tación de que el pádel avanza y de que cada vez son más los que saben que para avanzar a veces es importante saber sumar esfuerzos. RELOCALIZACIÓN: UN PUNTO DE INFLEXIÓN CLAVE Antes hablábamos de lo importante que es la innovación en un mercado competitivo. Innovar es clave para diferenciarse. Pero innovar no es algo que se limite solo al producto, como hemos dicho. Hay muchas estrategias para innovar y una de ellas pasa, muchas veces, por llevar a cabo cambios importantes en los procesos, sobre todo en la fabricación. Y eso es lo que está pasando en el mundo del pádel. A medida que se acentúa la competencia, y por mucho que el mercado se reordene (aunque pueda parecer paradójico, a menos marcas, más competencia), las marcas están apostando por un mayor control de su producción como valor añadido. Porque mayor control siempre se traduce en mejor producto y mejor servicio. Y más posibilidades de diferenciarse.Y si todo el mundo fabrica en el mismo sitio es más complicado encontrar esa diferenciación. Asia y, especialmente China, ha sido tradicionalmente la gran fábrica del pádel, pero lógicamente la producción a 10 mil kilómetros de casa implica muchos inconvenientes a la hora de tener un buen control del producto, de poder ofrecer un buen servicio e, incluso, de tener ciertas garantías de que ese producto va a ser original. Por eso es cada vez más normal que las marcas apuesten por la relocalización, bien acercando la producción a países donde sea más ágil y rápido controlar esa producción, bien apostando por controlarla totalmente con fábricas externas que trabajen en exclusividad o, incluso, apostando por fábricas propias. Los motivos de este cambio de tendencia son evidentes: para franjas medias y, sobre todo altas, Asia no aporta ningún valor añadido más allá de los cos53 Durante muchos años la internacionalización parecía un imposible, pero en los últimos años el pádel ha crecido en practicantes, instalaciones y ventas en muchos mercados y su potencial, en este sentido, es infinito. Aportar un valor añadido que te diferencie. En palas, este desarrollo ha sido, simplemente, espectacular, y año tras año las marcas vuelcan muchos esfuerzos en presentar nuevas tecnologías que ayuden a maximizar los aspectos clave del juego. Algunas de estas innovaciones tienen mucho de marketing, es cierto, pero otras sí que aportan valor al jugador. Y hacer eso año tras año tiene mucho mérito.Y más todavía teniendo en cuenta que muchas marcas tiene los mismos fabricantes… con todas las dificultades que ello conlleva a la hora de buscar soluciones novedosas para diferenciarse. Más allá de la apuesta que puedan hacer las marcas por el I+D y de las novedades que presenten año tras año apoyándose en este desarrollo, también es importante tener muy en cuenta, en esta carrera para ofrecer algo nuevo, el papel que están jugando, en el pádel, las sinergias. Antes hablábamos de los importantes acuerdos que habían cerrado algunos fabricantes de material con instaladores de pista, acuerdos que han sido unos de los pasos más importantes que se han dado en el pádel en los últimos meses -más allá de la entrada de grandes fondos de inversión-, pero también deberíamos destacar otras sinergias a nivel de producto que han sido muy significativas para este universo. Y no solo por lo que se ha desarrollado, sino, sobre todo, porque el simple hecho de que grandes marcas se unan para mejorar un producto ya dice mucho de la salud tecnológica de un segmento. Dos ejemplos que tenemos muy presentes son el de Bullpadel con Vibram y el de Head con Mondo, en ambos casos para desarrollar suelas específicas para este deporte. En los próximos meses y, sobre todo a medida que el pádel se vaya haciendo más fuerte, es probable que conozcamos nuevas sinergias. A veces en producto, a veces en estrategias para ganar peso a nivel internacionalización, a veces en imagen… Hay miles de alternativas, pero lo importante es que todo este tipo de acuerdos son una constates; fabricar en Europa o en España, en cambio, aporta muchas ventajas a nivel de calidad, servicio y control. Sobre todo, control. Y esas ventajas son, hoy por hoy, imprescindibles para competir con garantías en estas franjas altas. Que para muchas marcas son las importantes (aunque no sean las más vendidas en unidades). Hacer palas de pádel, lo hemos dicho un millón de veces, es bastante fácil. Hacerlas bien es otro tema. Las marcas, después de años produciendo en Asia, han entendido lo importante que es controlar lo máximo posible lo que producen. Y esta es la razón que está empujando a muchas marcas a impulsar sus propias fábricas (aquí en España o fuera) o a confiar en fabricantes muy
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