ts19 ron a Valencia para asistir al que sin duda tenía que ser –y lo fue- el plato fuerte del día: las jornadas técnicas. Las salas se llenaron en todas las charlas, en las que los asistentes pudieron conocer, desde algunas claves para innovar en el punto de venta e ilusionar al consumidor, hasta los pasos que pueden seguirse para mejorar la eficiencia del aprovisionamiento del canal retail o cómo dinamizar las ventas online. También tuvieron un gran seguimiento las dos mesas redondas (Outdoor y Running) que se llevaron a cabo en el seno de estas Jornadas técnicas y que pusieron sobre la mesa las problemáticas, las oportunidades y las fronteras de estas dos modalidades en auge. BASES SÓLIDAS En su segunda edición, Sports Unlimited se ha consolidado. Los organizadores ya se han comprometido a celebrar una tercera edición –de la que ya hay fechas- y si las cosas siguen su camino natural, lo más lógico es que en su tercer año este punto de encuentro se consolide definitivamente y se consagre como un encuentro imprescindible para todo el sector. La presencia de algunos máximos responsables de grandes marcas en Valencia, visitando el formato, hace presagiar que la lista del año que viene tendrá algunos nombres de peso que pueden actuar como revulsivo-reclamo, sumándose a las marcas líderes que este año estaban en el encuentro como expositoras y que ya han confirmado su asistencia el año que viene. De todas formas tiene que quedar claro que en el modelo que plantea SUV la cantidad no es una prioridad. Ni de expositores ni de visitantes. Lo que prevalece es la calidad. En este sentido, es lógico que para los expositores lo más importante sea lograr reuniones con los principales compradores del país, mientras que para éstos, es fundamental que en Valencia haya marcas lo suficientemente interesantes como para acudir al encuentro. Es como un pez que se muerde la cola: unos no van si las reuniones no son interesantes, y los otros no acuden si la oferta tampoco lo es. Y seguramente unos y otros se equivocan, porque no sólo se puede esperar algo de los grandes. Al contrario, muchas veces son los pequeños los que dan vida. La realidad, sin embargo, es que la única queja que han tenido algunos expositores en esta edición, más allá del plantón –muchas veces justificado- que les han dado algunas visitas, ha sido la ausencia de algunos de los grandes compradores del sector. De todas maneras, para ser justos, también hay que reconocer que algunos de quienes antes de comenzar el encuentro mostraron su disconformidad con la calidad de los compradores, han acabado muy satisfechos de su presencia en Valencia e, incluso, han confirmado su asistencia el año que viene. Supongo que, al final, como hemos dicho, el modelo es válido para cualquier tipo de comprador. No sólo los grandes nos dan de comer. Otra asignatura pendiente, a mi entender, es la distribución de las jornadas técnicas. En esta edición han cambiado algunas cosas, pero creo que concentrarlas todas el último día, cuando el encuentro está abierto al público, es un error. Quienes acuden este día, en su mayoría, acaban yendo a las Jornadas Técnicas, que acaban haciendo la “competencia” a los expositores. Es obvio, sobre todo teniendo en cuenta la alta participación que tienen, que estas Jornadas técnicas son imprescindibles en un encuentro como SUV, pero seguramente sería preferible distribuirlas de otra manera. Quizás una fórmula interesante sería llevar a cabo estas charlas por la tarde, una vez finalizado el salón. La ponencia magistral de este año, a cargo de Carlos García Pons, tuvo lugar precisamente al terminar la primera jornada y la asistencia fue muy buena. Quizás, si se encuentra una manera de gestionar la asistencia de los compradores no invitados, es una fórmula a tener en cuenta. Salvo estos dos detalles, la verdad es que pocas cosas se les pueden objetar a los organizadores. El modelo ha demostrado su eficacia y, sobre todo, su viabilidad. La organización, un año más, ha sido excelente. Los expositores, sin excepción, han coincidido en señalar lo bien cuidados que estaban todos los detalles, desde el timming de las reuniones hasta el catering. El ambiente fue muy bueno durante los tres días del salón y, también, en la fiesta que tuvo lugar el segundo día y en la que se llevó a cabo la entrega de los premios SU+. Las cosas no han sido fáciles en estas dos primeras ediciones, pero poco a poco el modelo se consagra. Ha costado, pero la gente empieza a entender a qué se va a Valencia y cuál es la finalidad de este innovador modelo. El sector tiene que adaptarse a los cambios y hoy por hoy las ferias de producto están desfasadas. Es cierto, para ser justos, que a la organización todavía le queda mucha labor pedagógica para explicar bien las características y las ventajas de este modelo. Quizás habrá que ceder un poco, como quedó claro desde la primera edición, y dejar que el producto tenga protagonismo en este Club de Negocios –aunque para algunos, como ha quedado claro este año, no es una prioridad, pero estoy convencido de que quienes este año o el anterior acudieron a Valencia saben perfectamente que el modelo es viable. Seguramente no encaja en las estrategias de todo el mundo, pero poco a poco se van sentando las bases para que Sports Unlimited se convierta en el gran punto de encuentro del sector. Sports Unlimited Valencia aporta algo nuevo al sector. Algo que lleva años necesitando –y reclamando-, y aunque los inicios no están siendo fáciles –por la coyuntura y por los reparos de un sector poco receptivo a los cambios- en esta segunda edición ha quedado claro que necesitamos un punto de encuentro donde se haga algo más que repartir tarjetas. Las cosas no han sido fáciles en estas dos primeras ediciones, pero poco a poco el modelo se consagra. Ha costado, pero la gente empieza a entender a qué se va a Valencia y cual es la finalidad de este innovador modelo. El sector tiene que adaptarse a los cambios y hoy por hoy las ferias de producto están desfasadas.
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