Pese a los retos a los que necesariamente debe enfrentarse el sector, la moda de las mal llamadas sneakers, aunque llegue a deshincharse un poco, aunque incluso llegue a frenarse en seco la exagerada apertura de tiendas especializadas, va a seguir teniendo un amplio recorrido. Las ventas nunca han sido un problema. El problema es más bien quién vende... y quien dejará de hacerlo. que supusiera programaciones. Con sus nuevas estrategias DTC están limitando mucho su lista de clientes y eso, a más pronto que tarde, acabará reorganizando -reduciendo, vaya- esta red de tiendas de calzado urbano que se ha ido construyendo, sin mucha cabeza, en esta última década. DOS RETOS: REORDENAR Y MANTENER EL COTO Paradójicamente el gran problema al que se enfrenta todo este universo del lifestyle es su gran potencial. Y principalmente por dos razones: porque la moda ya hace años que se ha metido de lleno en este universo, y porque ahora mismo la oferta está por encima de los deseable. En cuanto a lo primero, poco que decir. La moda, en su día, fue clave para que este tipo de calzado empezara construir su futuro, y, claro, cuando se ha dado cuenta del potencial real que tiene, no ha dudado en apostar por ello. Lo hizo en textil, y lo ha acabado haciendo en calzado. Y no sólo cadenas de moda como Zara y compañía; también, o sobre todo, grandes líderes del calzado y nuevas marcas que han surgido y que, pese a tener una clara tendencia deportiva, han elegido el canal moda para crecer. Todas estas marcas representan una amenaza real para el sector, por competencia, pero es que el propio canal moda ya representa de por si una amenaza, sobre todo porque muchas marcas deportivas están apoyándose en él para sus líneas más urbanas. Y eso debería hacernos reflexionar.Y trabajar para que, algo tan nuestro como el look deportivo, no lo acaben monopolizando otros canales. Ese es el primer reto. El segundo, como hemos dicho, es dimensionar el mercado. Porque la frontera que hay entre“mu- a fondo 104 chas tiendas” y “demasiadas tiendas” es cada vez más imperceptible. Y el salto de una a otro es muy peligroso. Sobre todo, para quienes no tienen una base sólida… y la confianza de las grandes. Porque al final, pasará lo de siempre. Quienes aguantarán esta reestructuración serán los grandes. Especialmente las grandes cadenas. Nacionales e internacionales. Los grupos sufrirán bastante más, sobre todo si dejan de estar en la lista de clientes vip de las marcas -algo que tarde o temprano llegará-. Algunos socios que han apostado por modelos de negocio especializados en el calzado urbano ya están teniendo dudas. Y no por la demanda, sino por la fuerte competencia que hay. Habrá cierres, y quizas sean bastantes, pero es lo que hay cuando una categoría se sobreexplota. En cualquier caso, pese a estos retos a los que necesariamente debe enfrentarse el sector, la moda de las mal llamadas sneakers, aunque llegue a deshincharse un poco, aunque incluso llegue a frenarse en seco la exagerada apertura de tiendas especializadas, va a seguir teniendo un amplio recorrido. Las ventas nunca han sido un problema. El problema es más bien quién vende. El calzado, al fin y al cabo, tiene una rotación muy alta -y más ahora que este tipo de calzado es tan popular- y la barrera del precio ya hace tiempo que se ha superado, asi que por las ventas no hay que sufrir. Eso sí, las cuotas, lógicamente, irán variando en función de si tiene más tirón una marca u otra (eso es lo malo de la moda).Y cambiarán los canales. Pero a pesar de la fuerte competencia y del peso que presumiblemente ganarán estos otros canales, esta categoría seguirá siendo uno de los grandes pilares del sector. Por muchos daños colaterales que haya.
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