TradeSport 153 - Marzo 2008

[ home-fitness, electroestimulación y pulsómetros ] REDACCIÓN,Barcelona tiempo estimado de lectura >>> 7,5 min. El fitness, a nivel de practicantes, ha experimentado un fuerte crecimiento. Eso parece que ha quedado claro con lo que hemos visto en el artículo anterior. Los gimnasios cada vez tienen más clientes -más o menos regulares- y la tendencia, además, es que esta evolución continúe al alza. Pero paralelamente a este fuerte crecimiento de los gimnasios -en cantidad, calidad, facturación y clientes- también se ha dado un importante auge del llamado Home Fitness, o lo que es lo mismo, de las máquinas caseras. Las razones son varias, desde la falta de tiempo o de gimnasios en la zona hasta, simplemente, la predilección por hacer deporte en casa, sin horarios, sin tener que desplazarse, sin gente y sin cuotas (muchos de estos aparatos se acaban rentabilizando en menos de dos años). Sea cual sea la razón, cada vez hay más gente que valora la posibilidad de poder tener en casa una bicicleta estática, una cinta para correr, una máquina de remo o cualquiera de las cada vez más modernas máquinas de fitness. Los aparatos que venden la mayoría de marcas suelen ser muy completos. Algo más simples (y sobre todo más compactos) que los que podemos encontrar en los gimnasios, pero con prestaciones suficientes como para que no echemos de menos nada. Y, lógicamente, con un precio más bajo. En cuanto a las ventajas para el usuario, la lista es bastante larga, aunque destaca, por encima de todas, la posibilidad de entrenarse en cualquier momento del día, sin depender de si hay clases o no -algo bastante habitual en determinadas modalidades que se practican en los gimnasios-, sin tener que preocuparse de las condiciones meteorológicas -es cierto que eso, el gimnasio, también los "soluciona"-. Además, la gran mayoría de estos aparatos también permite llevar a cabo un control minucioso de la actividad, con programas de entrenamiento y estadísticas muy completas sobre, por ejemplo, la quema de calorías o la frecuencia. Con todo ello el uso correcto y seguro de estos aparatos está prácticamente garantizado. ¿Desventajas? A priori dos: el precio y el espacio, pero en ambos casos las marcas están haciendo un muy buen trabajo. El precio, pese a las importantes mejoras, no es un obstáculo real porque, como hemos dicho, si su uso es habitual y se ha adquirido como alternativa al gimnasio, se acaba amortizando con relativa rapidez. En cuanto al espacio, las máquinas más nuevas, además de ser muy valiosas desde el punto de vista técnico, han sido proyectadas con el fin de ahorrar espacio, teniendo en cuenta la necesidad de conciliar las propias necesidades con los metros cuadrados del apartamento. En cuanto a la tipología, hay una amplia variedad de opciones. Casi todas las máquinas tienen un carácter aeróbico o cardiovascular, con una repetición de movimientos y un ritmo regular para aumentar la frecuencia cardiaca, acelerar la respiración y, con ellos mejorar la capacidad cardiorespiratoria general. La elección, si no se quiere una máquina multifunciones -en las que el precio y el espacio que ocupan suele ser superior- dependerá, entonces, de otros factores, especialmente del grupo de músculos que quiera trabajarse o del tipo de actividad preferida. El homefitness en la tienda de deporte Que tener homefitness entre el mix de producto no es fácil es bastante evidente, tanto por el espacio como por el coste. Aun así, existen alternativas para solventar estos dos handicaps que, a priori, son los dos principales frenos para que un detallista con un local pequeño o mediano apuesta por este segmento. Las dimensiones del local, como hemos dicho, son un factor clave para apostar o no por las máquinas. Sus ventajas en cuanto a la venta -demanda, atemporalidad, stock 0 (basta con los modelos de exposición y el apoyo, si se quiere, de un catálogo…)- no son suficientes para muchos detallistas, reacios a tener una oferta limitada por el espacio y que el consumidor no pueda ver y probar. La rentabilidad, sin embargo, sí parece probada, y seguramente la mejor prueba de ello es el importante volumen de ventas que tienen cadenas como Decathlon o El Corte Inglés, que con sus marcas propias -primeros precios-, están sacando muy buen partido al espacio (y probablemente, pese a la competencia que representan estén ayudando a dinamizar el segmento con la primera venta). La realidad, pese a las ventas de estas dos cadenas, es que el equipamiento para particulares no tiene un canal de distribución específico, y aparte de las compras que se realizan a través de grandes superficies, quienes más volumen mueven son las tiendas virtuales. No necesitan espacio, no tienen stock y no pagan alquiler: simplemente, actúan como intermediarios. Ante esta situación, los proveedores, lógicamente, intentan Paralelamente al fuerte crecimiento experimentado por los gimnasios -en cantidad, calidad, facturación y clientes- también se ha dado un importante auge del llamado Home Fitness El gimnasio en casa… y en la muñeca Tener maquinaria home fitness entre el mix de producto no es fácil, tanto por el espacio como por el coste. Aun así, existen alternativas para solventar estos dos handicaps y aprovecharse de las ventajas que puede tener apostar por esta categoría ts44

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