TradeSport 226 - Noviembre 2014

EDITORIAL Uno de los datos más preocupantes a los que siempre nos hemos referido cuando hablamos de práctica deportiva es el bajo índice de población activa que tenemos en nuestro país. Hasta no hace muchos años el porcentaje de quienes no hacían ninguna actividad deportiva superaba el 50%, y aunque, como constata un reciente estudio elaborado por el IESE, este 2014 el porcentaje de “inactivos” ha bajado hasta el 44%, seguimos siendo uno de los países europeos con peor índice de práctica deportiva. Uno de los grandes “culpables” de que cada vez haya más gente que hace deporte es, sin duda, la crisis. La redirección del gasto hacia un ocio más asequible, una mayor preocupación por la salud e, incluso, el aumento del paro, han sido factores clave para que deportes como el running, el bike o el pádel hayan ganado muchos adeptos y, sobre todo, hayan atraído a gente que nunca había hecho deporte. Que hayamos reducido entre 5 y 10 puntos el porcentaje de sedentarios en apenas cinco o seis años es una muy buena noticia, pero como hemos dicho, los índices siguen siendo bajos. Y lo son, sobre todo, por las consecuencias que ello tiene a nivel de deterioro de la salud (obesidad, sobrepeso, patologías coronarias…). Y para muestra un dato estremecedor: el 13,5% de las muertes que se producen en España podrían evitarse introduciendo el ejercicio físico. Dicho esto, y mirando un poco más hacia “casa”, también es evidente que las marcas deportivas, las tiendas y el sector en general tienen mucho que ganar. La colaboración del sector y de las instituciones en este asunto ha dejado mucho que desear, y aunque eso debería preocuparnos bastante, también tiene su parte positiva: si unos y otros se implicaran más en este asunto, las posibilidades de seguir reduciendo la cifra de inactivos es muy amplio. Quizás baste con tener claro que un deportista habitual gasta en material cuatro veces más que uno que practica deporte de forma esporádica. Pero hay otro tipo de ventajas muy contundentes y que deberíamos aprovechar, sobre todo si tenemos en cuenta las dos principales conclusiones del estudio: la primer señala que si invertimos un euro en promoción deportiva, tenemos un ahorro aproximado de 50 euros en gasto sanitario acumulado durante 15 años; la segunda confirma que por cada euro per cápita invertido en esta materia, se incrementa en 0,20-2,80% el número de gente que realiza tres horas o más de actividad física a la semana. El sector -y especialmente la patronal AFYDAD-, debería reforzar su compromiso con la promoción de la práctica. Empezar a ejercer como lobby y no dejar solas a marcas que, de forma individual pero con mucha voluntad, y aprovechando el boom del running y el bike, han estado bastante activas en estos últimos años. Tendríamos que aprovechar el momento ahora que hay un alto grado de concienciación sobre la importancia de hacer deporte. Nuestro mercado también conseguirá crecer si cada año hay más gente activa. En los peores años de las últimas décadas hemos conseguido bajar considerablemente el índice de personas sedentarias, pero un 44% sigue siendo demasiado para un país donde hacer deporte es asequible y accesible. JAUME FERRER jferrer@tradesport.com AYUDANOS CON TUS SUGERENCIAS: tradesport@tradesport.com Nosotros O P I N I Ó N DESDE EL AÑO1993 SPORT PANEL EDITA MENSUALMENTE TRADESPORT, LA PRIMERA PUBLICACIÓN DEL SECTOR DEPORTIVO. TRAS MÁS DE 20 AÑOS DE HISTORIA, Y CON LA MISMA INDEPENDENCIA CON LA QUE SE FUNDÓ, TRADESPORT SE HA CONSOLIDADO COMO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN IMPRESCINDIBLE PARA AQUELLOS QUE QUIERAN CONOCER LA EVOLUCIÓN DEL SECTOR. TS 3 Nuestro sector nunca se ha caracterizado por desprender empatía. Ni solidaridad. Los grandes, por la razón que sea –a veces perfectamente justificable- siempre han ido a la suya, pasando absolutamente de iniciativas sectoriales, mientras que los pequeños, por pequeños, siempre se han resignado pensando que no tenían fuerza para hacer absolutamente nada. Y así, en la última década, proyectos sectoriales que podrían haber sido muy positivos se han quedado en nada. Por suerte, en estos últimos meses, las cosas parecen haber cambiado. Y todavía no es tarde. Los pequeños se han hecho menos pequeños y han empujado fuerte para que otros, como ellos o incluso más grandes, se dieran cuenta de que la única manera de ser grandes y, sobre todo, de no depender de los grandes, es juntando fuerzas. Y el acuerdo alcanzado entre Giro 180 y Twinner es un buen ejemplo –quizás el mejor- de que marcarse objetivos conjuntos sólo puede aportar cosas positivas. Sabemos de sobras que el camino, para ambos grupos, no ha sido fácil. Y no lo ha sido, entre otras muchas cosas, por las presiones que han hecho algunos grandes. Grandes que muchas veces no quieren que los demás sean grandes. Ni medianos. Este paso que han dado ambas centrales, y al que pueden unirse otros grupos, es un paso inevitable en un contexto como el actual. A algunos les parecerá mejor o peor, pero es obvio que ante los cambios que se han dado últimamente en la distribución y, sobre todo, en el nuevo reparto de poderes, la concentración es uno de los pocos caminos que no llevan a un callejón sin salida. Casualidad o no –yo creo que no- quienes están detrás de este gran acuerdo son detallistas, no cargos importantes en la tarjeta de visita. Quienes lo han suscrito están detrás del mostrador y toman decisiones pensando como detallistas. Y pensando en los detallistas. No piensan en mantener más cuota de poder que el de al lado. Saben perfectamente que si el grupo avanza, ellos avanzan. Otros han podido hacerlo antes y no lo han hecho. Por algo será. Quienes definen las estrategias de Giro 180 y Twinner tienen muy claro que cuando el temporal aprieta, hay que buscar aliados, y que buscar aliados solo puede aportar ventajas. Saben, imagino, que hay que unirse, no para estar juntos, sino para hacer cosas juntos. Es así de simple. Y así de complejo para tantos. El futuro, para muchos grupos, es confuso. Algunos por tamaño y otros por problemas internos (básicamente económicos), atraviesan momentos difíciles, y si no empiezan ya mismo una huida hacia delante, los daños colaterales pueden ser de órdago. La distribución tiene que ordenarse sí o sí, y en esta reordenación, los acuerdos entre centrales, sean de la índole que sean, serán cada vez más habituales. Y lógicos. La atomización que siempre ha definido nuestro sector no es una buena carta de presentación ahora mismo, y muchos deben empezar a entender que, en un grupo, el Nosotros siempre está por delante del Yo. RAUL BERNAT raul@tradesport.com Aprovechar el momento TRADE 222 ESPECIAL TRIATLÓN TRADE 223 ESPECIAL OUTDOOR TRADE 224 COMPLEMENTOS TRADE 225 ESPECIAL CALZADO

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