TradeSport 181 - Octubre 2010

presión. Es cierto, como hemos insistido antes, que muchas primeras capas térmicas también ofrecen, entre sus características técnicas, la compresión –con todos sus beneficios-, pero en las últimos años han surgido una serie de marcas especializadas sobre todo en prendas que anteponen los beneficios de la compresión a la protección contra el frío o el calor (que también la ofrecen). Este tipo de prendas hace años que son muy populares entre los deportistas profesionales, especialmente los atletas de maratón, los futbolistas, los ciclistas o los jugadores de baloncesto, y poco a poco van ganando adeptos entre los deportistas amateurs, sobre todo los que hacen deporte con bastante regularidad. ¿Qué beneficios aportan estas prendas? Cada marca tiene sus particularidades y sus métodos para maximizar las propiedades de sus líneas, pero a grandes rasgos, lo que se logra es, además de ofrecer libertad de movimiento y mantener constante la temperatura corporal del deportista (expulsando el sudor), optimizar el rendimiento deportivo, ya que la presión que ejercen sobre el tejido muscular estimula la circulación sanguínea, aumentando la cantidad de oxígeno que llega a los músculos, lo cual permite combatir con mayor eficacia la fatiga y evitar lesiones. A efectos científicos, la mejora de la circulación sanguínea permite una mayor eficiencia a la hora de eliminar el lactato de la sangre (cuando la concentración de lactato en sangre supera la cantidad que somos capaces de asimilar o metabolizar, se produce una situación tóxica para las células musculares que provoca una disminución en la producción de energía, provocando que no seamos capaces de mantener la intensidad del ejercicio que estábamos realizando). Además, esta mejora de la circulación ayuda a reducir los dolores y la hinchazón muscular. El dolor y el estrés es menor porque se reducen los microtraumas musculares que surgen durante el ejercicio. Estudios científicos han demostrado, también, que calentar con prendas de compresión aumenta la temperatura corporal, lo que acelera el calentamiento, y facilita los movimientos de flexión y extensión. En cuanto a las marcas, como en las primeras capas térmicas, la competencia es cada vez mayor, aunque es cierto que hay distintos niveles de tecnicidad. En deportes donde este tipo de prendas son habituales, como el running, el fútbol o el ciclismo, casi todas las grandes marcas generalistas, como Nike o adidas, han desarrollado sus propias líneas de compresión, con colecciones para fútbol y running o especializadas. En otro plano encontramos marcas como X-Bionic o Under Armour, dos de las enseñas que más terreno han ganado en este campo y en el de las prendas térmicas –muchas de sus líneas unen ambos universos-, o Accapi. Obviamente, a esta lista tenemos que sumar las marcas especialistas en running con colecciones textiles, algunas marcas del mundo del fútbol y casi todas las que tocan el textil ciclismo. A otro nivel encontramos las marcas especializadas básicamente en textil de compresión, con Skins, 2XU o Zoot como principales estandartes. Son prendas perfectas para deportes como el running, al triatlón, el ciclismo o el fitneess. El nivel de compresión es más técnico y sus ventajas mayores. En algunas la compresión es gradual y en otras lineal, pero el objetivo en todas es favorecer el riego sanguíneo para maximizar, con ello, el rendimiento. Estas prendas, como hemos dicho, también aportan los beneficios de cualquier prenda térmica o primara capa base: control de la humedad, control de la temperatura en condiciones de frío y calor, propiedades antibacterianas y, en algunos casos, protección frente a los rayos ultravioletas. Lo importante, tanto en este tipo de prendas como en las térmicas, es saber elegir muy bien el tipo de prenda que necesitaremos. Las prendas sirven para muchos deportes, pero los fabricantes cada día mejoran más su oferta y poco a poco van desarrollando líneas específicas para determinados deportes –en función de los movimientos más habituales y de las zonas en las que es preferible comprimir o proteger más-. La compresión correcta aporta infinitos beneficios; la excesiva compresión puede ser perjudicial. Una buena apuesta para la tienda El boom de las llamadas capas base, térmicas, técnicas o compresivas representa, sin duda, una buena oportunidad para el comercio por la buena demanda que tienen. Ahora bien, es importante tener en cuenta que la mayoría de estás prendas, especialmente las más técnicas, tienen un precio medio bastante alto y requieren un cierto apoyo en la venta. No es una venta de impulso, y el comercio tiene que conocer muy bien el producto para poder dar respuesta al cliente. Eso implica una cierta especialización y formación -algo que las marcas están trabajando muy bien-, de manera que no es extraño que los principales “prescriptores” y vendedores de este tipo de productos sean las tiendas especializadas. Conocen bien el producto y lo saben vender. Su público, además, está mucho más “abierto” a este tipo de prendas (generalmente caras), diseñadas, sobre todo, para todos aquellos deportistas –habituales- que quieran dar un plus a su entrenamiento. A la hora de comprar una capa base es muy importante saber elegir muy bien el tipo de prenda que necesitaremos. La mayoría de prendas sirven para muchos deportes, pero los fabricantes cada día mejoran más su oferta y poco a poco van desarrollando líneas específicas para determinados deportes –en función de los movimientos más habituales y de las zonas en las que es preferible comprimir o proteger más-. El boom de las capas base, en todas sus catagorías, representa una buena oportunidad para el comercio por la buena demanda que tienen. Ahora bien, es importante tener en cuenta que la mayoría de estas prendas, especialmente las más técnicas, tienen un precio medio bastante alto y requieren un cierto apoyo en la venta. ts72

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