42 tecnogarden REPORTAJE El bambú frente al cambio climático Su base biológica, con su velocidad de crecimiento única, sin necesidad de reforestación y combinado con una producción eficiente y sus excelentes características técnicas de calidad hacen que el bambú tenga un gran recorrido de futuro. La desertificación y la sequía aumentan cada año por la vulnerabilidad de los ecosistemas de zonas secas, que cubren un tercio de la superficie del planeta, debido a la sobreexplotación y el uso inadecuado de la tierra. En este contexto, el cultivo de bambú es una verdadera alternativa respetuosa con el medio ambiente y una apuesta sostenible de futuro. En general, el bambú es muy adecuado para la reforestación, incluso en circunstancias difíciles (por ejemplo, tierras erosionadas). El bambú es una hierba y se considera la planta de más rápido crecimiento del planeta. Un nuevo brote puede crecer hasta un metro por día. Además, el bambú alcanza una dureza increíble: es muchas veces más fuerte que el roble o las todavía populares pero amenazadas maderas duras tropicales. Cada año se puede cosechar una quinta parte de todos los tallos del bambú gigante sin poner en peligro el bosque. Una planta de bambú se compone de varias cañas y nuevos brotes crecerán naturalmente de la planta madre cada año. En general, 20-25% de las cañas de un bosque de bambú sostenible o plantación pueden ser cosechadas cada año sin disminuir el tamaño de la plantación o el número de cañas por hectárea. Esto significa
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