Es cierto que por necesidad todos –o casi todo- vendemos más barato. Incluso vendemos prendas que pueden ser de hace una o dos temporadas –con mayor descuento todavía-, pero lo importante es que hay tráfico en las tiendas y, sobre todo, que cada vez hay más gente que hace deporte en invierno y, sobre todo, que es consciente de la importancia de hacer deporte con prendas técnicas. Poco a poco empieza a consolidarse esta cultura de lo técnico –muy arraigada en otros países europeos y en estados Unidos- y eso, sin duda, es una gran noticia para el sector. Como también lo es que esta tecnicidad esté traspasando los límites de lo estrictamente deportivo y se este imponiendo con fuerza en las calles. Ha sido un paso determinante para que segmentos como el outdoor crecieran como lo han hecho. Y, también, para que las tiendas vinculadas a este universo hayan logrado posicionase como lo han hecho. En deportes como los vinculados al outdoor, sobre todo en los más extremos, nadie duda de que el textil técnico es imprescindible. Como hemos dicho antes, para los practicantes habituales el factor precio es secundario y eso se ha notado en las ventas y, sobre todo, en el auge y consolidación de la red de tiendas especializadas. En cuanto al producto, es evidente que las llamadas terceras capas e, incluso, las segundas capas, tienen gran parte del protagonismo en el global de las ventas, pero dentro de este “renacer” del textil técnico de invierno, no podemos dejar de lado, como uno de los grandes dinamizadores, a las primeras capas técnicas. Este boom, propiciado en gran parte por la especialización y la proliferación de marcas –y tiendas-, ha sido determinante para que la práctica deportiva no cayera drásticamente de noviembre a marzo como hace algunos años: con los avances en textil técnico cada vez hay más gente que a perdido el miedo a hacer deporte a temperaturas por debajo de los 5 ó 10 grados. Eso es algo habitual en países de más al norte, como Alemania o los países Nórdicos, pero para en España, hasta no hace mucho hacer según que deportes con estas condiciones era cosa de pocos (y locos). BUENOS ÁNIMOS Las ventas de este invierno están siendo bastante buenas teniendo en cuenta que, aunque algunos vena brotes verdes, seguimos inmersos en una compleja crisis económica –ahora más local que global-. Las tiendas, sobre todo las especialistas y las que tienen la suerte de estar bien ubicadas, están consiguiendo vaciar sus almacenes, un logro determinante para afrontar la nueva temporada de compras. Aunque hay que ser precavidos, no es lo mismo programar con el armario lleno que hacerlo con el armario vacío, y si las cosas no se tuercen mucho en estas últimas semanas de invierno, muchas tiendas podrán afrontar con optimismo las compras de textil técnico para el próximo invierno. Aunque es complejo saberlo, quizás cuando comience el próximo invierno ya hayamos dejado la crisis atrás y la gente vuelva a gastar. ESPECIAL INVIERNO Es evidente que las llamadas terceras capas e, incluso, las segundas capas, tienen gran parte del protagonismo en el global de las ventas, pero dentro de este “renacer” del textil técnico de invierno, no podemos dejar de lado, como uno de los grandes dinamizadores, a las primeras capas técnicas. TS 74 El auge de determinadas modalidades atléticas -especialmente running, bike y, también outdoor-, el buen año del esquí y el repunte de la práctica deportiva a nivel global, ha conllevado que la vertiente más atlética del sector esté ganando terreno, también en invierno, a pesar a de la compleja situación.
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