TradeSport 117 - Diciembre 2004

ts22 [running] Mizuno acompaña a Serge Girard en su aventura transcontinental El corredor frances ha elegido a la marca japonesa para acompañarle en su reto de atravesar corriendo los cinco continentes Redacción, Barcelona tiempo estimado de lectura >>> 7 min. Hace siete años, Sere Girard se propuso uno de los mayores retos que un corredor puede imaginar: atravesar los cinco continentes corriendo. En 1997 hizo la primera gesta: cruzó América del Norte desde Los Ángeles hasta Nueva York; 2.597 Km. en 52 días, 23h y 24' y con una media de 90 Km. al día. Dos años después, en 1999 emprendió la TransAustralia, desde Perth hasta Sydney; 3.755 Km. en 46 días, 23h y 12'; una media de 80 Km. diarios. En 2001 llevó a cabo la TransSudamérica desde Lima hasta Río de Janeiro; 5235 Km. en 73 días, 3h y 40'; una media diaria de 70 km. y a una altura media de 4000. El año pasado Girard completó su cuarto reto. La TransÁfrica, desde Dakkar hasta El Cairo. 8295 Km en 123 días, 2 horas y 40'. Girard se compara muchas veces con un marinero. Para él la aventura de atravesar los océanos en un barco a vela o cruzar continentes corriendo es exactamente igual: un reto excitante y lleno de incertidumbre. Y como un marinero, cuando termina una travesía sólo tiene una cosa en la mente: comenzar otra cuanto antes. Esta cuarta aventura es especial. Las condiciones no son las mismas que las anteriores. Hay que correr por eternos desiertos de arena, con temperaturas que superaran los 45º y muy alejado, durante la mayoría de días, de cualquier resquicio de sociedad. Sus piernas cruzarán Senegal, Mali, Nigeria, Libia y Egipto, y las pirámides de Giseh serán testigos del final de una gesta que muchos definiríamos como una locura pero que para Girard tan sólo es una más de sus aventuras transcontinentales. El cuarto reto Dakkar. 2 de octubre de 2003. Son las 7:20 a.m. y Girard se dispone a iniciar su aventura. Sabe que los primeros días serán complicados, sobre todo por el sofocante calor (una humedad del 90%). La primera jornada termina. Serge está exhausto pero satisfecho: 83 kilómetros en 9h 7'. La aventura comienza bien. Pasan los días y el calor empieza ser un problema. Serge cambia de estrategia: es mejor correr de noche y dormir por la tarde. La jornada empezará a las 3 de la mañana y acabará a las 12 del mediodía. 10 de octubre. Tras 9 días corriendo una media de 69 Km. diarios Serge y su equipo alcanzan la frontera entre Senegal y Mali. El equipo llega a la posta militar situada junto a la ciudad de Kai, donde se registran las más altas temperaturas de África Occidental. Por suerte el equipo dormirá en un hotel con aire acondicionado junto al río Senegal. En Mali los caminos se hacen cada vez más impracticables para los vehículos... y para Serge, que tiene que atravesar zonas de sabana, donde en ocasiones la vegetación llega a agujerear las zapatillas. Después de 28 días corriendo y a 1.800 Km. de la salida, aparece nuevamente un camino, que permite a Serge volver a correr más de 80 Km. diarios. El sol no desaparece y le obli-

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