ts53 se ha quedado gratamente sorprendido por los diseños y por su tecnicidad. También me gustaría destacar los esfuerzos de una marca nacional como Tsunami que ha vuelto una vez más a reinventarse y posiblemente consiga también dar un paso hacia delante con esta nueva colección. Atomic, Rossignol, Salomon y Head dominan las ventas en España, pero, ¿que marca puede hacerles sombra en los próximos años? ¿Por qué? Creo que es difícil dar nombres, pero estoy convencido de que cualquier marca que haya apostado por las nuevas tecnologías y la gama alta, es decir, por la exclusividad, puede plantar cara a las grandes. En este sentido, creo que marcas como k2 o Elan están haciendo un buen trabajo, con una estrategia muy clara que tiene en la exclusividad una de sus grandes bazas. Otra posible marca a tener muy en cuenta a corto plazo por su nueva tecnología y diseño es Nordica. Como detallista de material para deportes de invierno ¿Cómo valora este año? Aunque intento huir del pesimismo, la verdad es que, a pesar de que haya nevado un poco más, los resultados no están siendo mucho mejores que los del año pasado. La gente aún parece sumida en el pánico del cambio climático y es reacia a comprar por si después no puede subir a esquiar todo lo que quisiera, aunque en realidad la mayoría de estaciones tengan casi todas sus pistas abiertas. El año pasado aún nos está pasando factura… ¿Qué tendencias cree que se impondrán en los próximos años tanto en textil como en material duro? Creo, como he dicho antes, que la clave del futuro, en textil y en material duro, es la especialización. Hablo del segmento de la alta gama en las distintas disciplinas de deportes de invierno, lo que significa, sobre todo, apostar muy fuerte por la tecnología y, también, por el diseño, porque la imagen vende tanto o más que la tecnología. El futuro será la exclusividad. ¿Puede sobrevivir en nuestro país una tienda especializada sólo en deportes de invierno? Durante muchos años cualquier detallista al que se le hubiera hecho esta pregunta hubiera dicho que sí. Las tiendas de esquí, el segmento y el sector en general nos hemos acostumbrado a tener buenos años de nieve y aunque hace algunos años ya pasó, poca gente podía pensar que tendríamos un año como el que tuvimos. Si, además, las cosas no mejoran este año, como parece, el problema es aún mayor, porque dos años malos no son fáciles de superar. Esta dificultad es aún mayor en las grandes ciudades, donde la tienda de deporte pierde fuerza, pero de todas maneras creo que no hay nada imposible, y que con mucho cariño se pueden aguantar muchas cosas (se ríe). Por pertenecer a un grupo, ¿se consiguen ventajas en las compras conjuntas de esquí? ¿Y en las ventas? Mi opinión personal es que ahora los socios de un grupo acabamos teniendo las mismas ventajas e inconvenientes que pueda tener cualquier tienda especialista independiente que tenga un mínimo de volumen. No hay que hacer demasiados números para saber que, al final, las condiciones acaban siendo para todos muy iguales. En cuanto a las ventas... nos desean mucha suerte.
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