En los últimos 30 años, y a pesar de algunos baches, el sector de artículos deportivos ha logrado cuadruplicar su facturación. Esta evolución, en la que ha habido algunos altibajos (a veces motivados por una crisis global, otras por la propia idiosincrasia del sector y, en estos últimos meses,por la pandemia),ha sido muy similar a la experimentada por la práctica deportiva que, en este tiempo, también ha disparado considerablemente sus índices. En estas últimas tres décadas el sector ha cambiado mucho. En oferta, en ventas, en tipologías de negocio, en modelos de distribución, en puntos de venta… Y los gráficos que acompañan a este breve análisis de cómo han cambiado las cosas desde que Sport Panel analiza el mercado, pueden dar algunas pistas de estos cambios. Cambios que empezaron, sobre todo, a mediados de los 90, cuando, con unos índices de práctica deportiva irrisorios, y tras una fuerte crisis La práctica impulsa al sector económica, el deporte prefirió cambiar el rumbo y dar cada vez mayor protagonismo al llamado sportwear. La apuesta fue tan radical que, hoy por hoy, y pese al boom de lo atlético, todavía más del 50% de los artículos que se venden en los comercios del sector no son para la práctica habitual de deporte, sino más bien para el uso cotidiano. En este periodo, obviamente, el mix de marcas ofertadas ha ido evolucionando desde las más atléticas (o con mayor carácter de marca técnica) hacia las puramente Street.Y desde hace muchos años, ambas están conviviendo en los comercios multideporte. Aunque parezca un contrasentido, el efecto de la crisis ha incidido muy favorablemente en el sector deportivo, pues en el periodo comprendido entre 2010 y 2015 la práctica deportiva creció más de un 12% y en los últimos 5 años se ha vuelto a disparar un 6%. Esto ha favorecido de forma importante la venta de material atlético, principalmente en deportes como el running, el padel, el outdoor y, sobre todo, el Bike. Lo atlético vuelve a vivir una nueva juventud. Que durará, básicamente, hasta que dure la crisis. Porque las crisis son buenas aliadas para el deporte. Y en los últimos 30 años, por desgracia, hemos vivido unas cuantas... Considerando todos los canales de venta, el sector de artículos deportivos (sell-out), ha mantenido un importe crecimiento desde 1990, primer año del que se disponen datos. Desde entonces, el sector ha casi cuadruplicado las ventas. La facturación del sector en 2020 habría aumentado hasta los 7.746 millones de euros, con un incremento nominal del 1,52% respecto al año anterior. Es una de las peores cifras de los últimos años, es cierto, pero teniendo en cuenta el contexto, con una pandemia que lo ha arrasado todo, crecer ya puede considerarse un éxito. Además, la facturación de 2020 es alrededor de un 50% superior a la obtenida en el año 2010, una época en la que la crisis estaba en su momento más crudo y, aun así, el deporte ganaba peso. Este avance del sector, en un contexto económico tan complejo, después de una dura crisis económica y de consumo -que arrancó en 2008 y se alargó hasta mediados de la década posterior-, y con una durísima pandemia en los últimos meses, obedece a tres factores principales: el repunte de la práctica deportiva, el éxito de los deportistas españoles y, sobre todo, el fuerte crecimiento de actividades como el ciclismo -en todas sus vertientes-, el running, el trail, el pádel, el submarinismo o los deportes de aventura. Crecieron con la crisis de 2008 y lo han vuelto a hacer ahora con el coronavirus, confirmando una evidencia que el sector tiene muy clara desde hace años: las crisis son buenas aliadas para el deporte. ESPECIAL 300 42 En los últimos 30 años el sector de artículos deportivos ha logrado cuadruplicar su facturación. Y lo ha hecho, además, con una crecimiento progresivo sin apenas retrocesos. Y eso, teniendo en cuenta la dificultad de ciertas épocas, dice mucho de la buena salud del deporte. VOLUMEN DE VENTAS TOTAL SECTOR 1997-2020 CIFRAS
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