EDITORIAL Hace unos meses, uno de los grandes operadores del sector, El Corte Inglés, decidió dar un cambio radical en la estrategia de venta de sus secciones de deporte. Después de años apostando en firme por la fórmula del shop in shop, en muchos casos de explotación directa, ha dado un giro de 180 grados apostando, de forma escalonada, por una fórmula de lineal categorizado, es decir, segmentando por deportes y no por marcas. El anuncio a los proveedores del cambio de estrategia no tardó en suscitar, especialmente entre las grandes marcas, un intenso debate sobre la idoneidad o no de este cambio y cuál debería ser el modelo más adecuado como fórmula de venta en grandes cadenas y grandes comercios deportivos. Esta vuelta a la potenciación de los lineales por actividades ya está implementada en algunos de sus centros. Hace unos días pude visitar uno de ellos, en Barcelona, y es innegable que la apuesta es firme. Firme y, para mí, quizás también sea arriesgada. El modelo de shop in shop ha sido durante estos años el gran punto diferenciador entre El Corte Inglés y todos sus principales competidores, y renunciar a esta fórmula es, sin duda, un paso valiente. El modelo de shop in shop ha sido durante años el gran punto diferenciador entre El Corte Inglés y sus principales competidores, y renunciar a esta fórmula es, sin duda, un paso valiente El debate sobre si es mejor apostar por los córneres (de explotación directa o no), por una fórmula mixta o exclusivamente por lineales categorizado, viene de lejos. Y solo el tiempo y los resultados darán o quitarán razones. Para algunas marcas, eso sí, el cambio de estrategia de El Corte Inglés se dejará notar en sus arcas, especialmente en aquellas que estaban implementadas con explotación directa, gestionando su espacio en el centro. Esta pérdida de exposición de venta y diferenciación obligará a estas marcas a buscar nuevas estrategias, fuera de la cadena, para contrarrestar la más que probable caída de las ventas. La nueva apuesta de El Corte Inglés responde, según sus responsables, a la necesidad de dar una mejor respuesta al consumidor, facilitando así su experiencia de compra. La nueva dirección de ventas de deporte de la cadena tiene el convencimiento que la venta de material deportivo a través de un lineal categorizado, más especializado y potente en mix, facilita y dinamiza la compra y, por lo tanto, mejorará las ventas. Esta apuesta, que también está abriendo las puertas de los lineales a otras marcas, también ayudará a la cadena a potenciar sus marcas propias, bastante olvidadas en estos últimos años. Algunos dirigentes de las grandes marcas cuestionan esta decisión porque piensan que su imagen puede quedar diluida en un lineal multimarca y otros, en cambio, la aplauden porque con esta fórmula consiguen tener cabida en algunos lineales. Otros también creen que el departamento de compras debería de hacer una firme apueste por ‘marcas y segmentos de tendencia’ y así rejuvenecerse. Una apuesta valiente y un debate que hará cambiar muchas estrategias en el sector. El tiempo dirá… JAUME FERRER jferrer@tradesport.com AYUDANOS CON TUS SUGERENCIAS: tradesport@tradesport.com Perdone que insista O P I N I Ó N DESDE EL AÑO1993 SPORT PANEL EDITA MENSUALMENTE TRADESPORT, LA PRIMERA PUBLICACIÓN DEL SECTOR DEPORTIVO. TRAS MÁS DE 20 AÑOS DE HISTORIA, Y CON LA MISMA INDEPENDENCIA CON LA QUE SE FUNDÓ, TRADESPORT SE HA CONSOLIDADO COMO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN IMPRESCINDIBLE PARA AQUELLOS QUE QUIERAN CONOCER LA EVOLUCIÓN DEL SECTOR. TS 3 Aun a riesgo de parecer cansino, dedicaré una vez más esta columna a la práctica deportiva. Y una vez más lo hare para decir que me parecen lamentables, por ser suave, los índices de practicantes que barajamos en España y en el resto de Europa. Un reciente estudio habla de un 60% de “abstención” en el Viejo Continente, es decir, que 6 de cada 10 europeos pasan absolutamente de hacer deporte. Alarmante. Y más teniendo en cuenta que esos resultados son una media, y que en muchos países nórdicos los índices de práctica son bastante buenos. El sur, una vez más, falla. Y falla aun teniendo unas condiciones climáticas –todo el añoperfectas para que el deporte sea un hábito para muchos. Pero ni así. Nos llenamos la boca con el boom del running, del bike o del pádel pero, al final, el auge de estos deportes apenas se ha traducido en unos pocos puntos de crecimiento en lo que a índices de práctica deportiva se refiere. Y la conclusión es obvia. Son relativamente pocos los que antes no hacían deporte y ahora sí. Y son muchos los que antes hacían unos deportes y ahora hacen, también otros. El deporte tiene la obligación de vender deporte. De luchar para que la gente se mueva. Y no solo para venderles. Es una cuestión de esencia Pero ese no es el tema. El problema es que nadie hace nada. Nadie. De los gobiernos mejor no fiarnos. Y mucho menos confiar en que muevan un dedo. Suben el IVA y poco más. Los de ahora, los de antes y los que habrá. Miran al deporte como algo estrictamente profesional, y con esta idea hacen sus inversiones. No se preocupan, ni siquiera, de girarse y mirar hacia la sanidad. Ni así se convencen. Y cuando se den cuenta de que el deporte es salud y de que potenciarlo es vital para no desmontar el estado del bienestar, quizás sea demasiado tarde. Así, sin mucho que esperar de las instituciones –lo de la Semana del Deporte suena a broma de mal gusto-, quizás va siendo hora de que las marcas hagan algo. Al parecer ya ha habido movimientos entre las grandes, auspiciadas por la FESI, para impulsar nuevos proyectos que ayuden a dinamizar el sector y la práctica deportiva. Poco importa si lo hacen de cara a la galería o por puro egoísmo empresarial, pero que muchas de las grandes del sector se hayan unido en esta aventura es, cuanto menos, significativo. Quizás lo hagan porque saben que a este paso no habrá a quien venderle, pero aun así, es un paso muy importante para el sector. Y si a estas alturas aún creen que pueden influir en las instituciones europeas, bienvenido sea el intento. El deporte tiene la obligación moral de vender deporte. De luchar para que la gente se mueva. Y no solo para venderles. Es una cuestión de esencia. Las marcas están haciendo un buen trabajo en España. El running y el bike han sido un campo de pruebas excelente para arrancar a mucha gente del sofá y ponerles a correr o pedalear en la calle. Pero el camino es todavía muy largo y no basta con patrocinar un par de carreras. No es política; es futuro. RAUL BERNAT raul@tradesport.com Shop in shop TRADE 233 ESPECIAL TRIATLÓN TRADE 233 ESPECIAL OUTDOOR TRADE 232 ESPECIAL BAÑO TRADE 231 ESPECIAL RAQUETA
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