato: “Más ciencia y menos ideología”, pidió. “Ya no podemos hablar de subproductos entendidos como residuos, sino de coproductos u oportunidades de revalorización. Estamos en el camino para conseguir casi el 100% de circularidad en el sector”, aseveró. En esta línea, desde el grupo agroalimentario se aprovecha la sangre del cerdo para extraer hemoglobina y plasma, que se utilizan también para la alimentación animal, además de trabajar con la industria farmacéutica para producir heparina a través de las mucosas intestinales; entre otros muchos proyectos de economía circular. Morero explicó tamhbién cómo, por ejemplo, utilizan los lodos de depuradora como biocombustible o cómo aprovechan la producción para generar sustancias útiles en la producción de piensos. Añadió que “los purines son el mejor fertilizante que tenemos, si son bien gestionados”. Por su lado, la CEO de Grupo Premier Pigs –integradora porcina de carne blanca–, Dolors Puyol, se centró en la reducción del impacto de la producción para la alimentación animal: “Esta alimentación recibe muchas críticas pero se ha demostrado que el 80% de piensos que entran tanto en el puerto de Barcelona como en el de Tarragona son cereales muy nobles provenientes de Europa, con una calidad muy alta y regulaciones completas”. En este sentido, y preguntada por el uso de proteínas alternativas a las actuales en la alimentación animal, como los insectos, Puyol dijo que “cuando existan alternativas científicamente más sostenibles, apostaremos por ellas, sin duda. Mientras no tengamos pruebas reales y contundentes, además de garantías regulatorias, seguiremos trabajando Dolors Puyol, CEO de Grupo Premier Pigs. Sara Bover, jefa del área de Industrias Alimentarias y miembro del equipo de Coordinación Científica del IRTA. 12 PRODUCCIÓN
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