TradeSport 243 - Mayo 2016

De un tiempo a esta parte es cada vez más habitual encontrarnos manteros que comercializan calzado deportivo falsificado en las calles de nuestra geografía. Entre los productos de las mantas destaca la "especialización", predominando entre su oferta producto de segmentación; esos bestsellers negados a buena para de los detallistas deportivos, en base a la protección de los mismos, aparecen en mantas en cualquier acera de nuestras ciudades. Este problema, minusvalorado durante mucho tiempo por un sector marquista como el nuestro, cada vez se muestra con mayor rotundidad. Aun así, he de reconocer que todavía hay muchos que lo consideran un problema menor, aunque por experiencia les comunico que, si este producto prolifera en las mantas, es porque los clientes de las mantas lo demandan y se venden. ¿O es que alguien cree que no ofertarían otros productos si tuvieran más tirón? Probablememnte este problema de los manteros es sólo la punta del iceberg, pues invito a que cualquier detallista se deprima buscando en Google por cualquier "sneaker" con el adjetivo baratas. El problema no es novedoso, ¿cuánto tiempo llevamos viendo mantas en nuestras calles? Demasiado, sin duda. En la última década hemos visto con asiduidad mantas en nuestras calles con diferentes productos, y no olvidemos la situación de los sectores que se han visto afectados por esta lacra, y tampoco que aquellos encargados de perseguir esta venta ambulante ilegal hacen poco o nada por erradicarla, que no son otros que los Ayuntamientos. Podríamos alzar la voz respecto a la indudable dejación de funciones de nuestros Ayuntamientos que permiten esta venta ilegal en la puerta de comercios que pagan sus impuestos y tasas, pero me gustaría poner el foco en otro lugar, en las marcas, que son las más interesadas, imagino, en proteger sus productos y exigir la actuación de las administraciones públicas. No dudo de lo complicado que puede ser perseguir este tipo de venta desde las marcas, y tampoco de que las mismas estarán llevando a cabo algún tipo de acción para protegerse de este tipo de venta, pero resulta curioso que las marcas estén bloqueando el acceso a ese producto a sus clientes por que no encajan en el diseño de su política comercial para esas referencias, mientras que son incapaces de contener esta mancha de aceite cada vez mayor. Desconociendo cuantos esfuerzos se están dedicando desde las marcas a combatir esta lacra, y si están en contacto con Ayuntamientos incitándoles a la acción, ya sea directamente o a través de organismos que les representen, lo que sí puedo afirmar es el poco impacto que parecen tener, pues es evidente la abundancia de oferta de producto ilegal en las calles e internet. Asimismo, desconozco el volumen de ventas de estas mantas, pero sí estoy seguro de que no es baladí, por su progresión y por las estimaciones de la la Oficina de Armonización del Mercado Interior (OAMI), que afirma que los fabricantes dejan de ingresar alrededor de 500 millones de euros al año en la Unión Europea. Así, solo espero que la calidad de esos productos sea ínfima, pues como logren la satisfacción de su cliente, aunque a muchos les parezca increíble, puede afectar de manera notable. Nos sorprenderíamos de la rotación de producto en las mantas, y si quieren hagan la prueba. Párense frente a una de ellas durante un tiempo y comprueben la tasa de conversión de los que paran frente a sus escaparates. Yo la primera vez que me tome esa molestia en la Gran Vía madrileña tras la presentación de la camiseta rosa del Real Madrid me sorprendí. Para muchas tiendas, aquellas que no son las "elegidas" para comercializar estas referencias es incomprensible que las marcas no tengan capacidad para perseguir y erradicar ese daño a su marca, y que por el contrario si se esfuercen en erradicar estos productos de sus tiendas. A esta incomprensión se suma su estupefacción, cuando observan como un marketplace como Amazon vende modelos de "segmentación", o cuando cualquier consumidor a golpe de click pueden acceder a los mismos mientras que ellos tienen negada su venta ni cuentan con productos alternativos que ofrecer a sus clientes. Incluso para las tiendas "elegidas", no es agradable que los manteros vendan a precio de saldo copias de esas referencias frente a sus establecimientos. Y lo que extraña es que no hayan levantado la voz con mayor intensidad. Sin duda las marcas tienen un reto mayúsculo ante sí, al menos eso muestra el crecimiento de manteros y webs de venta de producto pirata, y su segmentación sin alternativas de productos para un buen número de tiendas no creo que ayude a que estas sean aliadas de esa lucha. Tampoco nos ha de sorprender: el sector ha demostrado poca capacidad de dar respuesta conjunta a problemas o complicidades, aunque por mi parte sólo espero que no minusvaloren este problema y actúen con energía contra él. ARTÍCULO DEL MES Carlos Grande Secretario general de ASECODE Podríamos alzar la voz respecto a la indudable dejación de funciones los Ayuntamientos que permiten la venta de falsificaciones en nuestras calles, pero también debería ponerse el foco en otros “culpables”: las marcas Para muchas tiendas, aquellas que no son las "elegidas" para comercializar estas referencias. es incomprensible que las marcas no tengan capacidad para perseguir y erradicar ese daño a su marca y que, por el contrario, sí se esfuercen en erradicar estos productos de sus tiendas. Segmentación pirata TS 36

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