En muchos de nuestros artículos dedicados a la evolución de determinadas, modalidades atléticas hemos dejado claro, desde el principio, que el COVID ha sido un buen aliado. La práctica se ha disparado en deportes como el bike, el fitness, el pádel o el outdoor y, con este repunte, también se han disparado las ventas. Pero las monedas siempre tienen dos caras, y aunque han sido pocos los damnificados, siempre hay quien sale perdiendo. Y en este caso, con el permiso de los deportes de equipo, uno de los segmentos que más notó, para mal, las embestidas del COVID, fue el de la nutrición. ¿Por qué? Pues por los mismos motivos que hemos explicado en el anterior artículo dedicado al triatlón. Son dos universos que están muy vinculados a la competición, y puesto que, en ese aspecto, las cosas no volvieron a la normalidad hasta bien entrado el 2021, no han sido unos años fáciles ni para uno ni para otros. No hay que olvidar que un porcentaje muy alto de quienes apuestan habitualmente por productos vinculados a la nutrición deportiva son quienes practican modalidades de larga distancia, y entre las dificultades que hubo para entrenar durante casi todo el 2020, y el parón de las pruebas, la cosa está clara. Y sí, evidentemente que este universo recuperó cierto dinamismo a la que nos dejaron salir, pero como el triatlón, es en las competiciones donde reside gran parte de su éxito. Y sin ellas fue muy difícil mantener las ventas. Las cosas, por suerte, empezaron a mejorar nada más arrancar 2021. A la misma velocidad que se activaron las competiciones y los deportistas volvieron a entrenar fuerte para prepararlas. Si la rueda gira, giran todos los implicados. RECUPERAR EL RITMO PREPANDÉMICO Del pasado más reciente poco más podemos decir, así que mejor hagamos un breve análisis de cómo estaba este universo antes de la llegada del coronavirus. Y el análisis es rápido y fácil: estaba muy bien: era uno de los subsegmentos que más había crecido en los últimos años. Y por su transversalidad, lo había hecho, además, en varias modalidades, desde el bike o el running hasta el Trail, pasando, obviamente, por el universo del fitness o el triatlón. Su peso en las ventas globales del sector y de cualquiera de las tiendas que trabajan este universo había crecido mucho, consolidándose como una categoría vital para muchos comercios (no solo especialistas) por su papel clave a la hora de potenciar el tráfico en las tiendas, fidelizar clientes y buscar vías alternativas a las habituales para generar negocio. La nutrición hace años que está presente en algunos segmentos. En el fitness, por ejemplo, lleva ganando terreno muchos años, primero en un plano más cercano a la musculación y luego, haciéndose un hueco en otros usos, como la recuperación. El gran boom, sin embargo, se dio cuando los deportes de resistencia ganaron protagonismo. El auge de modalidades como el triatlón, el ciclismo, el MTB o el Trail conllevó un fuerte crecimiento de la nutrición deportiva. El deportista entendió que con una buena alimentación (antes,durante y después de la carrera) su rendimiento mejoraba y su cuerpo se exponía a menos peligros. Y este argumento es suficientemente importante como para entender el porqué de la progresión espectacular de esta categoría. Además de hacer deporte con total seguridad, el deportista quiere llegar un poco más lejos.Y la nutrición deportiva tiene mucho que a fondo 140 NUTRICIÓN Energía positiva
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