TradeSport 118 - Enero 2005

ts29 Las ferias confirman el buen momento Aunque muchas veces las cifras de ventas no engañen, no siempre es fácil evaluar el comportamiento de un segmento, sobre todo si tenemos en cuenta las valoraciones, siempre optimistas, de muchas empresas. Pese a que a nivel general es fácil determinar si el sector está o no en un buen momento, uno de los indicadores más fiables de la evolución de un segmento son las ferias. Y teniendo en cuenta esta realidad, no es ninguna estupidez afirmar que los deportes outdoor están de moda, no en vano, se han convertido en apenas cinco años, en uno de los segmentos a los que se está prestando mayor atención -y más espacio- en las grandes ferias generalistas. Y la gran feria del sector, la Ispo, es un paradigma de esta evidencia: un año más, el outdoor será unos de los principales ejes de la edición invernal. Además, conscientes del peso del outdoor en su oferta, la feria de Munich está llevando a cabo varias iniciativas para hacer frente a la gran feria especializada del mundo Outdoor, la de Fridrichshafen, que a principios de 2004 le ganó la batalla para albergar la gran feria de outdoor en Europa y que se ha convertido, en pocos años, y en detrimento de la ispo, en un encuentro clave para la mayoría de las grandes marcas de deportes al aire libre. En nuestro país, a pesar de que no ha habido ninguna feria generalista desde la desaparición de Sport ni hay ninguna especializada en este segmento, el outdoor también ha logrado hacerse un pequeño hueco en el panorama ferial: en la edición de este año del Caravaning se diseñó un espacio dedicado a estos deportes y en octubre se llevó a cabo en Ficoba la primera edición de la Feria del Montañismo. Calzado y textil A pesar de que los complementos también son determinantes en la práctica de este tipo de deportes, es evidente que los dos principales familias del outdoor -en volumen de ventas- son el calzado y el textil. Tanto uno como otro tienen unas características especiales y se diseñan principalmente con el objetivo de aportar al practicante la máxima comodidad y evitar, como hemos dicho anteriormente, los problemas que puedan comportar la orografía y el clima. Además, conscientes de su importancia y de la preocupación de muchos deportistas por acceder a un buen material (con menos reticencias con el precio que hace algunos años), las empresas están aumentando progresivamente sus inversiones en I+D para ofrecer nuevas soluciones. En el caso del calzado, el objetivo es reforzar las zonas que más sufren del pie, como el talón y la zona de impulso, y mejorar la transpiración. Es un calzado que cuida cada detalle y que en la mayoría de casos cuenta con una suela en la que se han trabajado todos los puntos importantes, especialmente las zonas de flexión y de apoyo, fundamentales para absorber el impacto. Además, y teniendo en cuenta el entorno, la mayoría de grandes fabricantes están incorporando membranas hidrófilas para impedir que el agua y el frío puedan entrar en el pie. En nuestro país, donde la práctica -y la demanda- es importante, especialmente en la zona norte (Pirineos y cordillera cantábrica), hay importantes fabricantes de este tipo de calzado, como Paredes, Boreal, Bestard, Tuckland o Chiruca, que compiten con las grandes marcas internacionales de calzado outdoor, como The North Face, Meindl, Columbia, Salomon o Lowa. El caso del textil es muy similar al del calzado. En estos últimos años se han multiplicado el número de marcas especializadas y sobre todos de marcas generalistas. Son prendas complejas que deben garantizar una máxima protección frente a lluvia, viento y frío, por lo que su diseño y su fabricación, generalmente, requiere tiempo, esfuerzo y dinero. Aunque es un segmento con una fuerte competencia -y uno de los que más ha evolucionado gracias a ésta-, hay un grupo de marcas que han logrado alcanzar cuotas de mercado muy altas a nivel mundial. Entre estas marcas destacan The North Face -probablemente la marca especializada más fuerte del segmento-, Columbia o las grandes marcas europeas, como Millet, Aigle, Jack Wolfskin, Häglofs, Eider o Lafuma. Lógicamente también hay que sumar las dos grandes multinacionales del sector, cuya fortaleza económica les ha permitido posicionarse sin problemas en este segmento - aunque con métodos muy diferentes- . En textil, nuestro país también cuenta con algunas marcas muy importantes que han logrado un buen posicionamiento en nuestro mercado y en algunos países extranjeros. Marcas como Grifone (que acaba de alcanzar un importante y exclusivo acuerdo con Gore), Trango o Ternua se están haciendo un hueco entre las grandes con prendas altamente funcionales de última generación que ofrecen las mismas características que las de las grandes marcas. En este sentido, y a modo de reflexión personal, parece obvio que tanto en calzado como en textil, las marcas nacionales están a la misma altura que las grandes especialistas internacionales, de manera que probablemente la única diferencia que exista entre unas y otras sea los recursos disponibles para destinar a marketing, publicidad, internacionalización... es decir, para poder posicionarse en nuevos mercados. El running El running es una de las modalidades de deportes outdoor que está atrayendo a más practicantes en estos últimos años. Como todos los deportes considerados outdoor, y como hemos explicado anteriormente, el ritmo de vida actual y el consecuente cambio en los hábitos deportivos han convertido al running en un recurso perfecto para aquellos que quieren mantenerse en forma y no quieren depender de nadie para ello. Como hemos señalado, los deportes de equipo están experimentando un retroceso en detrimento de Los deportes outdoor se han convertido, en apenas cinco años, en uno de los segmentos a los que se está prestando mayor atención -y más espacio- en las grandes ferias generalistas En un sector donde lo atlético parece perder fuerza a una velocidad preocupante, los deportes outdoor se han convertido en uno de los segmentos más auténticos del sector

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