TradeSport 211 - Junio 2013

Es obvio que dentro del poderoso mundo del fútbol -sin duda uno de los segmentos que más dinero mueve dentro del deporte (en material y en otras muchas cosas)- el producto estrella es el calzado. Es en esta categoría donde las grandes marcas invierten más en I+D, en patrocinios y en marketing y, obviamente, es la categoría más dinámica del segmento, con millones de pares vendidos cada año, tanto para jugar como, también –cada vez más- para el día a día (versiones casual, claro). Pero eso no significa, ni mucho menos, que sea la única categoría fuerte. Todo lo que rodea al universo de las equipaciones y las réplicas también mueve importantes flujos de dinero. El primero está básicamente vinculado a la práctica amateur (y el fútbol es el deporte más practicado en este sentido) y el segundo está más relacionado con los sentimientos y la pasión por un club o una selección. El primero, digámoslo de otra manera, es para jugar; el segundo, para enseñar, para identificarse. Y los dos, repetimos, generan miles y millones de euros cada año. EQUIPACIONES: CAMBIO DE REGLAS Para hacernos una idea de las cifras que puede llegar a mover este universo bastaría con repasar los datos federativos de los principales deportes de equipo, comenzando por el fútbol. Un análisis de los clubes (y colegios) y las licencias nos daría una idea bastante clara de la fuerza de estos segmentos. Además, habría que añadir la larga lista de liguillas amateur que se celebran en nuestro país y que, obviamente, tienen una incidencia directa en la venta de equipaciones. La demanda, aunque estable, es muy fuerte, y eso conlleva que cada vez haya más oferta y, sobre todo, que las marcas busquen nuevas estrategias para sacar mayor rentabilidad a este negocio. En los últimos años, crisis aparte, el sector ha cambiado considerablemente. Especialización, Internet, una nueva cultura del bienestar, cambios en los hábitos de consumo… Y en este proceso, prácticamente todos los segmentos han experimentado una transformación importante. El mundo de las equipaciones, seguramente, es uno de en los que más se ha evidenciado este cambio. Un cambio que no se ha visto propiciado por una caída drástica de las ventas sino, más bien, por la llegada de nuevos players que han impuesto unas nuevas reglas del juego, apostando por la venta directa. Y como cabía esperar, sacrificando intermediarios se ha dado el pistoletazo de salida a una guerra de precios que, en algunos casos, pone en jaque el margen de las tiendas y, también, la calidad del producto. Entre las marcas locales, las extranjeras, las marcas blancas y ahora, con las grandes del fútbol apostando fuerte, el segmento está muy saturado y el factor precio se ha convertido en un factor mucho más decisivo que la marca. Y aunque como hemos dicho la crisis no ha tenido una incidencia directa en la venta por unidades, sí la he tenido en la venta en valor, es decir, que ha provocado que los “compradores” de equipaciones, especialmente clubes y escuelas (dos colectivos muy castigados por la crisis), estén recortando gastos, y cuando a su puerta se presentan marcas que ofrecen packs a con precios que revientan el mercado, no dudan demasiado en aceptar sus ofertas independientemente de la calidad del producto. Es complejo saber cómo evolucionará a corto y medio plazo el sector. La venta directa ha generado muchas quejas y recelos, especialmente entre quienes siempre han trabajados con las tiendas como intermediarios, pero es probable que se acabe imponiendo como fórmula más habitual. Además, habrá que estar atentos, también, a como se comportan los operadores que ESPECIAL EQUIPACIONES La demanda de equipaciones, aunque estable, es muy fuerte, y eso conlleva que cada vez haya más oferta y, sobre todo, que las marcas busquen nuevas estrategias para sacar mayor rentabilidad a este negocio. Y en estas nuevas estrategias la tienda cada vez tiene menos protagonismo. Guerra sin tregua TS 30

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx