TE281 - Tierras Agricultura

nº 281 93 ‘LA GESTIÓN DEL VIÑEDO EN EL INVIERNO’ II JORNADA TÉCNICA Y DE CAMPO precipitados ahora disueltos. Durante el tiempo de espera se puede ir inyectando el desincrustante en otros sectores de la finca. La limpieza de goteros nos sirve para identificar de manera más fácil, al no haber vegetación, las fugas que se han producido por la maquinaria, roturas por la vendimiadora, mordeduras de fauna silvestre o perdigones. El invierno también es la época ideal para sustituir goteros con bastantes años de uso, en los que se observan muchas fugas por degradación del material, o que se comprueba que el riego ya no es homogéneo. Es importante dejar abiertas durante el invierno las válvulas finales de las tuberías terciarias, para evitar roturas por hielo. MANTENIMIENTO FITOSANITARIO Los tratamientos de invierno en viñedo tienen como objetivo eliminar o reducir los problemas originados por enfermedades durante la primavera y verano. En este apartado nos centraremos en el control de oídio, enfermedad endémica en nuestra región, para lo cual los tratamientos durante este periodo destruyen las formas invernantes del hongo, con lo que los daños posteriores sobre la vegetación serán menores y conseguiremos una disminución de los tratamientos fitosanitarios realizados en la fase vegetativa. La mejor época para realizar estos tratamientos va desde la caída de las hojas hasta el inicio del lloro de la viña, aconsejándose los meses de diciembre, enero y febrero. Si vamos a enterrar los restos de poda o si se dejan amontonados sobre el terreno, el tratamiento debe realizarse antes de la poda. El producto más utilizado es el polisulfuro de calcio, con una dosis aproximada de 10 litros de producto por hectólitro (10%). Los tratamientos de invierno actúan por contacto, por lo que hay que mojar bien todas las partes de la cepa. Los polisulfuros se utilizarán solos, no se deben mezclar con compuestos de cobre o insecticidas. Estas aplicaciones están especialmente recomendadas si el cultivo ha tenido ataques intensos de oídio en la pasada campaña. El polisulfuro de calcio es un producto corrosivo, por lo que habrá que utilizar maquinaria adecuada que deberá ser lavada escrupulosamente después del tratamiento. MANTENIMIENTO SUELO En cuanto al mantenimiento del terreno, si no se dispone de una cubierta vegetal implantada en nuestro viñedo, a finales de la parada invernal es el momento de empezar a controlar las malas hierbas que van a ser competencia directa por los nutrientes con nuestro cultivo. Como método mecánico más importante tenemos el pase de cultivador e intercepas, que nos aportará aireación al suelo, textura en cuanto a que se desmenuzan los terrones formados por las lluvias en terrenos arcillosos, un mullido a la capa superficial y, además, nos evita pérdidas de agua y humedad por capilaridad, muy importante en viñedos de secano. Otra práctica común en invierno es el subsolado, siempre realizado en calles alternas, con el objetivo de romper la suela de labor ocasionada por las labores de arado a lo largo de los años y por la compactación del paso de maquinaria. Se puede hacer con una púa central, por el medio de la calle, o con 2 púas, siempre dejando mínimo un metro de distancia entre la púa y la línea de plantas, para no comprometer la viabilidad de las raíces. Como método químico, el final del invierno es la época perfecta para el uso de herbicidas debido a que las lluvias facilitan la buena penetración y optimización de sus efectos. Una buena aplicación a tiempo nos facilitará el posterior control durante el ciclo, reduciendo el número de pases de cultivador necesarios durante el resto del año. MANTENIMIENTO DE ESPALDERAS Una vez llegadas las primeras heladas, con Momento de la reposición de los goteros de riego. Trabajo de mantenimiento del suelo con cultivador.

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