TradeSport 268 - Septiembre 2018

79 El sector está muy vivo. Pero habrá que seguir esforzándose para conseguir que cada vez haya más gente que haga deporte. Y si lo hacemos bien, si todas las piezas de este inmenso puzzle, desde gimnasios hasta marcas, saben ir hacia una misma dirección, el potencial de este universo es inmenso. zaran a reventar precios, financiando la práctica totalidad de sus ventas a 48 o 60 meses y reduciendo los márgenes hasta límites muy peligrosos. Era el principio de un camino peligroso que poco a poco se dirige, tras dejar varios muertos por el camino, hacia una ”reordenación” del mercado. En cuanto a la formación, es obvio que con la constante aparición de nuevas actividades, los profesionales vinculados a los gimnasios, especialmente los entrenadores, tienen que formarse constantemente. Cada año aparecen decenas de nuevas propuestas para que los gimnasios impartan clases y es fundamental que se conozcan a la perfección todas sus ventajas. En este contexto, se han hecho fuertes varias empresas de formación como Tecnosport o Aefa Les Mills, especializadas en buscar nuevas actividades de fitness (o aparatos) y formar a los entrenadores de los centros que apuestan por ellas. EL FITNESS EN EL CANAL DEPORTE El fitness no solo se ha transformado a nivel de instalaciones, también lo ha hecho a nivel de material deportivo para su práctica. Y eso es algo que se ha dejado notar mucho en nuestro canal.Y no porque las ventas hayan caído, sino más bien porque cada día es más complejo saber qué tipo de material podemos “encasillar” dentro de una categoría fitness: si hace algunos años era relativamente fácil clasificar unas zapatillas o unas mallas dentro del mundo del fitness, la evolución de este universo hace imposible saber qué productos hay que “marcar” como fitness y cuáles hay que atribuir a otros segmentos como running, bike…. Las marcas se han sacado de la manga en estos últimos meses el concepto training, pero tampoco es exactamente ropa y calzado para deportes de gimnasio, así que, al final, sólo nos quedarán aquellas líneas diseñadas específicamente para algunas modalidades de bajo impacto u otras actividades de sala como el aeróbic o el step, aunque siendo realistas, muchos de las que las practican lo hacen con calzado que cualquiera de nosotros situaría en categorías que poco tienen que ver con el fitness. También hay que tener en cuenta que el fitness ha sido uno de los sectores que mejor ha comprobado la fluctuación del mundo de la moda y tras algunos años en los que la estética fitness triunfaba dentro y fuera de los gimnasios, de un día para otro este look se convirtió en obsoleto y las ventas cayeron en picado.Ahora parece que el gran trabajo que están haciendo marcas como adidas, Puma, Nike y, sobre todo Reebok (con su apuesta por el Cross Fit) está dando sus frutos. Además, también hay que tener muy en cuenta los esfuerzos de marcas especializadas en lo que podríamos catalogar como prendas de gimnasio (y deporte en general) como Casall, Naffta, Sontress o la recién llegada Bwell. ¿Su baza? Colecciones que combinan una muy buena tecnicidad con un diseño muy cuidado. Justo lo que reclama la mujer, el gran target de este universo. Y antes de acabar es importante hacer una breve mención a un accesorio que ha experimentado –y sigue haciéndolo- un fuerte auge en el mundo del fitness: el pulsómetro. Su éxito, y el que están cosechando también las llamadas pulseras de actividad, ha sido, simplemente, espectacular. La oferta es muy amplia, y el deportista puede encontrar desde modelos básicos que ofrecen información sobre los pasos y las calorías quemadas, hasta modelos más sofisticados que, además de medir la FC, nos ofrecen multitud de datos para tener un control total de lo realizado. Algunos, incluso, disponen de GPS y conexión con los aparatos de la mayoría de las grandes marcas de maquinaria fitness (los gimnasios, en este sentido, se han convertido en muy buenos prescriptores). Con un precio medio que suele oscilar entre los 80 y los 300 euros, y a pesar de la crisis, muchas tiendas especializadas en deportes atléticos y, también, muchos comercios multideporte, han logrado una muy buena rotación con este producto. MARGEN AMPLIO… DE CRECIMIENTO El universo del Wellness, con el fitness en cabeza, lleva años superando baches y creciendo a pesar de las adversidades. Superó con algún susto la crisis y todo parece indicar que a corto y medio plazo las expectativas son muy buenas. Puede que en algún momento fuese una moda, pero en los últimos años se ha impuesto con mucha fuerza una cultura del bienestar, la salud y, también, la imagen, que ha ayudado al fitness y a muchas de sus modalidades a consolidar su fuerza. El sector está muy vivo. Pero habrá que seguir esforzándose para conseguir que cada vez haya más gente que haga deporte. Y si lo hacemos bien, si todas las piezas de este inmenso puzzle, desde gimnasios hasta marcas de textil, calzado y complementos, saben ir hacia una misma dirección, el potencial es inmenso, sobre todo si se mantiene esta cultura del bienestar que se ha impuesto con (y gracias a) la crisis. España, con un índice de obesidad alarmante y con unos gastos sanitarios elevadísimos es, seguramente, uno de los países donde a priori, el fitness puede tener más márgen de crecimiento.

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx