ts71 mo suda para bajar la temperatura muscular. El problema es que ese sudor queda atrapado en la ropa, y cuando paramos nuestros músculos dejan de generar calor, pero la humedad de nuestro sudor que está en la ropa nos sigue enfriando. El gran “secreto” de estas prendas, al fin y al cabo, es que están confeccionadas con tejidos que no absorben la humedad, sino que la transportan fuera para que se evapore, manteniendo el cuerpo seco en todo momento. A partir de aquí, las posibilidades son infinitas; en marcas, en modelos, en tipologías de producto –manga corta, larga, sin mangas, piratas, shorts, con o sin cremalleras …-, y también en espesor (con mayor o menor capacidad aislante –sacrificando tranpiración-) . Este tipo de prendas, insistimos, son de vital importancia tanto en inverno como, sobre todo, en verano, pues en muchas actividades, sobre todo en un entorno como el que disfrutamos en España, será la única capa que llevaremos. Las prendas de invierno están diseñadas para protegernos del frío exterior, del viento y las corrientes de aire que desplazan el aire caliente que está a nuestro alrededor, y de la humedad que es muy importante, porque el agua transmite el calor 25 veces (más o menos) mas rápido que el aire. Las de verano, básicamente tienen como principal finalidad exportar el sudor al exterior y, en algunos casos, aprovechar este sudor para mantener el cuerpo fresco. En una prenda de estas características debemos evitar el algodón –que se empapan con facilidad, acelerando la pérdida de calor-. Por eso la mayoría de marcas, en este sentido, apuestan por el poliéster, un tejido extremadamente transpirable e hipoalergénico. Algunos fabricantes suelen combinarlo con el elastano –sobre todo en prendas ajustadas o de compresión-y con tejidos que incorporan iones de plata y que aportan a la prenda una capacidad antimicrobiana y evitan los malos olores. Últimamente algunas marcas también están “recuperando” la lana por su gran poder aislante y por su capacidad para absorber agua sin que el exterior de la prenda este húmeda. La lana es con diferencia el mejor tejido para prendas de abrigo: es natural, absorbe muy bien la humedad y sus fibras no se colapsan, manteniendo una cierta capacidad de abrigo. Además, secan relativamente rápido si el tejido es fino y no huelen. Hasta hace poco era muy difícil hacer tejidos finos con lana que no picaran, lo que sumado a la brutal campaña comercial de los fabricantes de tejidos sintéticos había relegado estas prendas a la extinción, pero desde hace unos años el panorama comercial ha cambiado y una nueva generación de fabricantes ha empezado a comercializar prendas de lana finas (merino, sobre todo) con una gran funcionalidad. Las marcas apuestan fuerte Como hemos dicho antes, cuando un producto gana peso en el segmento, ya sea por moda o porque por sus características técnicas se ha popularizado, lo normal es que en poco tiempo aparezcan infinidad de marcas que apuesten por él. Las primeras capas no son, lógicamente, una excepción. Casi todas las marcas de textil vinculadas al universo del outdoor, de los deportes de nieve, del bike o del running cuentan con sus propias colecciones de primeras capas. En algunos casos, como el esquí o las colecciones invernales de outdoor, se trata de prendas interiores, puesto que en las condiciones de frío en las que se practican estos deportes es necesario utilizar segundas y/o terceras capas. La lista de marcas que tienen colecciones de primeras capas técnicas es muy larga, desde las líderes generalistas del universo outdoor/esquí, como The North Face, Odlo, Falke, Haglofs, Mammut, Marmot, Salomon, Descente, Spyder, Kjus, Bonfire, Mollet, Lafuma, Eider y un largo etcétera –generalmente, insistimos, con una fuerte predominancia de las camisetas técnicas no compresivas-, hasta las muchas marcas especializadas en este subsegmento, como Löffler, Icebreker, Accapi o Golite. Pasando, obviamente, por las marcas más generalistas, como Nike, adidas o, sobre todo, Under Armour, una de las grandes revoluciones de los últimos años en el segmento de las capas base –de verano y, sobre todo, de invierno- en lo que se refiere a expulsión del sudor y retención del calor. Mención aparte merece la marca suiza X-Bionic, una de los grandes referentes mundiales de capas base, que al contrario que la mayoría de marcas, basa su funcionalidad en el aprovechamiento eficaz del sudor que expulsa el cuerpo. Dada la gran importancia de la transpiración en la fase de enfriamiento del cuerpo, X-BIONIC se desmarca claramente de otros fabricantes que apuestan por mantener la piel seca durante el ejercicio e interioriza la evidencia de que la sudoración es el proceso natural del cuerpo para regular su temperatura. La marca, en este sentido, apuesta por fomentar la presencia de una fina capa de sudor sobre la piel, para extraerle su máximo beneficio de cara al mayor rendimiento físico posible a través de una serie de canales que transportan el exceso de calor a unas zonas de evaporación, especialmente diseñadas en forma de reservas de sudor, las cuales dejan espacios en forma de panel entre el tejido y la piel. El efecto es asegurar una sensación de bienestar máxima en las fases de máxima actividad física, en las que templa el cuerpo, y en las fases de deceleración, en las que esa película de exceso de calor a evaporar mantiene una temperatura entorno a 37 grados. Estas tecnologías están ubicadas en partes del cuerpo especialmente insensibles a los cambios bruscos de temperatura. Aunque parezca contradictorio, es el propio mecanismo de sudoración lo que le hace mantenerse seco y con una agradable sensación de bienestar en cualquier situación, independientemente de la temperatura ambiente y del grado de humedad ambiental. PRENDAS DE COMPRESIÓN Más allá de las llamadas prendas térmicas o termorreguladoras, otra categoría que ha emergido con mucha fuerza es la de las prendas de comEste tipo de prendas son de vital importancia tanto en inverno como en verano. Las de invierno están diseñadas para protegernos del frío exterior, del viento y las corrientes de aire que desplazan el aire caliente que está a nuestro alrededor, y de la humedad; las de verano, básicamente tienen como principal finalidad exportar el sudor al exterior y, en algunos casos, aprovechar este sudor para mantener el cuerpo fresco. La mayoría de fabricantes apuestan por tejidos sintéticos como el poliéster, el nylon, la lycra o el elastano, pero en los últimos años varios fabricantes están recuperando la lana por su gran capacidad para absorber agua sin que el exterior de la prenda esté húmedo
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