des, y nosotros, desde el principio, hemos creído que lo importante era priorizar el hombre. Después hemos apostado también por el niño, una categoría que para la marca tiene mucho potencial, y por la mujer. La mujer no es un perfil fácil para la moda deportiva, sobre todo para el textil. Sabe lo que quiere, sabe cuanto está dispuesta a pagar por una marca y, sobre todo, sabe que hay básicos en los que no importa lo más mínimo la marca. Y ponerse a luchar en esta franja es imposible. Además, y eso es más preocupante, la mujer no acaba de entender que una marca deportiva, con la que hace deporte, la pueda encontrar también en tiendas de tendencia. ¿Qué valor añadido aporta la marca a la tienda? Más o menos ya lo he explicado antes, pero a grandes rasgos, nuestro valor añadido es que le ofrecemos a la tienda un producto de calidad, con un buen mark up y un buen margen neto. Además, pondremos todo nuestro empeño en ayudar al cliente a mejorar el sell-out y la imagen de la marca, ofreciéndole un surtido que se ajuste a su demanda, cambiando el producto que no tenga salida, personalizando espacio y buscando, siempre, las mejores alternativas para que la marca le ayude a generar tráfico y negocio. Una de nuestras prioridades como marca es dar a nuestros clientes mecanismos para vender. Ellos “sólo” tienen que escuchar, decidir e implementar. Si tienen ganas de moverse y evolucionar, tendrán nuestro apoyo absoluto. ¿Qué papel juega Iberia en las estrategias de Le Coq Sportif? ¿Es un mercado que “acepta” bien este tipo de colecciones? Somos el tercer mercado de la marca, por detrás de Francia e Italia. Estos tres países, junto a Inglaterra, son los únicos donde se opera con filial, y eso da una idea bastante clara de la confianza que tiene la marca en nuestro mercado. España es un mercado muy diferente al francés o al italiano, con menos grandes cuentas, con una distribución muy diferente y con una situación económica compleja que ha transformado por completo el consumo. Y aunque hemos logrado sobrevivir bastante bien a esta coyuntura, la marca es plenamente consciente de esta situación. En cuanto a Portugal, pese a que allí la situación también es muy compleja, también hemos logrado muy buenos resultados. La distribución es muy selectiva, con pocos clientes pero muy buenos. Hace tiempo que barajan la posibilidad de abrir tiendas propias ¿Es una fórmula que ganará protagonismo en las estrategias de LCS a corto y medio plazo? Es un proyecto que la marca tiene en mente pero que, en ningún caso, es una prioridad. Es cierto que hay un plan internacional para abrir tiendas en todo el mundo, pero no es algo que nos obsesione ni que nos corra prisa. En España abriremos una, máximo dos, en Barcelona y Madrid, y estamos buscando un buen emplazamiento, pero sin prisas. Somos una empresa pequeña que no puede permitirse el lujo de equivocarse, así que hasta que no encontremos un local que se ajuste a nuestros objetivos, no vamos a dar el paso. Como marca históricamente atlética ¿qué tipo de sinergias se establecen entre un pasado performance y un presente casual? No es ningún secreto. Cualquier marca que tenga un histórico detrás tiene capacidad para reinventar muchos productos atléticos y convertirlos en productos casual. Algunos, como adidas, pueden volcarse en las dos divisiones y hacerlo, además, muy bien. Nosotros hemos apostado por centrarnos en lo casual y aprovechar, en la creación de nuestras colecciones, la historia atlética que tenemos detrás. El deporte, el material técnico, es una inspiración, no una meta. ¿Qué objetivos se han marcado para este segundo semestre de 2011 y de cara a 2012? Si todo va bien, este 2011 creceremos alrededor de un 20%, manteniendo las buenas cifras que alcanzamos en 2010. Está siendo un año de cambios, tanto en la estructura, que se ha ampliado, como en las responsabilidades de algunos puestos clave de la empresa. Estamos potenciando nuestros clientes select, hemos ampliado nuestro showroom y presentaremos, de cara a 2012, una colección más amplia y atractiva. Queremos seguir creciendo, pero sabemos que debemos hacerlo con sentido común, sin hacer locuras y sabiendo hasta dónde podemos crecer. “Nuestro valor añadido es que le ofrecemos a la tienda un producto de calidad, con un buen mark up y un buen margen. Además, pondremos todo nuestro empeño en ayudarle a mejorar el sell-out y la imagen de la marca, ofreciéndole un surtido que se ajuste a su demanda y las mejores alternativas para generar tráfico y negocio” ts52
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