A FONDO - DEPORTES DE EQUIPO 144 Y no precisamente a la práctica. El look baloncesto lleva muchos años teniendo mucho tirón en la cultura urbana, que ha convertido en tendencia algunos grandes iconos -en calzado- de la historia de este deporte. Y en ello han tenido mucho que ver Converse, con sus míticas Chuck Taylor, y, sobre todo, Jordan. Son zapatillas que no se utilizan para jugar, pero eso poco importa. Son ventas y eso es lo que cuenta. Para el comercio y para que el segmento siga siendo tan dinámico como en los últimos años. Su buena acogida como deporte escolar y el peso mediático que tiene (a años luz del fútbol, pero muy importante), le aseguran al baloncesto un futuro estable. Como el fútbol, difícilmente repuntará de una forma destacable, pero tampoco sufrirá grandes reveses. Las marcas que dominan el mercado van a seguir volcándose en él con importantes inversiones en I+D y, también, en patrocinios. El pastel, a nivel mundial, es muy grande, con las bases sosteniendo una industria que mueve miles de millones de euros en calzado, equipaciones y réplicas. Y a diferencia del fútbol, el reparto de ese pastel es mucho más simple, porque en la cancha apenas compiten 4 o 5 marcas, con Nike -y Jordan- a años luz de sus competidores. BALONMANO, VÓLEY Y HOCKEY: DEPORTES “NICHO” CON VENTAS GARANTIZADAS Nos guste más o nos guste menos, los medios, salvo excepciones, tienen mucho que ver con los índices de práctica que pueda tener un deporte, especialmente entre los más pequeños. Cuando un deporte tiene mucha repercusión mediática, y durante mucho tiempo, a medio y largo plazo la práctica crece. O, en el peor de los casos, se mantiene estable, porque quienes empiezan compensan a quienes lo dejan. Los dos mejores ejemplos son el fútbol y el baloncesto, cuyo impacto mediático impide, en gran parte, que otros deportes de equipo puedan crecer más allá de la práctica, especialmente de la escolar. Deportes como el balonmano, el hockey o el vóley… El balonmano se posiciona como el tercer deporte colectivo en España, aunque su distancia respecto al fútbol y baloncesto es considerable. Con una tradición bien arraigada en zonas específicas del país, este deporte mantiene una base estable de practicantes gracias al esfuerzo de clubes y federaciones. Sin embargo, su presencia mediática es limitada, salvo en ocasiones puntuales como torneos internacionales donde la selección brilla. A pesar de contar con infraestructuras compartidas con el fútbol sala, la falta de apoyo institucional dificulta su crecimiento. Cuenta con poco más de un 10% de las licencias que tiene el futbol y su práctica está bastante focalizada en determinadas zonas donde tradicionalmente ha sido un deporte con mucho tirón. Y lo mismo pasa con el Vóley (quizás menos “zonal”) o con el Hockey, cuarto y quinto deporte respectivamente. A diferencia de estos dos últimos, el balonmano sí tiene cierta presencia en los medios porque la liga nacional cuenta con equipos punteros en Europa y porque nuestra selección ha logrado importantes metas a nivel europeo Promover una mayor variedad de deportes no solo estimula la participación de diferentes grupos sociales, sino que también reduce las barreras de entrada a la práctica deportiva al ofrecer alternativas accesibles y adaptadas a todos los públicos
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