TradeSport 223 - Julio-Agosto 2014

outdoor y una funcionalidad justa. Las grandes han nacido y crecido con lo técnico, con lo extremo incluso, y han seguido apostando por esta tecnicidad máxima (que les da imagen) pero, su salvación –y la del segmento en general- ha pasado por desarrollar colecciones menos técnicas y más asequibles. Colecciones donde el diseño tiene un protagonismo especial… sin renunciar a la tecnicidad y a la funcionalidad.Y por suerte se han encontrado con un perfil que por regla general es bastante exigente con lo que compra. La gran paradoja de todo este “proceso” es que a medida que las marcas bajaban de las altas cumbres, el consumidor ganaba interés por todo lo técnico. Aunque fuera para ir en moto, salir a pasear al perro o irse de copas con los amigos, el practicante ocasional –o quien, simplemente, quiere llevar un look outdoor- también se ha ido concienciando de la importancia de utilizar material técnico. Las marcas se han adaptado perfectamente a las necesidades del consumidor y, pese a su esencia “técnica”, han sabido explotar a la perfección el factor moda, conscientes de que para el practicante ocasional -y para el no practicante- el argumento diseño-versatilidad es clave para que se decida a gastar. No e slo mismo invertir en algo que apenas podrás usar cuando subnas un 3.000 que hacerlo en algo que, además, puedes usar para el día a día. TERRITORIO ESPECIALIZADO Como era de esperar, el Outdoor ha experimentod un cambio radical tanto en la oferta como en la distribución. Y en este cambio hay una palabra que ha adquirido una trascendencia espectacular: especialización. El consumidor ha marcado el camino a seguir y las marcas no han dudado en seguirlo con firmeza. El consumidor exige y la marca –y la tienda- dispone. Y ahora el consumidor exige variedad y servicio. Especialización y, sobre todo, superespecialización. El outdoor, no lo olvidemos, fue uno de los segmentos donde primero se apostó por la especialización, y no es extraño que, hoy en día, sea uno de los deportes con una red de tiendas especializadas más sólida. Tiendas que, además, controlan gran parte de las ventas de las gamas más técnicas en todas las categorías. El auge de Decathlon, además, ha finiquitado a gran parte de las marcas de primer precio y ha reordenado la distribución, reduciendo el protagonismo del Outdoor en las tiendas multimarca y reforzando a las especialistas. ¿El futuro? No es muy difícil adivinar que el primer precio es batalla perdida para cualquier marca ni que las gamas más técnicas se venderán sobre todo en las tiendas especialistas, que también reforzarán su apuesta por las gamas medias para poder atraer a ese perfil del que hablábamos antes. ¿El multideporte? Hay esperanza. Y la hay gracias al buen comportamiento que están teniendo algunas disciplinas como el travel o el senderismo más light, que además de tener un buena demanda, tienen muchas más posibilidades de encajar en según qué tiendas multideporte que otros deportes que requieren una mayor especialización. Este tipo de tiendas difícilmente podrá captar a un cliente que ya se ha fidelizado con el comercio especialista, pero el segmento ofrece muchas posibilidades. El objetivo no tiene que ser convertirse en un referente del outdoor técnico; basta con ser un buen socio para las marcas que quieren explotar las colecciones más asequibles o, sobre todo, las líneas claramente urbanas, que seguramente no requieren un grado tan alto de especialización. EL TRAIL: CULPABLE Si hay que señalar a alguien para “culparle” del porqué del relativamente buen momento que vive el oudtoor, todas las miradas apuntarían hacia el trail. Ha sido esta modalidad la que ha frenado la caída de las ventas y es, también, una de las que más confianza genera de cara los próximo meses. Su comportamiento en estos últimos meses ha sido, simplemente, espectacular. Ha cogido la estela del running y se ha convertido, con diferencia, en la modalidad más fuerte del universo outdoor. Es un deporte accesible (seguramente sea un poco más exigente que el running, pero está al alcance de todos aquellos que quieran correr en plena naturaleza) y asequible (las gamas altas de calzado difícilmente superan los 180 euros y en textil el gasto no tiene porque dispararse más allá de los 100-150 euros si se apuesta, también, por gamas altas). Para el sector, obviamente, ha sido un buen salvavidas. Para los especialistas y para los multideporte. Su ambigüedad representa una muy buena oportunidad para las marcas de running y outdoor, y para las tiendas especializadas en uno y otro universo. Además, las marcas que en ellas se venden no suelen ser las mismas, y apenas dos o tres tiene presencia en ambos canales. En cuanto a las marcas, como era de esperar todas las grandes vinculadas al outdoor o el running han apostado a ciegas por esta modalidad. Algunas lo han hecho con mucha cautela y otras se han especializado, pero a día de hoy no hay ninguna marca de running ni de Outdoor que no apueste por el trail. En el bando del outdoor, el camino lo marca, con diferencia, Salomon, aunque marcas como The North Face, Tecnica, La Sportiva, Innov-8 o Scott están haciendo un gran trabajo. En el bando del running marcas como Mizuno, Asics, Saucony, Brooks o New Balance, han apostado muy fuerte por Las marcas se han adaptado perfectamente a las necesidades del consumidor y, pese a su esencia “técnica”, han sabido explotar a la perfección el factor moda, conscientes de que para el practicante ocasional -y para el no practicante- el argumento diseño-versatilidad es clave para que se decida a gastar. TS 30 ESPECIAL OUTDOOR

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