Aestas alturas todo el mundo sabe perfectamente que uno de los deportes que mejor salud tiene en estos momentos es el running. Seguramente su fuerza sea más contundente en practicantes que en ventas, pero no hace falta ser corredor para ver cómo., día sí y día también, las calles de las grandes ciudades –y de las no tan grandes- se llenan de runners. Por la mañana, por la tarde y, también, por la noche. Y hasta tarde. Podríamos llenar páginas y más páginas hablando sobre los motivos que han propiciado este auge, cómo ha incidido la crisis en el comportamiento de este deporte o como ha transformado el sector, en general, con este nuevo boom del running, pero intentaremos ser breves, en especial porque a estas alturas creo que todo el mundo sabe perfectamente la respuesta a estas cuestiones. Sobre el por qué de su crecimiento, basta con decir que la salud tiene un papel clave. El running es un deporte sin demasiadas exigencias físicas –el limite se lo marca cada uno- y con beneficios tangibles a corto plazo. Además, como muchas otras modalidades deportivas, tiene un efecto antiestresante. ¿La crisis? El mejor aliado del running. La gente está ahorrando, reduciendo sus gastos en según qué actividades de ocio y apostando por pasatiempos más asequibles –y saludables-, como el running, una de las maneras más económicas de mantenerse en forma sin renunciar a hacer deporte. Correr es gratis. Este auge de practicantes propiciado por una creciente preocupación por la salud y, también, por el “desvío” del gasto hacia determinadas actividades deportivas ha conllevado, obviamente, un crecimiento considerable de las ventas. Crecimiento que se ha acentuado especialmente en el pasado 2011 y gracias, sobre todo, a las gamas más técnicas. TERRITORIO ESPECIALISTA Como suele pasar con todos los segmentos que en algún momento experimentan un fuerte crecimiento, uno de los aspectos más significativos de este auge del running ha sido la fuerte especialización que se ha dado tanto en marcas como, sobre todo, en comercio. Como hemos dicho en artículos anteriores las razones de este cambio hay que buscarlas, tanto en la exagerada apuesta que hicieron muchas tiendas por el sportwear, renegando de lo atlético, como, sobre todo, en las mayores exigencias del consumidor, especialmente del deportista habitual, que cada día reclama más oferta y mejor servicio. Especialización no es, necesariamente, volcarse en un solo deporte. Algunas tiendas –bastantes- sí eligieron este deporte como único eje del negocio, pero otras apostaron por él dándole mayor protagonismo que otras modalidades, en espacio y oferta. El resultado es que, a día de hoy, la red de tiendas especializadas en este deporte está más que consolidada, con una larga lista de tiendas de referencia en todo el país, y controla una parte muy importante de las ventas, sobre todo a los deportistas habituales. Estas tiendas, además, se esfuerzan, no sólo en vender y generar tráfico hacia sus comercios, sino, también, en promocionar este deporte, sobre todo apoyando o impulsando carreras populares, En cuanto a las marcas, el camino ha sido el mismo, reforzando paso a paso la especialización. La evolución es vertiginosa y a día de hoy hay una fuerte competencia, tanto en calzado como en textil y complementos. El corredor es cada vez más exigente y puesto que, al fin y al cabo, el running es un deporte muy asequible, está dispuesto a pagar por prestaciones. De ahí El auge de practicantes propiciado por una creciente preocupación por la salud y, también, por el “desvío” del gasto hacia determinadas actividades deportivas, ha dinamizado las ventas del universo running, que en el pasado 2011 se consolidó como una de las modalidades con mejor salud gracias, sobre todo, al crecimiento esperimetado por las gamas más técnicas. ESPECIAL RUNNING TS 28 El running mantiene su buen ritmo
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