Trescientos sesenta grados Las estrategias de comunicación empiezan a modificarse considerablemente, y en otros sectores ya se están aplicando conceptos del denominado marketing 360º para abarcar un espectro mucho más amplio de relación entre marca y consumidor, a la par que contemporáneo y social. Tanto las empresas como las personas han encontrado en Facebook, Twitter, Tuenti o Linkedin nuevas formas de interrelación, con una capacidad de comunicación desconocida hasta ahora, y con un nivel de coparticipación marca-persona, detallista-consumidor, e indudablemente persona-persona, muy interesantes y al mismo tiempo analizables. La complicidad entre usuarios otorga a estas herramientas de encuentro online una capacidad de divulgación en tiempo real que representa una gran oportunidad si se gestionan coherentemente y se dedican recursos, más humanos que económicos. Quizás un ejemplo claro es lo que muchas emisoras de radio han hecho en Facebook para que la audiencia pueda poner caras a esas voces que les acompañan diariamente en sus programas favoritos; o cientos de moteros participando activamente con sus comentarios mientras están viendo las carreras de moto GP en el Facebook que ha creado Televisión Española para tal fin. A mí me recuerda a las viejas historias de marineros, cuando narraban que tenían que ir buscando nuevos caladeros en función de las corrientes para echar sus redes y poder de esta forma seguir pescando. Hay un importante caladero en Internet, una oportunidad importante de implementar nuevos modelos de negocio (de pesca); caladeros que van a coexistir con los ya existentes, pero que sin lugar a dudas hay que aprender a pescar en ellos, porque los aparejos de siempre, las redes habituales, no son las mismas como tampoco lo son el número de capturas. Hablamos de las limitaciones de lo físico a la hora de competir con lo virtual, de los metros cuadrados frente a los bits, de la ubicación en una calle versus la posición de búsqueda en Google o Yahoo. Sin ánimo de alarmismos, este nuevo tipo de pesca es veloz, aquí no es el pez grande el que se come al chico, sino el pez más rápido. ‘Piensa, es gratis’ es el título de un formidable libro escrito por el publicista Joaquín Lorente. Para finalizar, me he permitido la licencia de acercaros un par de sus frases: “El conocimiento es un motor parado, lo que lo mueve es la actitud. El futuro es el tiempo que nos queda para hacer lo que no habíamos hecho antes”. ¿Quién conoce el Programa Perseo? ¿Quién sabe que su principal objetivo es promover la adquisición de hábitos alimentarios saludables y estimular la práctica de actividad física regular entre los escolares, para prevenir la aparición de obesidad infantil? Uno de cada tres niños españoles de entre seis y diez años padece obesidad infantil, y yo me pregunto ¿dónde estamos detallistas y marcas en este programa? ¿qué estamos haciendo individual o colectivamente? El 13% de los menores no hacen deporte nunca y tan sólo el 51% dedican más de dos horas a la semana a realizar alguna actividad física. Este mal endémico de la sociedad del bienestar en vez de paliarse sigue creciendo, algunos lo tildan ya de dimensión epidémica. Perseo, o lo que es lo mismo programa Piloto Escolar de Referencia para la Salud y el Ejercicio contra la Obesidad, lleva funcionando desde el año 2006 y se centra en aumentar el consumo de frutas y verduras, reducir la ingesta de grasas, aumentar los niveles de actividad física y reducir el sedentarismo dentro y fuera del colegio. Estudios oficiales apuntan, que un 8% del gasto sanitario -lo que supone unos 3.000 millones de euros anuales- se debe a problemas relacionados con la obesidad. Además, estos causan una sobrecarga asistencial a los profesionales sanitarios. El exceso de peso se ha convertido en la segunda causa de mortalidad prematura y evitable en España después del tabaco. Los primeros datos apuntan que la obesidad está más extendida entre los niños (19,8%) que entre las niñas (15%). Estos porcentajes se sitúan muy por encima de estudios anteriores. La Encuesta Nacional de Salud de 2006 limitaba a un 9% de media la obesidad infantil y al 19% el sobrepeso, si bien incluía a niños y adolescentes desde 2 hasta 17 años. En la población adulta, la obesidad afectaba al 16% de los españoles. “La causa es clara: el binomio mala alimentación y falta de ejercicio. Hay que actuar sobre las dos", interpreta Roberto Sabrido, presidente de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria (AESAN), del Ministerio de Sanidad. El programa Perseo persigue promocionar la actividad física con el propósito de reducir las tres horas diarias que, como media, pasan actualmente los escolares frente al ordenador o la videoconsola. Sabrido explicó que se está debatiendo cómo puede contribuir a esta causa un nuevo urbanismo con aceras más anchas, carriles bici y otros espacios más propicios para el ejercicio. "Los médicos y los colegios están muy implicados. Hace falta que lo hagan más lo padres, que son un referente a la hora de adquirir y sobre todo de mantener hábitos. Se ha visto en el programa que están más verdes que sus hijos", sentencia el presidente de la AESAN. Y nosotros, como sector ¿qué hacemos? … “na de na”. Más de lo mismo Andrés de la Dehesa (adehesa@sportmas.com)
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