poliamida y/o con tejidos que incorporan iones de plata y que aportan a la prenda una gran capacidad antimicrobiana y evitan los malos olores. Últimamente algunas marcas también están “recuperando” la lana por su gran poder aislante y por su capacidad para absorber agua sin que el exterior de la prenda este húmeda. Las marcas apuestan fuerte Obviamente, uno de los motivos que ha propiciado el fuerte crecimiento de este tipo de prendas ha sido la fuerte apuesta que han llevado a cabo las marcas. En su fabricación, en su distribución y, sobre todo, en su comunicación. La demanda, muy buena en los últimos años, ha sido un gran estímulo para que los fabricantes siguieran potenciando y mejorando esta categoría, y aunque es cierto que el precio medio se ha disparado con la irrupción de determinadas marcas ultratécnicas, el deportista habitual es plenamente consciente de las múltiples ventajas que le aportan este tipo de prendas. Sigue habiendo mucha gente que sale a correr o a pasear con camiseta de algodón, pero cada vez hay más consumidores que están supuestos a pagar por prestaciones. Sobre todo si las prendas mejoran el rendimiento y la seguridad durante la práctica… Dicho esto, es obvio que con el boom de este tipo de prendas se ha multiplicado exponencialmente la oferta. Las grandes que no tenían este producto en su mix no han tardado en tenerlo, y las que ya lo tenían, lo han potenciado, especialmente los especialistas. Así, no es extraño que a día de hoy casi todas las marcas de textil vinculadas al universo del outdoor, de los deportes de nieve y de modalidades como el running, cuenten con sus propias colecciones de primeras capas. La lista de marcas es muy larga, desde las líderes generalistas del universo outdoor o esquí, como The North Face, Odlo, Falke, Haglofs, Mammut, Marmot, Salomon, Descente, Spyder, Kjus, Millet, Lafuma, Eider y un largo etcétera –generalmente, insistimos, con una fuerte predominancia de las camisetas técnicas de invierno-, hasta las muchas marcas más especializadas en este subsegmento, como Löffler, Icebreker, Odlo, Craft o Accapi, pasando, obviamente, por las marcas más generalistas, como Nike, adidas o, sobre todo, Under Armour, una de las grandes revoluciones de los últimos años en el segmento de las capas base –de verano y, sobre todo, de invierno- en lo que se refiere a expulsión del sudor y retención del calor. Mención aparte merece la marca suiza XBionic, que al contrario que la mayoría de marcas, basa su funcionalidad en el aprovechamiento eficaz del sudor que expulsa el cuerpo. La marca, en este sentido, apuesta por fomentar la presencia de una fina capa de sudor sobre la piel, para extraerle su máximo beneficio de cara al mayor rendimiento físico posible a través de una serie de canales que transportan el exceso de calor a unas zonas de evaporación, especialmente diseñadas en forma de reservas de sudor para asegurar una sensación de bienestar máxima en las fases de máxima actividad física, en las que templa el cuerpo, y en las fases de deceleración, en las que esa película de exceso de calor a evaporar mantiene una temperatura entorno a 37º. A todas estas marcas hay qua añadir, lógicamente, las grandes especialistas del running, muchas de las cuales han potenciado sus líneas textiles tras el fuerte auge de esta categoría. Colecciones de verano y, también, de invierno. Al corredor ya lo tienen “ganado”, y aunque como hemos dicho no es fácil convencer a determinado target de las cualidades de una camiseta de 30 ó 40 euros, su protagonismo dentro del mix total es cada vez mayor. PRENDAS DE COMPRESIÓN Más allá de las llamadas prendas térmicas o termoreguladoras, otra categoría que ha emergido con mucha fuerza en estos últimos años es la de las prendas de compresión. Es cierto, como hemos insistido antes, que muchas primeras capas térmicas también ofrecen, entre sus características técnicas, la compresión –con todos sus beneficios-, pero en las últimos años han surgido una serie de marcas especializadas sobre todo en prendas que anteponen los beneficios de la compresión a la protección contra el frió o el calor (que también la ofrecen). Este tipo de prendas hace años que son muy populares entre los deportistas profesionales, especialmente los atletas de maratón, los futbolistas, los ciclistas o los jugadores de baloncesto, y poco a poco van ganando adeptos entre los deportistas amateurs, sobre todo los que hacen deporte con bastante regularidad. ¿Qué beneficios aportan estas prendas? Cada marca tiene sus particularidades y sus métodos para maximizar las propiedades de sus líneas, pero a grandes rasgos, lo que se logra es -además de ofrecer libertad de movimiento y, gracias a su buena transpiración, mantener constante la temperatura corporal del deportista-, optimizar el rendimiento deportivo, ya que la presión que ejercen sobre el tejido muscular estimula la circulación sanguínea, aumentando la cantidad de oxígeno que llega a los músculos, lo cual permite combatir con mayor eficacia la fatiga y evitar lesiones. A efectos científicos, la mejora de la circulación sanguínea permite, sobre todo, una mayor eficiencia a la hora de eliminar el lactato de la sangre (cuando Reservadas hasta no hace mucho tiempo a determinadas modalidades outdoor, el boom del running o el bike han abierto mercado a las primeras capas, que se han convertido en una de las categorías con mejor progresión de los últimos años Obviamente, uno de los motivos que ha propiciado el fuerte crecimiento de este tipo de prendas ha sido la fuerte apuesta que han llevado a cabo las marcas. En su fabricación, en su distribución y, sobre todo, en su comunicación. La demanda, muy buena en los últimos años, ha sido un gran estímulo para que los fabricantes siguieran potenciando y mejorando esta categoría TS 69
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx