TE283 - Tierras Agricultura

Agri 283 / DOSSIER 11 25-29 FEBRERO/FEBRUARY ZARAGOZA - ESPAÑA/SPAIN FIMA2020 acción por el clima y contribuir a alcanzar los objetivos climáticos y medioambientales de la UE. - Fortalecer el tejido socioeconómico de las zonas rurales. - Modernizar el sector a través del fomento y la puesta en común del conocimiento, la innovación y la digitalización en las zonas agrícolas y rurales. A ello se suman una serie de objetivos específicos, como el asegurar unos ingresos justos, el incrementar la competitividad de la agricultura europea, el reequilibrio del poder en la cadena agroalimentaria, la lucha contra el cambio climático, la protección del medio ambiente, la conservación del paisaje y la biodiversidad, el apoyo del relevo generacional, el refuerzo de la calidad de los alimentos, y el mantenimiento de las zonas rurales vivas. El esquemas de aplicación de la PAC se apoyará sobre un sistema de pagos directos (asociados y disociados) y de ayudas al desarrollo rural, y se establecerán una serie de planes sectoriales para producciones como frutas y hortalizas, vino, sector apícola y otros sectores, en los que los forrajes pueden tener líneas específicas de apoyo. Los sectores a apoyar en esos planes estratégicos serán definidos por los Estados Miembros, tendrán una duración de 3 a 7 años, contarán con una financiación europea del 50%, y contemplarán actuaciones dirigidas a las inversiones, a la investigación, al asesoramiento y la formación, a la promoción, al aumento de la eficiencia y la sostenibilidad, a la mejora de la calidad, a la prevención de crisis y gestión de los riesgos… Una de las perspectivas que puede abrir más expectativas para la producción de forrajes es la aplicación de los ECO-ESQUEMAS, que será intervenciones que permiten conceder una ayuda a un agricultor genuino que realice, en hectáreas admisibles, prácticas beneficiosas para el clima y el medio ambiente ►AGRICULTURA 4.0. La jornada continuará con la intervención de Alfredo Gómez, responsable de desarrollo de negocio de ITTAINNOVA, quien explicó una ponencia titulada ‘Agricultura 4.0 para el cultivo y preparación de subproductos. Tendencias tecnológicas en la maquinaria’. En su opinión, estamos ante la cuarta revolución industrial, que va a cambiar todos los esquemas de trabajo y de producción en los diferentes sectores productivos. El impacto esperado de esta nueva forma de producir será una reducción del 10-20% en los costes de producción, en los costes de logística, en los costes de mantenimiento y en los costes de calidad, la disminución de un 30-50% en los inventarios de seguridad, y la reducción de un 60-70% en el coste de complejidad por la aparición de productos inteligentes. Los nuevos modelos de negocio de estos sistemas de producción van a abrir a todos los sectores, incluido el de la producción agrícola, nuevas posibilidades de colaboración entre los distintos agentes compartiendo más información, nuevas estructuras de organización reduciendo los costes por procesos optimizados, nuevos canales digitales de comunicación con los clientes, nuevos modelos de relación con los proveedores a partir de las predicciones de la demanda, y nuevas fuentes de ingresos derivadas del valor de los datos. Las herramientas tecnológicas que ayudarán a construir esa agricultura 4.0 serán los sensores más potentes y baratos, los protocolos de trabajo orientados, la integración de sistemas, el incremento de la potencia de cálculo, la creciente capacidad de análisis de datos y las múltiples posibilidades de comunicación y de integración a través del internet de las cosas (OT) y de la inteligencia artificial (IT). En el caso del campo, las herramientas que en estos momentos están empezando a aplicarse son los softwares especializados de gestión para distintas actividades, los análisis de datos recogidos en campo, la creación de plataformas Marketplace, el desarrollo de maquinaria avanzada con posibilidad de trabajo autónomo y uso de la inteligencia artificial, los sensores de campo, la implantación de la genómica para crear ‘superplantas’ y la automatización del riego. Son todas ellas herramientas para llegar a aplicar la llamada ‘agricultura de precisión’, que pretende realizar la gestión de las parcelas teniendo en cuenta la variabilidad de las plantas, del suelo y de los factores externos que interactúan con ellas. Para desarrollar esta agricultura se cuenta ya en

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