El fútbol es como uno de esos muñecos tentetiesos, que les golpeas y nunca se caen. Y no lo hace por una razón bastante simple: porque detrás de este deporte, que más que deporte es un negocio, hay muchos intereses. El fútbol es el segmento más estable del sector. Estable y maduro. Hasta el paréntesis del postencierro, la evolución de este deporte en los últimos años había sido bastante plana, sin repuntes importantes, pero sin ningún retroceso. Ni siquiera en con la fuerte crisis económica de 2008. Y eso, en un segmento que mueve tanto dinero, es algo tremendamente positivo. Una madurez perfectamente gestionada y perfectamente asumida que en las últimas décadas solo se ha visto alterada por un postencierro pésimamente gestionado. El COVID consiguió lo que ninguna crisis había conseguido hasta entonces: darle un buen susto al deporte rey. Tras el encierro se dio un boom espectacular de la práctica en muchos deportes, como el running,algunas modalidades Outdoor,el tness -sobre todo el urbano- y, sobre todo, el bike y el pádel. Pero no todos los deportes crecieron.Algunos, incluso, se pegaron un buen susto porque no podían arrancar, entre ellos, y seguramente en lo alto del ránking, el fútbol, que paró en seco los entrenamientos y las competiciones (salvo las que, por negocio, tuvieron que retomarse). Y sin práctica las ventas cayeron en picado. Y tardaron en recuperarse. Pero se recuperaron. Como era más que previsible. Era cuestión de tiempo que la rueda volviera a girar y el fútbol recuperase todo el terreno que había perdido. No volvió más fuerte, pero volvió exactamente igual que antes, recuperado la regularidad que siempre le ha de nido. CUANDO LA ESTABILIDAD ES UN VALOR AÑADIDO El coronavirus supuso un fuerte revés para el fútbol. Pero es fútbol.Y el fútbol es como uno de esos muñecos tentetiesos, que les golpeas y nunca se caen. Y no lo hace por una razón bastante simple: porque detrás de este deporte, que más que deporte es un negocio, hay muchos intereses.Y eso, evidentemente, es una garantía ante cualquier contratiempo. Más allá de ese fatídico 2020, el fútbol lleva años instaurado en la más absoluta estabilidad. Y santa estabilidad, porque con los volúmenes que mueve este deporte, especialmente en calzado, equipaciones y réplicas, esa madurez, ese comportamiento tan regular, garantiza un volumen de ventas espectacular cada año. Es estable, sí, y lo es en la cumbre. Y allí se mantiene. Y de ello se bene cian muchas marcas y, sobre todo, muchos comercios multideporte que tienen en el fútbol una de sus actividades técnicas estrella. Desde hace muchos años… Su evolución ha sido, sobre todo, silenciosa. Y siempre ajena al protagonismo que iban ganando otras modalidades. Poco importaba si el deporte de moda era el running, el pádel, o el bike;, el fútbol hacía su camino con absoluta tranquilidad, con un comportamiento plano y estable que, aunque en otros segmentos podría interpretarse como un dato negativo, en el fútbol, era una muy buena noticia. Porque, insistimos, con el volumen que mueve este deporte, que se mantenga estable no deja de ser una pequeña victoria para el sector. Los pocos altibajos que sufre -y que son casi imperceptibles- no tiene ninguna relación con el entorno global, más bien con ciertas particularidades que siempre ha tenido el propio segmento, como, por ejemplo, sus repuntes en los años pares, cuando se celebra Eurocopa o Mundial. Esta estabilidad debe entenderse, también, como un mínimo innegociable para un deporte que, si se de ne por algo, es por los grandes intereses que tiene detrás. La mayoría de los cuáles, por cierto, tienen muy poco que ver con el sector. Es un deporte que mueve millones y millones de euros en derechos de imagen, traspasos, publicidad… y ya habrá quien se preocupe de que la máquina siga funcionando.,.Porque nos guste o no,el fútbol hace muchos años que dejó de ser un deporte para convertirse en un negocio.Y si, la base de practicantes asegura un mínimo de ventas muy importante,pero eso son migajas en el basto universo del fútbol… UN NEGOCIO QUE EMPIEZA POR LA BASE Desde hace meses se nos llena la boca hablando de pádel, bike o running. Deportes de moda, cuyos crecimientos en los últimos años, es cierto, han sido espectaculares. Y si, crecer desde abajo está muy bien,pero esta mucho mejor -y es mucho más difícil- mantenerse cuando estás arriba.Y más si tienes a otros deportes ganando cuota. Pero ahí está el fútbol. Arriba y sin sobresaltos. ¿Cuál es el secreto? Pues más allá de los millones que mueve en lo más alto de la pirámide, la clave del éxito es la base, que es quien sostiene la fuerza y la estabilidad de este segmento.Y aunque es cierto que la mayoría de esta base, a diferencia de los deportes de los que hablábamos antes, son niños y jóvenes, eso no quita que ese volumen de practicantes sea espectacular.Y el de ventas,lo mismo.Porque,aunque la venta de material deportivo tenga un peso relativamente bajo en el global de este universo, el a fondo ESPECIAL FÚTBOL Una madurez muy bien llevada 75 El fútbol siempre ha evolucionado ajeno al protagonismo que iban ganando otras modalidades, haciendo su camino con absoluta tranquilidad, con un comportamiento plano y estable que, aunque en otros segmentos podría interpretarse como un dato negativo, en el fútbol era -y es- una muy buena noticia.
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx