TradeSport 274 - Marzo 2019

La gran suerte del tenis es que conoce muy bien sus límites. Los ha tenido que conocer. Las marcas saben perfectamente que su margen de crecimiento es muy limitado y actúan acorde con esta visión... 41 En cuanto a las marcas, y dejando de lado el omnipresente Decathlon (que, como era de esperar, tiene el control absoluto –y aplastante- de las gamas bajas-iniciación), el mercado de las raquetas está controlado por apenas una decena de marcas, siendo muy optimista. Marcas como Babolat (líder en unidades), Head , Wilson, Dunlop o Prince. Es una categoría muy marcada por la especialización, sin presencia de las grandes multinacionales (aunque alguna lo intentó), y donde las fuerzas están mucho más repartidas (esa es otra gran diferencia con el pádel), y sin diferencias abismales como las que se dan en deportes como el fútbol, por ejemplo. En cuanto al calzado, es probable que sea la categoría que, dentro del tenis, ha experimentado un mejor comportamiento en los últimos años. En apenas una década se ha triplicado la cifra de unidades vendidas. Eso sí, a diferencia de las raquetas, Nike y adidas, sí tienen un protagonismo importante. Ellos, marcas especialistas como Asics, K-Swiss, Lotto o Joma, y algunas marcas de material duro que han apostado por esta categoría en los últimos años –principalmente Babolat Wilson y Head-. En textil, entran en juego Decathlon –con todo lo que ello conlleva- y las grandes multinacionales, que sacan partido a sus inversiones en patrocinio y dominan aplastantemente el mercado. Aunque, como en otros deportes, el textil es una categoría muy compleja, el trabajo de marcas como Nike, adidas, Asics o la española Joma está dando sus frutos. En definitiva: el tenis sigue teniendo un largo recorrido. Un recorrido sin sobresaltos y sin sufrimientos. El pádel poco más le puede “robar” y la salud del tenis dependerá, a partir de ahora, de la capacidad que tengan clubes y marcas de mantener viva esa cultura del tenis que sigue latiendo en nuestro país. Sin nuevos practicantes, sin un boom como el que puede seguir sumando el pádel, será la lucha entre marcas, con la tecnología como eje de las estrategias, la que marcará el futuro de este deporte. En cuanto al comercio, es probable que el tenis se mantenga como hasta ahora, con una presencia importante en grandes cadenas (especialmente en Decathlon, que controla más del 25% de las ventas en unidades), con algunas multideporte que, por ubicación o por tradición seguirán dándole un espacio importante, y con una red sólida de tiendas especialistas que, aun apostando por el pádel, mantendrán su cuota de tenis.

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