TradeSport 267 - Julio-Agosto 2018

68 a fondo TRIATLÓN Llegar cuesta. Mantenerse cuesta mucho más. El triatlón ha llegado. Ha conseguido construir un segmento fuerte y con identidad propia. Una red de tiendas sólida, una oferta amplia, especializada y superespecializada, y un volumen de practicantes suficientemente importante como para no temer por un retroceso contundente. El triatlón es un deporte maduro. Y ahora toca sostener esa madurez. trenamiento y de ello se han beneficiado –y mucho- los pulsómetros. En cuanto a la nutrición y los complementos alimenticios es, sin duda, la categoría que más ha crecido proporcionalmente en los últimos años. El triatlón –como las carreras de larga distancia de running o bike- es un deporte muy exigente y que, normalmente, salvo en las distancias cortas, conlleva un tiempo de ejercicio lo suficientemente largo como para que, en algún momento, el cuerpo necesite más energía e hidratación.Y no es algo que sólo deban tener en cuenta los profesionales o quienes buscan una buena marca; todo el mundo puede comprobar cómo, si se gestiona bien su ingesta, este tipo de productos pueden ayudar a maximizar el rendimiento. Para el comercio, además, es un producto que por su precio y por los hábitos de compra, genera mucho tráfico en la tienda y es un buen reclamo para fidelizar al cliente. Pero además de esta especialización en productos, el triatlón o, mejor dicho, el buen comportamiento que ha tenido, también ha dinamizado otras disciplinas como el trail o la natación en aguas abiertas y está en el origen de algunas nuevas modalidades deportivas que poco a poco van ganando adeptos, como el swimrun, por ejemplo. Al final, unos y otros se retroalimentan, y eso es fundamental para que mantengan su dinamismo actual. Son complementarios, no competencia. Son deportes, todos ellos, muy exigentes y que tienen mucho de reto personal y eso, como hemos dicho antes, es hoy por hoy un gran valor añadido. Algunos preferirán volcarse en otras modalidades que no exijan tanta preparación como el triatlón, pero lo más habitual es que quien corre, nada o va en bici, tenga tarde o temprano la tentación de probar con un triatlón.Y engancha. MADUREZ SÓLIDA Llegar cuesta. Mantenerse cuesta mucho más. El triatlón ha llegado. Ha conseguido construir un segmento fuerte y con identidad propia. Una red de tiendas sólida, una oferta amplia, especializada y superespecializada, y un volumen de practicantes suficientemente importante como para no temer por un retroceso contundente. El triatlón es un deporte maduro.Y ahora toca sostener esa madurez. La gran suerte del triatlón es que, pese a la crisis, ha seguido ganando adeptos. Más pausadamente que hace unos años, pero sigue siendo un deporte con mucha tirada. El futuro a corto y medio plazo sigue exigiendo moderación. Un control más racional de su crecimiento a nivel comercial. Hay margen para seguir ganando terreno. Bike, running y natación tiran mucho, y lo más lógico es que un porcentaje importante de quienes se enganchan a estos deportes prueben con el triatlón. Prueben y se enganchen. El sector, en este sentido, debe aprovechar dos cosas: por un lado, este repunte de la práctica (que se mantendrá, aunque más progresivamente), y por el otro, el perfil del triatleta, muy exigente con su material y capaz de dejar de lado el factor precio en beneficio de otros aspectos como las prestaciones o, incluso, la marca.

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