TradeSport 160 - Noviembre 2008

que mayores perspectivas tiene. Su crecimiento en practicantes, lógicamente, se ha traducido en un fuerte impulso de las ventas. Un impulso que también se ha visto favorecido por el peso que, poco a poco, están adquiriendo las prendas técnicas. Si hace apenas 10 ó 15 años el consumidor tipo era bastante reacio a las prendas técnicas –seguramente por el precio-, el trabajo de muchas marcas ha servido para que estos practicantes, tanto quienes lo practican regularmente como aquellos que lo hacen ocasionalmente, se hayan dado cuenta de la importancia de vestir adecuadamente. No en vano, se trata de deportes en los que la climatología juega un papel determinante, y estar perfectamente protegido puede ser clave a nivel de rendimiento y, sobre todo, en cuanto a seguridad. Las marcas, conscientes de que el factor precio no es tan determinante como hace una década, están apostando muy fuerte por el I+D, y en la última década la evolución de los materiales utilizados para fabricar prendas y calzado outdoor ha sido espectacular, tanto por parte de las propias marcas, que no han dudado en crear sus propios tejidos, como por parte de los principales fabricantes de textiles técnicos, entre los que destaca Gore con sus membranas Gore-Tex y Windstopper. La presencia de prendas y calzado outdoor en las tiendas multideporte ha crecido exponencialmente y a día de hoy es muy difícil que una tienda con este formato no tenga entre su oferta, textil o calzado para alguna de estas actividades. Además, las tiendas especializadas se han posicionado con mucha fuerza, y su supervivencia y, sobre todo, su crecimiento, es una de las mejores pruebas del buen momento que vive este segmento. Un buen momento que, como suele pasar, también se ha traducido en una fuerte emergencia de nuevas marcas en nuestro mercado. Algunas han conseguido ganar cuota poco a poco y otras, pese a su fuerza en otros países, no han logrado “calar” en nuestro país. En cualquier caso, es obvio que para estas marcas extranjeras, España se ha convertido en uno de los mercados con más potencial de crecimiento. Pese al buen momento que vive el outdoor en nuestro país, las cifras aún están a años luz de otros mercados más maduros, y ello representa una buena oportunidad para marcas que buscan nuevos mercados. La climatología, seguramente, no es la más adecuada para que según que líneas de producto puedan crecer, pero otras colecciones, como las de verano, baja montaña o, sobre todo, las llamadas líneas urban outdoor, s´´i tienen un recorrido lo suficientemente atractivo como para que se apueste por nuestro mercado. De todas maneras también hay que tener en cuenta que en España ya existen varias marcas nacionales líderes con un posicionamiento muy bueno y con la misma capacidad de innovación –en materiales y diseño- que las grandes marcas internacionales. Pero de eso ya hablaremos más adelante. LA MODA: UN NUEVO PUNTO DE INFLEXIÓN Hemos visto como el outdoor más atlético vive uno de sus mejores momentos. Cada vez hay más gente que practica alguna de las muchas modalidades que engloba el universo de deportes al aire libre y, como también hemos visto, cada vez hay más practicantes que, sea cual sea su nivel y la modalidad que llevan a cabo, apuestan por el material técnico. Aun así, y pese a que el segmento se beneficiará de este nuevo panorama, hay otra vía de negocio que puede aportar muchas alegrías al segmento: el look outdoor. Puede que se trate de una moda pasajera, pero actualmente la estética outdoor tiene mucho tirón en todo el mundo. En pa´´ises como Estados Unidos o en el norte de Europa –a veces por necesidad-, este estilo se impone con fuerza en las calles de las grandes ciudades, y en España cada vez hay más consumidores que, sin ser practicantes de estas modalidades, deciden vestir con prendas outdoor. Algunos, incluso, pese a que en la extensa oferta de este subsegmento hay prendas con una baja tecnicidad, prefieren apostar por la seguridad y no dudan en escoger, pese al precio, modelos con una alta tecnicidad. Pensados para la montaña, se han convertido, también, en prendas para el día a día, perfectamente llevables para ir a la oficina, para ir en moto o, simplemente, para pasear por la calle. Y pese a que cuando esta tendencia comenzó ya existían algunas marcas bien posicionadas, como Columbia y Timbreland –seguramente las dos que mejor han sabido aprovechar este boom-, la apuesta que han hecho todas las marcas del mundo outdoor, incluso las que tradicionalmente han apostado más por prendas ultrafuncionales, ha confirmando este subsegemnto como uno de los que mejores expectativas genera. Así, no es extraño que en prácticamente todas las colecciones de textil y calzado de las grandes marcas de outdoor las prendas versátiles –así suelen catalogarse- tengan cada vez más fuerza y que, además, su presencia en el canal moda y, sobre todo, en el canal zapatería, sea cada vez más fuerte. Puede que hace algunos años a uno le mirasen raro si se paseaba por la ciudad con una chaqueta técnica realizada con materiales de última generación o si iba a trabajar con una zapatillas outdoor con mil y una características técnicas, pero ahora, basta con darse una vuelta por las calles de cualquier ciudad, en verano o, especialmente, en invierno, para ver como los zapatos, los forros polares, los cortavientos o las chaquetas de marcas como The North Face, Salomon, Chiruca, Columbia o Trango, por citar algunas marcas, se han convertido en una prenda cotidiana. Las marcas, conscientes de que el factor precio no es tan determinante como hace una década, están apostando muy fuerte por el I+D, y en la última década la evolución de los materiales utilizados para fabricar prendas y calzado ha sido espectacular ts29 En prácticamente todas las colecciones de textil y calzado de las grandes marcas de outdoor, las prendas versátiles –así suelen catalogarse- tienen cada vez más fuerza y, además, su presencia en el canal moda y, sobre todo, en el canal zapatería, es cada vez más fuerte.

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