ESPECIAL MUJER Y NIÑO REDACCIÓN,Barcelona tiempo estimado de lectura >>> 9 min. Llevamos años diciendo, desde esta revista y, sobre todo en el número dedicado a la mujer y al niño, que estas dos categorías son la gran asignatura pendiente del sector. Hemos insistido una y mil veces sobre el potencial que tienen como target tanto los más pequeños como, especialmente, las mujeres. El problema es que pasan los años y ese potencial se queda en eso, en potencial. En una oportunidad que, pese al esfuerzo de algunas marcas, no se aprovecha. Ni un servidor ni, creo, la revista en la que escribe, pueden tacharse de pesimistas, pero a veces es mejor ser realistas que pecar de un falso optimismo. El sector, pese a la crisis, aguanta y crece. Poco, pero tal y como están las cosas, podemos estar satisfechos. El problema es que sigue dejando pasar algunos trenes a los que ya no podrá subirse si no empieza a correr. Y uno de estos trenes es el de la mujer y el niño. A estas alturas me temo que ya es demasiado tarde. No es imposible, pero sí que será muy difícil atraer este target. Y sinceramente, sin ánimos de ofender a nadie, en la rueda de reconocimiento de presuntos culpables hay mucha más gente que señalaría a las tiendas, que no a las marcas. También es cierto, para ser justos, que las tiendas suelen responder a una demanda real, de manera que si no apuestan por la mujer es porque esa demanda no existe. O, para ser más exactos, no existe más allá de lo atlético. Por suerte, y enlazando con lo último que acabamos de decir, la mujer está ganando mucho protagonismo a nivel de práctica y eso, lógicamente, se traduce en más ventas de material atlético para mujer. Este auge del deporte femenino ha hecho reaccionar a las marcas y casi todas, sobre todo las especialistas, cuentan en sus colecciones con amplias líneas diseñadas específicamente –en prestaciones y en estilo- para las mujeres (en un mercado tan saturado y competitivo puede ser una de las pocas categorías que les puede ayudar a crecer) El problema es que pese a su crecimiento, el volumen de estas ventas sigue siendo ridículo al lado del potencial que podría tener lo atlético y, sobre todo, el sportwear. Nos guste o no, aunque ahora las marcas y las tiendas estén dando respuesta a las necesidades y demandas de la mujer, durante muchos años le ha dado la espalda. Y así, no es extraño que siga, como hasta ahora, más dispuesta a comprar, incluso la moda deportiva, en el canal moda. Además de la mujer, tampoco hemos sabido prestarle atención al Niño. Son dos casos diferentes en muchos aspectos y los motivos que han motivado este pasotismo son muy diferentes, pero tienen un punto donde convergen: quien los compra. Y seguramente una de las razones por las que más de un 95% de las ventas para niño se lleva a cabo en otros canales o en Decathlon sea, precisamente, porque quien compra -la mujer - no siente ningún tipo de afinidad con el canal deporte (salvo, obviamente, para lo técnico). ¿Tenemos que resignarnos a perder estos targets o hay posibilidades de recuperarlos? La respuesta está cada año menos clara, pero si queremos seducir a la mujer lo primero que hay que hacer es entenderla y darle lo que demanda. En niño las cosas son más complejas, sobre todo porque es una categoría que en la vertiente más vinculada a la moda está controlada por las grandes cadenas de moda juvenil y/o infantil y en nuestro canal, en las ventas más relacionadas con el deporte, está descaradamente monopolizada por un solo operador. Y las cosas no parece que vayan a cambiar ni a corto ni a medio plazo. NIÑO: EL PRIMER PRECIO MONOPOLIZA LAS VENTAS Empecemos por el niño. Lo primero que deberíamos decir, además de dejar claro que en esta categoría nos vamos a centrar básicamente en la franja que va desde los recién nacidos hasta los niños de alrededor de 10-12 años –la adolescencia es un mundo aparte-, es que se trata de uno de los targets que, a nivel global, más está apostando por el primer precio. Razones hay miles, pero el hecho de que mucha de esta ropa se utilice “sólo” para ir al cole y que, Debemos aceptar, con resignación, que dando la espalda a la mujer, el deporte ha dejado escapar una gran oportunidad de abrir nuevas vías de negocio. A estas alturas, intentar recuperar a este target tan importante a través de la moda deportiva parace una locura al alcance de muy pocas marcas... y de muy pocas tiendas. La mejor alternativa es centrarse en lo atlético, que afortunadamente está creciendo mucho en los últimos meses. En Niño la batalla con la moda también está perdida... y en deporte hay que luchar contra Decathlon. Mujer y Niño: el material técnico marca el camino El sector, pese a la crisis, aguanta y crece. Poco, pero tal y como están las cosas, podemos estar satisfechos. El problema es que seguimos dejando pasar algunos trenes a los que ya no podremos subirnos si no empezamos a correr. Y uno de estos trenes es el de la Mujer y el Niño. ts32
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