no europeo de las exportaciones españolas. Estado Unidos, otra gran potencia mundial, ocupa el décimo lugar. Esta clasificación global no coincide en su totalidad con la realidad de las marcas nacionales, que eminentemente están ganando cuota en mercados emergentes y centrando gran parte de sus estrategias de expansión en posicionarse con fuerza en estos nuevos mercados. La Europa central sigue teniendo ciertos prejuicios con lo español y, además, muchos países de estos países tienen una industria propia potentísima y unos niveles de importación muy bajos comparados con los de España. ¿Solución? Ir a los mercados donde se puede crecer y no hay que luchar con grandes marcas autóctonas… Si analizamos la evolución que en los últimos 10 años se ha dado en este sentido, podremos ver como las cosas apenas han cambiado (aunque obviamente el volumen es mucho mayor): en 1997 Francia era el primer destino de las exportaciones (aunque con un peso inferior, ligeramente por debajo del 20%) y Portugal, Andorra o Reino Unido también estaban en las primeras posiciones. Sin embargo, es importante destacar el retroceso de países como Alemania –segunda hace una década- o Estados Unidos, sexta por aquel entonces. En el lado opuesto, países como Japón o nuevos mercado emergentes, como China, los países de la Asia más occidental, o los países latinoamericanos, están viendo como poco a poco las marcas españolas vana ganando cuota. El potencial de muchos de estos países, especialmente los de habla hispana y nuevos mercados emergentes del este de Europa y Asia, es tal que algunas empresas, ya han abierto filiales y fábricas propias en ellos. El futuro de las exportaciones pasa precisamente por estos mercados emergentes, donde las marcas nacionales parten con la misma ventaja que cualquier marca internacional. Todos parten de cero y el factor marca, en muchos casos, no tiene el peso que tiene en mercados más maduros. Así, es probable que a corto y medio plazo los países del continente sudamericano –los de habla hispana y, también, Brasil- ganen peso, igual que nuevos mercados como China o la India, economías muy potentes que tradicionalmente no se han percibido como mercados clave pese a su volumen de población, y que ahora, con un papel determinante en el comercio mundial, están “despertando” a pasos agigantados. Las marcas nacionales lo saben perfectamente y están volcando muchos esfuerzos en estos mercados, conscientes de que es importante posicionarse antes de que sea demasiado tarde. Hay que aprovechar las ventajas que conlleva una demanda creciente y una clase media muy consumista que aún está definiendo su patrón de consumo. Además, a diferencia de otros países de la zona, como Japón, el consumidor chino o indio no es excesivamente marquista de manera que aquellas marcas nacionales importantes que aún no se han planteado la expansión internacional en estos países tienen la oportunidad de posicionarse en los dos mercados más importantes del mundo. ¿QUIÉN SALE? No es fácil establecer una lista de las marcas españolas que más están apostando por la internacionalización. El volumen de exportaciones no tiene porque ser representativo del peso que tiene la exportación en las estrategias de la empresa. El sector de artículos deportivos cuenta, en España, con una lista muy larga de marcas nacionales. Algunas son grandes marcas, incluso a nivel mundial, y mueven miles de unidades cada año. Otras son más pequeñas, casi desconocidas, pero también generan un importante flujo de mercancías en todo el mundo. De todas maneras, si nos limitamos a esas grandes marcas que están en boca de todo el mundo, es obvio que las que están apostando más por la internacionalización y por su posicionamiento en nuevos mercados son las marcas que acuden a las grandes ferias internacionales, especialmente a ispo, la gran plataforma para darse a conocer al mundo, para encontrar nuevos socios y para potenciar su venta fuera de nuestras fronteras. Entre las empresas que año tras año “fichan” en el salón bávaro encontramos nombres como Trangoword, Grifone, Lorpen, Ternua, Laken, Matt, Buff, Chiruca o Bestard. Son, todas ellas, marcas vinculadas al universo Outdoor, lo que confirma la fuerza de las marcas nacionales en este segmento. Todas ellas, sin excepción, apuestan por el uso de materiales de última generación –algunos de fabricación propia- y garantizan la misma calidad que la que ofrece cualquier marca internacional. Incluso mejor. Al final, todo –o casi todo- depende del presupuesto que se tenga en marketing… y en eso, muchas marcas españolas juegan con desventaja. A esta lista de empresas habría que añadir alguna marca más que se ha hecho muy fuerte fuera de nuestras fronteras. A casos como los ya mencionados de Joluvi, Joma o Munich, hay que sumar nombres como Jim Sports o Luzbel, cuya presencia en Ispo confirma su objetivo de ganar cuota en el extranjero. Tampoco podemos olvidarnos del gran trabajo que están haciendo –desde sus orígenes- marcas vinculadas al segmento bike como Orbea o BH, al tenis de mesa -Enebe y Creber- y, también, al Skate –Jart es la primera marca nacional de monopatines que abre filial en Estados Unidos-. El futuro del Made in Spain es bastante esperanzador. Fuera de nuestras fronteras se empieza a valorar mucho el trabajo de las marcas nacionales. Los grandes nombres españoles que arrasan en todo el mundo, desde Adrià hasta Gasol, pasando por Nadal, Alonso, Penélope Cruz, Almodóvar, Custo o Banderas, han dado una nueva dimensión a nuestro país. La gente sabe dónde está España y qué hace. Y la imagen del país ha mejorado sustancialmente. Puede que a muchos les parezca una conclusión un poco simplista, pero al final, la fama de la gente tiene que ver mucho con la imagen que se tiene de un país. Y España ha demostrado que tiene capacidad para hacer las cosas muy bien y, sobre todo, para exportarlas a todo el mundo… El futuro de las exportaciones pasa, en gran parte, por nuevos mercados emergentes como China, India o Europa del Este, donde las marcas nacionales parten con la misma ventaja que cualquier marca internacional: todos parten de cero y el factor marca, en muchos casos, no tiene el peso que tiene en mercados más maduros Aunque a priori pueda parecer una tontería, el éxito y el reconocimieno internacional que han conseguido algunos españoles, vinculados o no al deporte (Gasol, Nadal, Adrià, Alonso, Banderas...) ha sido determinante para que el mundo cambiará su percepción de España. ts65
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