Hasta ahora hemos profundizado en lo importante que es llevar el textil y el calzado adecuado. Son dos aspectos prioritarios cuando salimos a la montaña, porque gran parte de nuestro confort y, por lo tanto, de nuestra seguridad, dependerá de ello, pero que sean prioritarios no significa que sean los únicos importantes. Sobre todo, si nuestra aventura no es de solo un día y nos obliga a cargar con más cosas que una simple mochila para salidas cortas. Si tenemos que estar varios días, cargar con ropa, calzado, complementos y demás cosas necesarias, y, sobre todo, si tenemos que dormir en la montaña, las mochilas, los sacos de dormir y las tiendas se convierten en tres elementos clave. Tanto como lo son el textil y el calzado. Porque, al fin y al cabo, se trata de buscar en máximo confort en todos los aspectos, y estas tres “piezas” también es imprescindible para conseguir el confort adecuado que nos permita disfrutar de nuestra aventura. Si no elegimos bien, como siempre, esta aventura puede convertirse en un drama… Carga, la justa Las mochilas son una pieza imprescindible para cualquier salida a la naturaleza, ya sea para caminatas de un día -lo de ir “a pelo” hace tiempo que está descartado- o para travesías de varios días. En ellas llevaremos todo lo que necesitamos para nuestra excursión, desde la comida, el agua y algo de abrigo en trekkings de pocas horas, hasta el saco de dormir, la tienda y la ropa y la larga lista de complementos que necesitamos, para viajes de larga duración. Es por eso, que las mochilas son, después del textil y el calzado, los productos con mayor demanda del mundo outdoor. Y la oferta es, igualmente, casi infinita. Y lo es en parte, por uno de los principales aspectos que debemos tener en cuenta cuando vamos a elegir una mochila: el tamaño. Existen desde pequeñas mochilas pensadas para una salida de un día, hasta verdaderos armarios portatiles para quienes estarán días fuera. La pruimera regla básica es, justamente, muy bási- “Si tenemos que cargar con ropa, calzado, complementos y demás cosas necesarias, y, sobre todo, si tenemos que dormir en la montaña, las mochilas, los sacos de dormir y las tiendas se convierten en tres elementos clave. ” 168 VIAJES VI
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