ts27 cambien muchos en cuanto a practicantes. Quizás su progresión sea mucho más lenta, sobre todo si deportes como el running o el bike siguen ganando protagonismo, pero seguirá creciendo. Los gimnasios seguirán contando con un público fiel y con altibajos en función de la época. Así ha sido... y así seguirá siendo. Afortunadamente –y la crisis así lo ha demostrado- el deporte aporta infinitos beneficios a quienes lo practican, tanto a nivel físico como mental, y cada vez hay más gente que es consciente de ello. Estamos sumidos en una sociedad que enaltece la imagen y en la que el bienestar cada vez tiene más importancia, así que no parece extraño que todas las modalidades vinculadas directa o indirectamente al wellness –estén o no relacionadas directamente con el deporte- sigan experimentado un comportamiento positivo. Son modalidades que generalmente son fáciles de practicar, que están al alcance de todo el mundo y, sobre todo, que no están sujetos a horarios, especialmente desde que los gimnasios han entendido que la vida no acaba a las ocho de la tarde sino que es precisamente después de esta hora cuando la gente puede empezar a disfrutar de su tiempo libre. BOOM DE PRACTICANTES… Y CAÍDA DE LAS VENTAS Con todo lo que acabamos de decir, lo lógico es que el segmento también hubiera experimentado un fuerte crecimiento de las ventas de los artículos vinculados al universo del fitness. Nada más lejos de la realidad: el fitness es, desde hace años, el mejor ejemplo para demostrar que no siempre el crecimiento en practicantes implica un crecimiento de las ventas. Si tuviésemos que enumerar alguno de los motivos que han provocado este desfase, seguramente al primero que tendríamos que recurrir es a la ya mencionada complejidad del término fitness en sí mismo y los cambios que ha experimentado su definición. En el año 2010, ¿qué es textil fitness? ¿Qué és calzado fitness? La gente que va a correr al gimnasio utiliza calzado running –o así debería ser- y eso, lógicamente, “contabiliza” en el segmento running. Pasa lo mismo con alguna otra categoría, como el spinning, aunque en menor medida. Y lo que es peor, sigue habiendo un número muy elevado de quienes acuden al gimnasio que lo hacen con material inapropiado, sobre todo en textil. Para muchos, una camiseta de algodón y unas zapatillas casual bastan para hacer un par de kilómetros en la cinta, levantar cuatro pesas y remar 5 minutos. Y esto, que sucede en casi todos los deportes, incluso en algunos que, como el running, es fundamental llevar un calzado adecuado, es otro de los grandes handicaps del fitness. Si todo el mundo que acude al gimnasio llevase material adecuado, apenas nos preocuparíamos de qué segmento sale ganando, porque los beneficios económicos para el sector serían considerables, pero cuando uno va al gimnasio y ve que hay quien se sube a la cinta con unas zapatillas de Zara, entiende bastante bien por qué el fitness ha caído como ha caído. Por no hablar del textil… Camisetas de algodón goteando a los 5 minutos de empezar la clase de spinning. Puede que esta tendencia esté cambiando en los últimos años gracias, sobre todo, al trabajo de las marcas especialistas, que se han adaptado a los gustos y necesidades de los practicantes, pero el volumen de ventas que el sector pierde cada año es espectacular (volumen que, por cierto, ganan Inditex y compañía). Parece obvio, en este sentido, que una de las prioridades del segmento es convencer al consumidor de que deje de ir al gimnasio con camisetas de algodón y calzado casual que al día siguiente se ponen para ir a trabajar. Es algo en lo que deben trabajar conjuntamente tiendas, marcas y, también, gimnasios, cuyo poder de prescripción es cada día mayor, como se ha demostrado en determinados artículos. Las sinergias son infinitas y pueden ser muy provechosas para todas las partes. Otro de los grandes culpables de este desequilibrio entre practicantes y ventas ha sido la moda. En su día, el material fitness, sobre todo el calzado, creció de manera considerable –seguramente exagerada- porque así lo quiso la moda. Las calles se llenaron de modelos diseñados en principio para el gimnasio, especialmente de adidas, Reebok y Nike. Pero la moda es moda, y de un día para otro, ese look desapareció y el fitness volvió a su realidad. Quedan algunos coletazos, pero la calle ya no acepta este look. Puede que mañana la cosa vuelva a cambiar, sobre todo si las marcas siguen esforzándose en que sus colecciones para gimnasio encajen, también, en la calle y la gente vuelva a vestir el día a día siguiendo las tendencias que marca el fitness. Para el sector sería importante, aunque puestos a elegir, seguramente preferiríamos que todos los que van al gimnasio lo hicieran vestidos como hay que vestir. Si nos centramos en las ventas de textil que ha experimentado el segmento en este pasado 2009, y tomando como referencia las colecciones destinadas a la práctica de aeróbic –probablemente la modalidad que más encaja en la que sería, para muchos, la definición de deporte fitness- veremos que un años más, éstas han vuelto a retroceder ligeramente. Para darse cuenta del insignificante peso que tiene el textil técnico basta con plantarse en una sala de cualquier gimnasio y ver cuánta gente utiliza camisetas o pantalones de deporte. Puede que, como señalan desde algunas marcas, el porcentaje de gente que acude al gimnasio con material adecuado para la práctica haya subido ligeramente, pero la realidad es que las cifras siguen siendo bastante irrisorias. Y no precisamente por culpa de la crisis. Ni porque las marcas no hayan hecho un esfuerzo para ganar cuota. Simplemente la gente sigue pensando que puede Afortunadamente el deporte aporta infinitos beneficios a quienes lo practican, tanto a nivel físico como mental, y cada vez hay más gente que es consciente de ello. Estamos inmersos en una sociedad que enaltece la imagen y en la que el bienestar cada vez tiene más importancia, así que no parece extraño que todas las modalidades vinculadas directa o indirectamente al fitness –estén o no relacionadas directamente con el deporte- sigan experimentado un comportamiento positivo. Modalidades como el Pilates se han puesto de moda
RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx