TradeSport 196 - Febrero 2012

La edición de este año de ISPO se ha cerrado sin grandes crecimientos. El contexto económico ha marcado con fuego el desarrollo de esta edición, pero los responsables del salón deben de estar más que satisfechos con los resultados obtenidos. No en vano, la cifra de expositores ha sido un 3% superior a la del año anterior –cuando ya representó un récord- y los visitantes han alcanzado niveles muy similares a los de 2011, con cerca de 80.000 profesionales –de más de 100 países- paseando por los 17 pasillos de la feria. La cifra de visitantes, insistimos, no ha crecido, pero teniendo en cuenta el absoluto pesimismo que reinaba en Europa – especialmente en el sur- las semanas anteriores al salón e incluso la atmósfera que se respiraba el primer día, el balance no es malo. Al contrario. Uno de los datos más destacables de la edición 2012, más allá de la buena acogida que han tenido las múltiples actividades paralelas impulsadas por el salón, ha sido el incremento de visitantes de países como Rusia, los EE.UU., Turquía, Canadá y China, un dato que reafirma, todavía más, la internacionalización del salón y, especialmente, su importancia para los mercados emergentes. No en vano, el 65 por ciento de los visitantes y el 83 por ciento de los expositores procedían del extranjero. Volviendo al salón, como hemos dicho los ánimos estaban un poco decaídos el primer día. El cálido invierno que estaba atravesando Europa y, sobre todo, la difícil situación económica en algunos países europeos, eran motivos más que suficientes como para afrontar este salón sin excesivas esperanzas. Cabizbajos. Pero en pocas horas se pasó del pesimismo a la resignación y de la resignación al “pasar página”. Casi al unísono. La gente se dio cuenta de que cuando el daño ya está hecho, y no hay solución, lo mejor es pasar página. La temporada anterior hay que darla por perdida, hay que asumir que el comercio –de cualquier tamaño y de cualquier formato- va a ser mucho más rácano en sus compras –especialmente material duro de invierno-, pero conociendo las reglas del juego, el futuro es mucho menos confuso. Difícil, obviamente, pero más fácil de controlar y de prever. No es extraño pues, que una de las frases más repetidas en la feria, tanto por los españoles como por el resto de visitantes y expositores, fuera “hay que mirar para adelante”. Llorar por las esquinas no sirve de nada –aunque haya motivos-, y cuando has asumido el varapalo es mucho más fácil levantarse y seguir andando. Y eso es lo que se vio en ispo. El salón, que empezó triste, acabó convirtiéndose en una especie de antidepresivo. Habrá que ver cuánto dura y si tiene efectos secundarios, pero para los ánimos del sector, ispo acabó siendo un revulsivo. Quienes llevamos años visitando la feria sabemos perfectamente que este año ha sido un año raro. Uno tiene la sensación de que había más gente buscando marcas para distribuir en sus países que tiendas que asistían al salón para conocer las novedades de los más de 2300 expositores. Menos tráfico del habitual en los pasilloso esa era la sensación- pero un visitante de “más calidad”, como han señalado muchos expositores. La lectura parece clara: a quien le van bien las cosas puede permitirse el lujo de ir a Munich; a quien no, mejor quedarse en casa. La ausencia de algunos habituales de ispo que no atraviesan su mejor momento confirmaría esta teoría, aunque para ser justos también hay reconocer que algunos de los que luchan contracorriente esta temporada también visitaron el salón, dando fe de su esfuerzo por salir del bache. Por cierto, Spanair también tuvo parte de culpa de que se hablara menos español en los pasillos que en otros años. La fiesta va por barrios… y días Como siempre los dos días fuertes fueron domingo y lunes, los dos primeros. Martes normal y el miércoles, como de costumbre, día perfecto para que los expositores den una vuelta para conocer lo que presentan el resto de marcas. Desde que ispo abrió sus puertas los pasillos y los stands de los pabellones con más peso –deportes de nieve y outdoorregistraban un buen tráfico. Mucho italiano –sorprendente hasta cierto punto teniendo en cuenta que la situación allí no es muy diferente a la nuestra- y, mucho centroeuropeo. Españoles pocos. Los de siempre pero con alguna baja importante. Algunos porque prefirieron no venir; otros porque Spanair no les dejó. Para los 52 expositores españoles eso no supuso ningún problema. Van a Munich para lograr buenos contactos en otros mercados, y pese a la que está cayendo, casi todos se han mostrado convencidos de que este año su visita al salón puede ser mucho más rentable que otros años. Si analizamos las diferencias en función de los pabellones, poco que decir. Lo mismo que cada año desde que ispo apostó –muy acertadamente- por la segmentación. Que haya pabellones más llenos que otros no significa, ni mucho menos, que los resultados de la feria dependan del pabellón en el que se esté ubicado. Pese al invierno cálido que hemos atravesado –hasta finales de enero- los pabellones con más tráfico volvieron a ser los vinculados al outdoor y a la nieve, aunque en este último caso las caras no reflejaban la alegría de otros años (se parecían más a las de 2007 y 2008). En cuanto al universo board, como siempre, un mundo aparte. Mucha gente –muchos jóvenes alemanes- y un ambiente “diferente”. No sé si habrá muchos contactos, pero de lo que sí estoy convencido es que es donde los expositores y los visitantes se lo pasan mejor. Y la cerveza ayuda. Aunque la feria gire descaradamente alrededor de los deportes de nieve y las modalidades outdoor, la presencia de otro ispo 2012: pasar página F E R I A S Llorar por las esquinas no sirve de nada –aunque haya motivos-, y cuando has asumido el varapalo es mucho más fácil levantarse y seguir andando. Y eso es lo que se vio en ispo. El salón, que empezó con los ánimos un poco decaídos, acabó convirtiéndose en una especie de antidepresivo. >>> sigue en la página 29 A pesar de la compleja situación económica y de la mala campaña de invierno, ISPO reunió en Munich a alrededor de 80.000 profesionales 26 TS

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