TradeSport 214 - Octubre 2013

transpirable, que absorba el sudor de nuestro cuerpo, que lo transporte fuera y que seque rápidamente para no tener sensación de humedad y/o frío. A partir de aquí, las posibilidades son infinitas; en marcas, en modelos, en tipologías de producto –manga corta, larga, sin mangas, piratas, shorts, con o sin cremalleras…-, y también en espesor (con mayor o menor capacidad aislante). Este tipo de prendas, insistimos, son de vital importancia tanto en inverno como, sobre todo, en verano (en muchas actividades, especialmente en un entorno como el que disfrutamos en España, será la única capa que llevaremos). Las primeras, las prendas de invierno, están diseñadas para protegernos del frío exterior, del viento y las corrientes de aire que desplazan el aire caliente que está a nuestro alrededor, y de la humedad; las de verano, básicamente tienen como principal finalidad exportar el sudor al exterior y, en algunos casos, aprovechar este sudor para mantener el cuerpo fresco. En cuanto a los materiales utilizados, la mayoría de marcas apuestan por el poliéster, un tejido extremadamente transpirable e hipoalergénico. Algunos fabricantes suelen combinarlo con el elastano –sobre todo en prendas ajustadas o de compresión-, con poliamida y/o con tejidos que incorporan iones de plata y que aportan a la prenda una gran capacidad antimicrobiana y evitan los malos olores. Últimamente algunas marcas también están “recuperando” la lana merino por su gran poder aislante y por su capacidad para absorber agua sin que el exterior de la prenda este húmeda. UN BOOM A TENER MUY EN CUENTA Las tiendas especialistas –y algunas multideporte que han sabido gestionar bien toda la vertiente técnica- están sobrellavando la crisis mejor que el resto de comercios. Sufren, lógicamente, pero la rotación no es tan dramáticamente baja como en la mayoría de tiendas multideporte-. La práctica ha subido y también lo han hecho las ventas –por desgracia, no proporcionalmente-. El sector está sabiendo aprovechar muy bien el auge de deportes como el running o el bike, y aunque podamos poner en duda la necesidad de que haya tantas aperturas de tiendas especialistas, es obvio que hay determinadas oportunidades que no se pueden desaprovechar. Ni a nivel comercial ni, tampoco, a nivel de marcas. En este sentido, es obvio que cuando un producto es capaz de generar una buena demanda –por la razón que sea- las marcas se vuelcan en ello… y las tiendas también. Y esto es lo que ha pasado con las primeras capas en universos como el del outdoor o el running, seguramente los dos que más han ayudado a esta categoría a ganar el protagonismo que tiene hoy en día en las tiendas y en los catálogos de las marcas. Esta fuerte demanda, y el potencial que han visto las marcas, han sido clave para que este segmento se haya convertido en uno de los más innovadores del sector. A priori parece que el margen para mejorar la tecnicidad de las prendas es muy limitado, pero año tras año las marcas dan una vuelta de tuerca a sus productos y diseñan nuevas funcionalidades que, además de mejorar el producto, sirven para que los habituales de este tipo de prendas no tengan dudas a la hora de renovar su armario. Y aunque es cierto que, a medida que el producto ha ganado en funEl “éxito” de las primeras capas se debe al boom que han experimentado el running, el bike o algunos deportes outdoor y, sobre todo, a la mayor concienciación por parte de los consumidores de la importancia de usar prendas técnicas. Si hace apenas un par o tres de años alguien dudaba de si las llamadas primeras capas era un moda pasajera o una tendencia que había llegado para quedarse y que, además, iría ganando cuota con el paso de los años, a estas alturas creo que todo el mundo tiene bastante claro que estamos ante un segmento fuerte, con identidad propia… y con mucho recorrido. Un segmento que ha llegado para quedarse y que cada vez tendrá más peso en la oferta de marcas y tiendas. TS 87

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx