TradeSport 173 - Enero 2010

¿Qué balance hace de este ejercicio 2009? Pese a la gran incertidumbre que ha habido, este 2009 ha sido un año bastante positivo para nosotros. Hemos hecho importantes inversiones, sobre todo a nivel de diseño y de comunicación, y nos hemos esforzado mucho en intentar abrir nuevas vías de negocio en un mercado tan complejo. Hemos intentado ser lo más activos posibles y pese a la coyuntura, hemos logrado cerrar el año con un crecimiento del 4% en unidades vendidas y del 5% en facturación. ¿En qué momento cree que se encuentra el segmento outdoor a nivel global? Es un segmento que está atravesando un buen momento y ha sido uno de los que mejor ha esquivado la crisis. Las perspectivas, además, son muy buenas, y tanto en España como a nivel internacional, el margen de recorrido es todavía muy amplio. De todas maneras, creo que es un mercado que va excesivamente rápido y haría falta que se ralentizará un poco. Todo avanza a un ritmo muy rápido y las marcas están constantemente lanzando novedades, sin dar apenas tiempo a las tiendas y a los consumidores a asimilarlas. El segmento avanza más rápido que las necesidades reales del mercado y eso, a la larga, puede acarrear muchos problemas al segmento. Tenemos que saber aprovechar el buen momento que vive el outdoor sin querer correr demasiado. Hay que avanzar en función de lo que la gente necesite y no confundir a detallistas y consumidores con demasiadas categorías y sacando al mercado tecnologías que no aportan nada sólo por cuestiones de marketing. Calzados Fal es una empresa familiar con una larga trayectoria en el sector. ¿Qué ventajas tiene una empresa familiar? La principal ventaja es que tenemos la empresa que queremos. Tomamos las decisiones rápido y nos implicamos muchos en el proyecto porque dependemos de ello. Cuando uno se juega el futuro, gestiona mucho mejor sus recursos. Quizás no tenemos la fuerza financiera que tienen marcas propiedad de grandes grupos de inversión, pero somos mucho más ágiles y podemos ser mucho más cercanos al detallista, que sabe valorar en su justa mediada el hecho que detrás de la marca hay gente que siente y padece la empresa. ¿Cómo definiría a Chiruca? Somos una marca de calidad, confianza y garantía… y sabemos muy bien que un cliente satisfecho con la calidad de nuestras botas es un cliente fiel. Tenemos muy claro que nuestro ADN no es la alta montaña y no queremos ser una marca ultratecnológica. Somos una marca de familia. Fabricamos calzado de calidad para gente que quiere disfrutar de la naturaleza o que, simplemente busca un calzado funcional y atractivo para el día a día. El deportista habitual también puede encontrar modelos que responderán perfectamente a sus demandas, pero no es nuestro principal target. Somos una marca muy querida, tanto por los detallistas como por los consumidores, y eso, a la larga, es lo que importa, porque significa que hemos hecho las cosas bien. Ustedes son de las pocas marcas que siguen fabricando en España. ¿Por qué siguen apostando por este modelo? Sabemos perfectamente que vamos a contracorriente. Lo fácil sería irnos a fabricar a China o a Europa del Este, como hace todo el mundo, pero nosotros creemos en un modelo de negocio y queremos ser fieles a nuestras ideas. En esta vida hay cosas mucho más importantes que ahorrar costes, y detrás de Calzados Fal hay mucha historia y, también, muchas familias. Hasta la fecha, el hecho de producir en España nos ha aportado muchas más ventajas que inconvenientes y, en este sentido, parece lógico que sigamos apostando por ello. Es parte de nuestra identidad. ¿Qué ventajas aporta esta “proximidad”? Salvo el coste de la mano de obra, que lógicamente es más caro aquí que en otros países, el hecho de fabricar la práctica totalidad de nuestro calzado en Arnedo nos da una serie de ventajas competitivas muy importantes. Tenemos una flexibilidad a nivel de servicio, de respuesta, de capacidad de producción y de compartir riesgos que ninguna marca del segmento tiene. Hay que tener en cuenta que casi el 50% de nuestras ventas son reposiciones y eso, sin nuestra capacidad de producción, sería imposible. En 24 horas podemos llevar a cualquier ts26 Con más de 40 años de historia -44, para ser exactos-, Calzados Fal, propietaria de la marca Chiruca, es una de las pocas empresas nacionales del sector que mantiene la mayoría de su fabricación en nuestro país. Bajo la dirección de los hermanos Abad (Manuel y Carlos), Calzados Fal ha conseguido convertir a Chiruca en el líder nacional del calzado outdoor (deporte y caza), con más de 300.000 pares vendidos al año. Lo han conseguido, además, con una estratégica muy clara: “premiando, antes que nada, la calidad y el servicio, con mucho sentido común y sabiendo muy bien quienes somos y a donde queremos llegar”. Eso, y un equipo humano implicado 100% en el proyecto y que sabe valorar perfectamente el esfuerzo que hace la empresa por seguir fabricando en nuestro país. Tradesport ha hablado con Manuel Abad sobre el pasado, el presente y el futuro de Calzados Fal y de Chiruca. “Chiruca es una marca de calidad, confianza y garantía” [ENTREVISTA A MANUEL ABAD, GERENTE DE CALZADOS FAL] “Sabemos perfectamente que vamos a contracorriente. Lo fácil sería irnos a fabricar a China o a Europa del Este, como hace todo el mundo, pero nosotros creemos en un modelo de negocio y en las ventajas que nos aporta, y queremos ser fieles a nuestras ideas”

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