Lo hemos dicho varias veces en los últimos meses; el pádel, visto a nivel global, vive uno de sus mejores momentos. Con la práctica disparada y ganando terreno en muchos países, este deporte ha dado el salto cuantitativo que tanto esperábamos. Cada vez juega más gente y en más sitios. El“problema”, que lo hay, es que las ventas no se comportan de la misma manera. Y no lo hacen porque al pádel, como le ha pasado al bike, aun le “pesa” la pandemia. Tras dos años de crecimiento espectacular, ahora las tiendas tienen un sobrestock importante y la mayoría hace meses que están “rebentando” precios. Hubo problemas de producción en el momento de mayor demanda, es cierto, pero luego se sobredimensionó el mercado. Tanto marcas como tiendas. Y a día de hoy, pese al fuerte crecimiento en practicantes, pese a los excelentes índices de jugadores habituales, el pádel está en un momento complejo. Infinitamente mejor que el de hace una década, poque entonces, además de sobrestock, el pádel era un deporte poco internacionalizado, pero probablemente no se están aprovechando todas las oportunidades que deberían aprovecharse. Sea como sea, con más o con menos producto en los almacenes de marcas y tiendas, el pádel vive un gran momento. De eso no hay dudas. Ni una. Durante años ha arrastrado dos grandes losas, la sobreoferta de marcas y su poca presencia más allá de España y Argentina, pero a estas alturas podemos decir, sin equivocarnos, que en ambos casos las cosas están cambiando.Y haber Vuelve el pádel. Bueno, en realidad nunca se fue, porque incluso en verano, un mes tranquilo -y caluroso- el pádel ha seguido manteniendo su buena dinámica. Pero septiembre es un mes de reactivación. De volver a la práctica habitual -rutina para muchos- y de atreverse con nuevos deportes. Y, en este sentido, el pádel tiene muchos números para, de aquí a final de año, seguir ganando mucho terreno. Al menos en cuanto a práctica. El pádel mantiene su fe pádel 18
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