modalidades outdoor y al mismo ritmo que aumentaba la cifra de practicantes, crecía el número de tiendas especializadas –y superespecializadas-. Hoy, con una red bastante sólida y con varias aperturas previstas a corto y medio plazo, este tipo de comercios –con el permiso de Decathlon- ya monopolizan un porcentaje muy elevado de las ventas, sobre todo entre los practicantes habituales, que saben perfectamente la importancia de apostar por un buen material y, también, las ventajas que conlleva comprarlo en una tienda donde oferta y servicio son los dos principales valores añadidos. Con un consumidor cada vez más exigente y, sobre todo, cada vez más informado, la especialización es clave para sobrevivir. Obviamente, dado su fuerte potencial, sigue siendo un universo que puede tener cabida en cualquier tienda multideporte que sea capaz de gestionarlo eficazmente. Muchas cadenas lo hacen, y lo hacen bien. Con espacio, con oferta y, sobre todo, con servicio. El outdoor es uno de los segmentos de moda y todo el mundo tiene derecho a aprovecharse de ello. Lógicamente, a estas alturas no será nada fácil captar a un cliente que ya se ha fidelizado con el comercio especialista –sobre todo si se trata de practicantes habituales- pero como hemos explicado antes, con el boom del travel -y también del trail- el comercio multideporte puede dar protagonismo a segmentos emergentes, sobre todo a los más populares, y captar al practicante ocasional o a quienes buscan material outdoor y running para uso urbano. Difícilmente se convertirán en un referente del outdoor técnico, pero si se trabaja bien, cualquier tienda multideporte puede ser un buen socio para las marcas que quieren explotar las colecciones más asequibles o, sobre todo, las líneas claramente urbanas. Líneas que, como hemos dicho, tienen un potencial enorme. De todas maneras, incluso para captar este target, las tiendas tienen que segmentar su oferta. Pueden seguir siendo multideporte, pero están casi obligadas a apostar por la especialización –aunque sea en varias modalidades- y estos segmentos se antojan como una de las apuestas más firmes, sobre todo si ya se trabaja en ello. El futuro, por suerte, es bastante previsible. Los practicantes crecerán en casi todas las modalidades y, sobre todo, en las más accesibles a nivel físico y económico. Senderismo, trekkings ligeros y medios e, incluso, modalidades un poco más exigentes, como barrancos o vías ferratas, ganarán adeptos poco a poco. Las ventas vinculadas a estos deportes, lógicamente, crecerán, y en algunos casos las tiendas multideporte podrán aprovecharse de ello. Con la progresión más que previsible de todas las modalidades vinculadas a los deportes de montaña -como ya hemos dicho, unas crecerán más que otras- la red de tiendas especializadas se consolidará al mismo ritmo que el outdoor ganará protagonismo en el comercio multideporte. Habrá que prestar mucha atención a como evolucione un segmento como el trail-running, probablemente el que, a día de hoy -y con permiso de las líneas más urbanastiene mayor potencial, sobre todo porque el running también sigue creciendo y el “trasvase” de uno a otro –en ambas direcciones, pero sobre todo de asfalto a tierra-, es bastante habitual. Su presencia en el comercio especializado, tanto en outdoor como en running, crece día a día, y también la cobertura que tiene en las tiendas multideporte, que tras su aventura con la moda deportiva, han regresado a lo técnico y quieren apostar sobre seguro. Junto al trail, también habrá que seguir muy de cerca el desarrollo del urban outdoor. Es un subsegmento muy cercano a la moda y, por lo tanto, muy imprevisible, pero a priori su crecimiento debe seguir siendo bueno a corto plazo. TS Aunque la red de tiendas especializadas ya controla una parte muy importante de las ventas, el auge del trail y, sobre todo, el boom del llamado urban outdoor, puede ser una buena alternativa para la tienda multideporte TS 33 El futuro del outdoor, por suerte, es bastante previsible. Los practicantes crecerán en casi todas las modalidades y, sobre todo, en las más accesibles a nivel físico y económico. Senderismo, trekkings ligeros y medios e, incluso, modalidades un poco más exigentes, como barrancos o vías ferratas, ganarán adeptos poco a poco. Y las ventas, lógicamente, seguirán creciendo.
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