[ ESPECIAL SPORTWEAR vs SPORTSTYLE ] REDACCIÓN,Barcelona tiempo estimado de lectura >>> 7,5 min. Alos expertos en marketing les gusta mucho buscarle nombres atractivos a todo. Nombres que definan el concepto, aunque sea de manera un tanto artificial, y que, además, tengan un cierto atractivo para el consumidor. En nuestro sector esta rebautización es bastante habitual y en estos últimos años, con el boom del estilo deportivo, han salido como de la nada conceptos como sportwear, sportstyle, lifestyle o sportlifestyle. Y aunque para muchos, las diferencias entre algunos de ellos son casi imperceptibles, el origen de la marca suele ser bastante aclarador; por mucho que nos pese, el deporte es deporte y la moda es moda. A estas alturas, decir que lo que todos conocemos como sportwear, -cuya traducción literal es ropa deportiva-, se ha impuesto con fuerza en el sector deportivo no es ninguna novedad. Las estadísticas señalan que alrededor de un 80% de las ventas que se llevan a cabo en el comercio deportivo no tienen nada que ver con lo atlético, un dato que da una idea bastante clara de cómo están las cosas actualmente y del peso que tiene el sportwear para el consumidor…y para el detallista. La fuerza de esta tendencia es tal, que no sólo se ha impuesto en lo que podríamos llamar ropa de calle –lo que muchos llaman apresuradamente moda deportiva-, sino que también ha servido como fuente de inspiración en las estrategias de muchas marcas atléticas, que desde hace algunos años vienen apostando muy fuerte por potenciar el estilo y el diseño de sus prendas más técnicas. Sin renunciar a la funcionalidad que les es propia, marcas del mundo del outdoor, del tenis, del fitness y de casi todos los segmentos atléticos se han dado cuenta que el look de una prenda tiene cada vez mayor importancia en las decisiones de compra de los consumidores y, sobre todo, han visto como cada vez hay más consumidores que buscan textil y calzado técnico para el día a día independientemente de que luego lo utilicen para hacer deporte. Y eso, con el look que tenían hace apenas media década, es casi imposible. LO QUE SE IMPONE ES… EL LOOK SPORT A esta nueva tendencia que se ha impuesto con tanta fuerza en nuestro canal y, también, en el mundo de la moda, se le pueda llamar de mil maneras pero al final, de lo que se trata, es de ropa de calle con look sport. Obviamente habrá muchas diferencias entre marcas y, también, entre canales, pero unos y otros, lo que venden, es ropa con estilo deportivo. A veces este estilo está muy definido –sobre todo en el caso de las marcas deportivas- y en otros se intenta disimular pese a que haya influencias más que evidentes. Cada mundo juega a su manera, y mientras que para unos es bueno que les vinculen a la moda, para otros no lo es que les relacionen con el deporte. Que la moda quiera conservar su parcela es hasta cierto punto comprensible. Los prejuicios que tiene hacia el deporte siguen siendo considerables, y aunque, en estos últimos años, este canal se haya animado a apostar por determinadas marcas de nuestro sector –o mejor dicho, por las líneas fashion de estas marcas-, la moda siempre ha dejado claro que una cosa es el sportwear y otra el estilo deportivo. Aun así, no parece de recibo renegar –porque no nos engañemos, lo sigue haciendo- del deporte, cuando se está “bebiendo” de él para inspirarse. Pero así es la moda, y quizás no sea tan buena idea obsesionarse en parecerse a ella. Dejando de lado el textil, del que ya hablamos en anteriores artículos, el calzado no ha escapado a estos cambios. Al contrario, probablemente fue la familia donde primero se evidenciaron, sobre todo por la rápida “deportivizacion” que hicieron las grandes marcas del mundo de la zapatería. Sería complicado concretar si quien impuso con fuerza el calzado deportivo fueron las marcas de nuestro sector o las marcas del mundo del calzado, pero es obvio que cuando estas últimas dieron el importante paso, hará más de una década, de comenzar a lanzar colecciones con un look más urbano y menos formal, las marcas de deporte vieron un filón importante y comenzaron a diseñar modelos deportivos que pudieran salir de las pistas y los campos. La progresión en este sentido fue un poco lenta al principio, pero con el empujón que en su momento dieron marcas como Converse, Puma, adidas o, más adelante algunas vinculadas principalmente al mundo outoor, el calzado casual, urbano o como quiera llamársele, empezó a emerger en nuestro segmento hasta convertirse en la familia con más ventas del calzado. En este camino, además, muchas marcas con orígenes deportivos se han especializado en calzado de este tipo, convirtiéndose, junto con las marcas ya mencionadas, en verdaderos iconos del calzado urbano. Muchas de ellas, incluso, han conseguido adquirir un estatus de exclusividad dentro y, sobre todo –porque eso es lo que perseguían- fuera del canal. Pero de eso ya hablaremos más adelante. UNA RENUNCIA IMPOSIBLE En muchos de nuestros artículos hemos insistido en la necesidad de que el comercio deportivo, y también las marcas, hicieran esfuerzos para potenciar lo atlético. El porcentaje que tienen las ventas de artículos no técnicos es demasiado alto teniendo en cuenta la esencia del sector, y seguramente sería aconsejable que entre todos se buscaran soluciones para que lo atlético recupere un poco de terreno. El problema, seguramente, es El sportwear ha transformado por completo la oferta de proveedores y detallistas, sin embargo, el sector ha visto como ha sido la moda la que se ha erigido como el gran referente del estilo deportivo El estilo deportivo cambia las reglas del juego A esta nueva tendencia que se ha impuesto con tanta fuerza en nuestro canal y, también, en el mundo de la moda, se le pueda llamar de mil maneras pero al final, de lo que se trata, es de ropa de calle con look sport. ts40
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