El triatlón se encuentra, después de un crecimiento espectacular en la primera década de este siglo XXI, en plena madurez. Racionalizándose, redimensionándose y cogiendo ritmos más lógicos. Y más adecuados. A muchos les habrá parecido que en estos últimos años ha reculado, pero en realidad lo que ha pasado es que su fuerte progresión se ha visto frenada y, simplemente, se ha empezado a comportar como en segmento maduro. Y estable. Y aunque esta madurez les priva, a priori, de lograr grandes repuntes (algo que puede volver a suceder en cualquier momento), sí le asegura unos mínimos suficientemente importantes, en practicantes y ventas, como para que, una vez redimensionado, y habiendo dejado atrás la etiqueta de “deporte de moda”, consiga evolucionar con relativa solvencia. a fondo 60 ESPECIAL TRIATLÓN El triatlón disfruta su madurez
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