TradeSport 171 - Noviembre 2009

ESPECIAL OUTDOOR REDACCIÓN,Barcelona tiempo estimado de lectura >>> 9 min. La situación actual del sector de artículos deportivos es un tanto compleja. La coyuntura económica ha provocado una caída en picado del consumo y eso, unido a los males que ya arrastraba el sector antes de entrar en este bache, ha sumido a muchos proveedores y detallistas en una situación, cuando menos compleja. El sportwear parece haber perdido toda la fuerza que tenía hace apenas 2 ó 3 años. Ha sido, seguramente, el gran damnificado del cambio de ciclo económico y del consecuente cambio en los hábitos de consumo. La ropa es una de las primeras categorías donde el ahorro se deja notar y para muchos comercios, el sportwear era el pilar básico de su negocio. Es obvio, visto lo visto, que muchas tiendas de deporte se equivocaron con su estrategia de focalizar su negocio en el sportwear. Seguramente algunos pensarán que es muy fácil decirlo ahora, cuando el toro ya nos ha pillado, pero desde esta revista –y tienen la hemeroteca a su disposiciónya advertíamos hace tiempo que esta apuesta a ciegas por la moda deportiva podía ser comprometida. Con o sin crisis. Renunciar a los orígenes siempre es peligroso. El tiempo, en este sentido, ha demostrado que lo atlético no estaba tan “acabado” como muchos vaticinaban. Las práctica deportiva sigue siendo irrisoria y no hay visos de que ello vaya a cambiar mucho, pero sí es cierto que el practicante es cada vez más exigente con el material que utiliza para hacer deporte y mucho menos reacio a pagar por la tecnicidad. Eso, a grandes rasgos, significa que pese a que el público potencial no ha aumentado en número, sí lo ha hecho en gasto, y eso, para el sector, es muy importante. Además, tampoco debemos olvidar que hay determinadas submodalidades que se han puesto muy de moda y que han sido claves en la dinamización de los segmentos a los que pertenecen. Si entre todos tuviéramos que hacer una lista de los segmentos atléticos que atraviesan un mejor momento, es probable que nos pusiéramos de acuerdo muy rápido. La mayoría de modalidades, con alguna excepción, tienen un comportamiento bastante regular, con algunos ligeros altibajos, pero manteniendo volúmenes de ventas bastante constantes. Segmentos como el fútbol o el tenis por poner dos ejemplos, se mantienen muy estables en los últimos años, con un comportamiento directamente proporcional a la cifra de practicantes. Otros, como el fitness, viven momentos dulces en cuanto a público, pero siguen sumando pérdidas en ventas. Y otros, como el running o algunas modalidades outdoor –las más populares- ganan adeptos día tras día y han disparado su protagonismo dentro del sector, tanto en ventas como en presencia en la tienda y especialización. Del running ya hemos hablado varias veces. Es uno de los deportes que más ha crecido en los últimos años en practicantes y ventas y, seguramente, uno de los que mayores perspectivas tienen. La cifra de practicantes habituales es considerable, los ocasionales rápidamente se convierten en habituales, y cada vez hay más gente que apuesta por esta modalidad para ponerse en forma o para empezar a hacer deporte. Entre quienes corren con cierta asiduidad ya han asumido perfectamente la importancia de utilizar un calzado adecuado y eso, para el sector, ha supuesto un punto de inflexión en cuanto a ventas. Entre los ocasionales y los principiantes sigue habiendo quien sale a correr con calzado de cualquier tipo, pero poco a poco las cosas van cambiando y el potencial que supone este tipo de cliente es lo suficientemente importante como para estar convencido de que a corto y medio plazo el running seguirá creciendo. En volumen de ventas y de facturación (las gamas medias y altas ganarán cuota a medida que los practicantes vayan “asumiendo” la importancia de utilizar un calzado lo más técnico posible). Más allá del running, el outdoor es seguramente el segmento que mejor comportamiento ha tenido en los últimos años y uno de los que, a día de hoy, goza de mayor salud y de mejores perspectivas. Es un universo que engloba a una larga lista de modalidades, y aunque no todas han experimentado una evolución espectacular, la mayoría, en mayor o menor medida, sí han logrado beneficiarse de este culto a la naturaleza y a la salud que se ha apoderado de nuestra sociedad desde hace un tiempo. Dentro de esta larga lista de modalidades, seguramente las que han crecido más o, en cualquier El outdoor es uno de los segmentos que mejor evolución ha tenido en los últimos años. Los cambios que en él se han dado han sido espectaculares, tanto a nivel de practicantes y ventas como, sobre todo, a nivel de tiendas. Modalidades como el Trail Running o el outdoor más urbano -secundado por el llamado Travel- han sido determinantes para que el mundo outdoor, ajeno a la coyuntura, siguiese con el buen comportamiento de los últimos 5 años. La naturaleza se ha puesto de moda. Y parece que no es algo pasajero. Trail Running y travel motores del outdoor Las grandes han nacido y crecido con lo técnico y han seguido apostando por esta tecnicidad máxima pero, a la vez, han desarrollado colecciones más “populares”. Menos técnicas, más asequibles en precio, pero en las que no renuncian a sus bazas tradicionales: tecnicidad y funcionalidad. ts32

RkJQdWJsaXNoZXIy Njg1MjYx