ts59 siones se han realizado con la ayuda de las administraciones –locales, regionales y centrales-, un apoyo que viene a constatar la importancia económica del esquí más allá del deporte, sobre todo en un país, como España, donde el turismo es una de las fuentes de ingresos más importantes. Sin embargo, y pese a que la mayoría de estas estaciones no tienen nada que envidiar a otras estaciones europeas, el esquí sigue siendo un deporte caro a los ojos de muchos españoles. Además, no es precisamente una modalidad “fácil” y requiere algún tiempo de aprendizaje que algunos no están dispuestos a perder –ni a pagar-. Quizás la decisión del gobierno catalán de adelantar el inicio del curso escolar y establecer una semana de vacaciones en febrero, como hacen algunos países de Europa –y que otras autonomías se están planteando copiar- pueda ayudar, si los colegios se implican, a fomentar el esquí entre los escolares. Las estaciones de esquí y el sector sacarían mucho partido a ello, porque más allá de las ventas, serviría para ganar practicantes. Y las cifras que mueve esta llamada “semana blanca” hay que tenerlas muy en cuenta: En Francia, por ejemplo, puede llegar a representar entorno al 50% y el 60% de la facturación de toda la temporada para las estaciones. Casi nada. También puede que el auge de algunas modalidad como el snowboard o el freeride logre atraer a algunos jóvenes y que, con ello, se dé un ligero crecimiento del segmento, pero la realidad, a día de hoy, es que el margen de recorrido del esquí, en practicantes y en ventas, es bastante limitado. De momento el reto es recuperar el nivel que teníamos hace 4 ó 5 años… ESTACIONES: BALANCE TEMPORADA 08/09 E INVERSIONES 09/10 Cuando el 17 de mayo cerraba sus puertas la última estación operativa -Sierra Nevada-, desde Atudem se apresuraron a calificar la temporada como “histórica'. Más de seis meses de apertura continuada en las Estaciones españolas, un incremento del 27,5% en el número de visitantes respecto a la temporada anterior –un logro no muy complicado teniendo en cuenta cómo había idoy 7.411.275 visitantes, el mejor balance en las últimas décadas. El número de jornadas de esquí aumentó casi en un 32 %, situándose en 6.374.544 (frente a 4.834.029 de la anterior temporada), y las jornadas turísticas supusieron 1.036.731 (respecto a 997.281 de la pasada). La temporada comenzó pronto, y ya en el Puente de la Constitución (6 al 8 de diciembre) se encontraban abiertas para la práctica del esquí todas las Estaciones españolas, tanto de Esquí Alpino como de Esquí de Fondo, con espesores que superaban entonces los dos metros de espesor. Por los datos se puede confirmar que las Estaciones mayores crecieron en torno a un 8% y 10% y las menores triplicaron el número de visitantes. Pese a las malas temporadas de 2006 y 2007, el sector ha vivido un incremento continuado de visitantes en los últimos 10 años, pasando de los 5,2 millones de la temporada 99-00 hasta los 7,4 de ésta. En estos 10 años el sector ha realizado una gran inversión en la mejora y actualización de las Estaciones de esquí que ronda los 700 millones de euros, lo que ha posicionado a España como un país competitivo en el sector de la nieve al mismo nivel que otros países europeos, no en practicantes, pero sí en infraestructuras y en servicios. Para esta temporada, las 33 Estaciones de Esquí agrupadas en Atudem han realizado una inversión 54.291.895 euros, lo que supone más de un 8% con respecto al año anterior. A pesar de la actual coyuntura económica, las Estaciones de Esquí han mantenido las inversiones de temporadas anteriores, modernizando los remontes y mejorando los accesos a las pistas, incrementando el número de cañones, abriendo nuevos circuitos, ganando áreas y kilómetros esquiables y optimizando los servicios. Las Estaciones de Aragón y Cataluña han invertido 21.396.000 y 19.056.582 euros, respectivamente; las Estaciones de la Cordillera Cantábrica han destinado a inversión 6.167.313 euros; las Estaciones del Sistema Penibético, 5.284.000 euros y las Estaciones del Sistema Central, 2.388.000 euros. Las inversiones y la constante actualización de las Estaciones han permitido un destacado salto cualitativo en la oferta de las pistas españolas que se ha visto respaldado por un incremento del número de visitantes, en su mayoría turistas de proximidad. Y seguramente éste es el gran cambio experimentado por el segmento en los últimos años. Ante las dificultades por ganar esquiadores españoles, las estaciones se han esforzado en captar turistas extranjeros, y de ahí su crecimiento. Obviamente también se quiere conseguir que los esquiadores españoles no tengan que irse a otros países (especialmente a Francia) para encontrar buenas estaciones, pero la prioridad es que los practicantes de otros países con mucha más tradición contemplen la posibilidad de visitar las pistas españolas. Pistas que pueden, perfectamente, competir en calidad con las estaciones más consolidadas del panorama europeo. MADURO, PERO CONSISTENTE Es cierto, como hemos dicho, que el esquí es un sector muy maduro. De la misma manera que hay modalidades cuyo techo aún queda lejos, la realidad es que el margen de crecimiento del esquí es muy limitado. Esta situación comporta que estemos ante uno de los segmentos más estables del sector, con altibajos en ventas que son, casi siempre, proporcionales a la nieve y al frío que haya esa temporada. Es, también, un deporte con mucha especialización a nivel de tienda, y tampoco es muy probable que a corto y medio plazo Gracias al frío y a la nieve, el esquí ha logrado despertar después de algunos años de letargo. Seguramente había tocado fondo hace un par de años, y lo previsible era que poco a poco se recuperase, pero no todo el mundo hubiera apostado a que esta temporada las cosas irían tan bien. Depender de las condiciones meteorológicas -además de las económicas- es un handicap importante, pero cuando el viento sopla a favor, los beneficios pueden ser muy importantes. Para todos.
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx